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Ni una pata menos

por Alina Bárbara López Hernández 13 noviembre 2019
escrito por Alina Bárbara López Hernández

Las personas

Pasé buena parte del mes de octubre luchando por la vida de Pichy, mi pequeño chihuahua. No se pudo ganar esa batalla, pero en el camino, día tras día en la clínica veterinaria de Matanzas, aprendí más de la bondad humana y me convencí de que cuando se habla de la pérdida de valores no se tienen en cuenta muchas cosas importantes.

Lo primero fue percatarme de las condiciones en que laboran los veterinarios de una clínica estatal. El doctor Rasiel y su pequeño equipo son personas de gran vocación, pero limitadas por escasos recursos. No disponen de medicamentos. Ni siquiera están autorizados a emitir recetas. Apoyan sin embargo a todas las personas que protegen a los animales callejeros. Ellos mismos, allí en la propia clínica, cuidan permanentemente de un perro y dos gatas ciegas.

Lo segundo fue poder escuchar, y disfrutar, las muchas anécdotas de bondad humana y amor por los animales:

Tiene ochenta y tres años, pero se conserva fuerte. Es muy locuaz y me cuenta su historia mientras el doctor esteriliza a la perrita que trajo. Trabaja comprando pan en la madrugada para proveer a varios dueños de cafeterías que le pagan por ello. Cuida de alrededor de veinte perros que vienen a alimentarse a su patio diariamente. Los vecinos ayudan en algo. Arroz, boniato y, en ocasiones, vísceras o pescado.

Dentro de la casa solo tiene cinco, no caben más. Tres eran propios y dos fueron abandonados por sus vecinos al permutar. Los perros, ya viejitos, corrieron varias cuadras tras el camión de la mudanza. Cansados, volvieron y se echaron en su portal. Les abrió la puerta. Agradece al doctor su apoyo en la esterilización de los perritos. «Bastante sufren ya mijita, hay que evitar que nazcan sin hogar», me dice. La adoré.

Es joven y dispuesta. Se ve que sabe tratar con animales. Llegó con una perra parida y su pequeño cachorro. La recogió en la terminal porque le avisaron que llevaba dos días de parto y solo había nacido vivo uno de la camada. Le ponen suero y recetan antibióticos. No es el primero que trae, cuenta la recepcionista. Ahora la tendrá en su casa hasta que se reponga e intentará buscarle un hogar. Acaricia a la perrita y le habla.

Le celebro a la perra en lo que espera su turno. Es sata, pero muy bonita y se ve cuidada. La mujer, de mediana edad, responde: «No es mía. Vive en mi centro de trabajo. Es de todos. Le traemos comida, la bañamos cuando hace falta y ahora la traje a esterilizar. Si tuviera una casa grande la llevaría conmigo. Pero allá está bien, la atendemos y ella paga con fidelidad y cuidando como una guardiana las áreas del centro».

Las personas allí tenían algo diferente en la mirada. Pregunté, pero ninguno pertenecía a grupos de protección animal.

Las redes

Animalistas, protectores, defensores de los animales, así les dicen… Han asumido gran relevancia en las redes sociales, pero es evidente que ya eran una red de ayuda y defensa. Comparto toda la información sobre su benéfica labor, que me llega sobre todo desde dos de sus grupos que se observan muy organizados: Cubanos en Defensa de los Animales (CEDA) y Protección Animales de la Ciudad (PAC).

Adriana Bárbara García, una protectora residente en la provincia de Ciego de Ávila, miembro de Esmeralda Grupo de ayuda y protección animal, me ha hecho descubrir otras muchas asociaciones dispersas por el país, menciono algunos de ellos sabiendo que quedaré en deuda con otros:

  • Asociación Cubana Protectora de Animales y Plantas (ANIPLANT)
  • Callejeros en Adopción
  • Bienestar Animal en Cuba (Bienac)
  • Huellas Callejeras de Cuba, de La Habana
  • Callejeros Olvidados y Perros Callejeros, ambos de San Juan de los Remedios
  • Mejores Amigos, de Matanzas
  • Grupo de la Iglesia de la Comunidad Metropolitana de Cuba
  • Veterinarios por la Protección Animal (VESPA)
  • Proyecto de la Facultad de Medicina veterinaria de la Universidad Agraria de La Habana
  • Santiagueros por el Bienestar Animal (SALBA)
  • El refugio de Yoanne Lisbet Valdés Caballero en Sancti Spiritus o el de La Milagrosa en defensa de los animales desamparados, dirigido por Milagros Mailyn González en La Habana

Existe un mapa, elaborado por la organización Cuban Animal Rescue, que grafica la distribución espacial de los grupos de protección animal en la Isla. Liudmila Morales Alfonso, cubana, docente e investigadora en temas de justicia social y candidata doctoral por la Universidad de Salamanca, me aclara que algunos grupos tienden a disolverse en poco tiempo y surgen nuevos, de ahí que el mapa puede estar desactualizado; sin embargo, puede ofrecer una idea de la fuerza del activismo en favor de la causa animal.

A Liudmila le solicité una breve caracterización del fenómeno, este es su punto de vista:

Los grupos de protección animal en Cuba están haciendo un trabajo bastante amplio, dada la situación de maltrato hacia estos que se vive en el país, normalizada culturalmente y propiciada por políticas de manejo de la Zoonosis que están muy lejos de la perspectiva proteccionista o de derechos. Su número ha crecido exponencialmente en los últimos años y a lo largo del país, aunque hay mucha variedad. Tenemos desde grupos formales y consolidados, con cientos de miembros que cumplen diferentes funciones, hasta pequeñas iniciativas de dos o tres personas. Sin embargo, los problemas que enfrentan tienen una base común, a partir de dos puntos.

El primero es la falta de reconocimiento legal, que los limita en su interacción con instituciones del Estado, así como con individuos y otras organizaciones de la sociedad civil ante casos de maltrato, por ejemplo. El segundo son las dificultades materiales para desarrollar su labor, lo que complica tanto los rescates como la atención a los animales y la creación de refugios. Esa situación se complica dado que Cuba no cuenta con una ley de protección animal ni con instrumentos jurídicos que garanticen condiciones mínimas para el activismo por esta causa.

Ante ello, los grupos ponen en práctica diferentes estrategias para el trabajo coordinado, que involucran redes familiares, geográficas y sociales. Esas redes también se han venido fortaleciendo a medida que su trabajo se extiende y se conoce mejor. El proceso involucra vínculos tanto locales y nacionales como transnacionales.

Los grupos de protección animal aúnan personas de diversas generaciones, aunque se observa en las imágenes de sus miembros un gran número de jóvenes, algo muy alentador.

Las acciones están bien coordinadas: detección de un caso de maltrato o abandono, a veces de pérdida; rescate; aviso para trasladar a un hogar de acogida o un refugio, tratamiento inmediato y gestión en procura de medicamentos; esterilización si es pertinente, y, una vez salvado, se pone en aviso de adopción. La mejor parte es cuando el animalito finalmente llega a ser adoptado. Los textos de los anuncios están bien redactados por lo general y apelan a los sentimientos más generosos del ser humano.

Esta es Esmeralda, la primera rescatada por el grupo avileño y que le dio nombre a la asociación.

Foto cortesía de Adriana García

Debajo verán una imagen difundida por CEDA con la secuencia completa de un caso, desde el rescate hasta la adopción.

Foto Facebook

Los resultados del trabajo de los grupos de protección son harto elocuentes. PAC nos notifica en esta imagen un resumen de sus logros en rescates y adopciones correspondientes al año 2018.

Foto Facebook

La necesidad de coordinar acciones con inmediatez, que es un requerimiento en este tipo de organización, ha provocado que las redes sociales se conviertan en una vía por excelencia para los rescatadores de animales. Estos grupos generan un voluntariado que se aprecia dedicado en cuerpo y alma a esa humanista y meritoria tarea. Sus simpatizantes y seguidores crecen cada día.

La Ley

No existe en Cuba una ley de protección animal. Muchos la pidieron en los debates previos a la aprobación de la nueva Constitución, pero no fue incluida. La respuesta cívica pronto llegó en forma de una marcha pacífica, organizada el 7 de abril de este año para la habitual peregrinación hasta el cementerio de Colón, donde se encuentra la tumba de una afamada protectora de animales.

Para sorpresa de muchos, se logró que fuera la primera marcha autorizada a portar carteles de una organización no legalizada en el registro de asociaciones. En las pancartas se pedía la aprobación de una Ley de protección animal.

El nombre de Beatriz Batista se dio a conocer como una de las artífices de la aprobación. Con su cara bonita y sus veintiún años, esta estudiante de Comunicación Social ha demostrado que sabe hacer bien las cosas. Ella y Odalys Jaramillo, otra protectora, lograron que el gobierno del municipio Plaza permitiera la marcha. Cientos de personas se les unieron ese día.

En La Habana radica la Asociación Cubana Protectora de animales y Plantas (ANIPLANT), presidida por Nora García. Es la única asociación con estatus de ONG, ya que la Ley de Asociaciones 54/1985 permite una sola por finalidad. ANIPLANT tiene filiales en Varadero, Cárdenas, Caibarién, Villa Clara y otros lugares, pero el proceso es engorroso y demora.

Hace más de un año se promete que el Ministerio de la Agricultura trabaja en un proyecto de Ley, pero no ha habido apremio alguno, que se conozca, por parte de la ANPP, que ocupada en la producción del voluminoso cuerpo legal derivado de la nueva Constitución, ha demorado demasiado una situación sensible y humana.

Para agravar las tensiones, en los últimos días la institución Zoonosis arreció su campaña de recogida de animales callejeros en la capital. Las imágenes tomadas eran de gran crueldad. Después se supo que en apenas unas horas los habían sacrificado. En Cuba se utiliza para ese fin la estricnina, un producto rechazado en casi todo el mundo por la agonía que provoca en los animales.

Foto Facebook

La paciencia llegó a su fin. El 11 de noviembre, en horas de la mañana, una manifestación pacífica de protectores de animales se ubicó frente a la sede de Zoonosis. No habían avisado públicamente de su propósito, pero pronto se les unieron vecinos del lugar y otros protectores que lo supieron. En los carteles se podía leer: «Abajo Zoonosis», «Hablamos por los que no tienen voz», «Ni una pata menos», «Exigimos Ley de Protección animal Ya», «Cuba contra el maltrato animal», «Estricnina NO», «Esterilizar sí, matar no».

Foto Facebook

Las autoridades del orden público resolvieron civilizadamente la tensión. La Policía se retiró y se permitió que tres rescatadores entraran para dialogar. Mucha gente estuvo a la expectativa desde diversas partes de Cuba y también de otros países.

Lo próximo que se supo era que llegaron a un acuerdo: no seguirían capturando animales callejeros por el momento, y accedieron a entregar a casi todos los perritos que debían ser sacrificados. Se propuso una reunión al día siguiente donde diez activistas serían recibidos por las autoridades del Ministerio de Salud, al cual pertenece Zoonosis.

Las puertas se abrieron y el rescate de los perritos pudo efectuarse. La mayoría enfermos, temblorosos, miraban con esperanza a los que los llevaban en brazos con ternura. Si la bondad humana tuviera rostros, este sería uno de ellos.

Foto Facebook

Como bien asevera Liudmila Morales: «La creciente atención que está recibiendo el tema puede favorecer su trabajo, pero también ocasiona ciertos conflictos relacionados con el propio activismo de la sociedad civil en un país donde su expresión organizada sigue despertando resquemores».

El día 12 ocurrió la reunión y, lo que se ha reportado de ella en las redes da fe de la inclinación de las autoridades para colaborar en proyectos comunes con los rescatadores. No al sacrificio, creación y gestión de refugios, campañas de esterilización, y, sobre todo, acciones en favor de la concientización ciudadana para el cuidado y el no maltrato de los animales.

La lucha por la Ley de Protección Animal es un punto crucial en la agenda de los activistas. Más de siete mil personas han firmado en menos dos días en las redes solicitándola. Se espera una recogida masiva de firmas para el 16 de noviembre.

Este movimiento cívico, humanista, muestra que la sociedad civil cubana goza de buena salud. Expresa igualmente que el Estado puede ser parte de esa corriente autónoma, pero proclive a colaborar en todo con las autoridades por el bien de los seres que no tienen voz y que necesitan de la nuestra. Una voz hasta ahora tímida pero ya evidentemente decidida.

Mi hija llega. No sabe de lo que escribo. Me cuenta que muchos de sus amigos de la Facultad de Ciencias Médicas de Matanzas han creado un grupo en WhatsAppp para luchar por los derechos de los animales. Se llama UM No al maltrato animal.

Imagen Facebook

13 noviembre 2019 21 comentarios 445 vistas
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Para mantenernos entretenidos

por Harold Bertot Triana 1 noviembre 2019
escrito por Harold Bertot Triana

Los ejemplos recientes de Ecuador y Chile –por citar los más escandalosos—, hacen pensar, desde un prisma jurídico, cuáles son los límites que fijan las obligaciones internacionales en torno al uso de la fuerza por los agentes estatales contra las manifestaciones. Los oficiales de cualquier Estado son los encargados de garantizar la seguridad y salvaguardar el orden público, y pueden recurrir al uso de fuerza e, incluso, al uso de la fuerza letal, pero claro, hay límites.

En el ámbito interamericano de protección de los derechos humanos, órganos como la Corte Interamericana de Derechos Humanos –y también la inefable Comisión Interamericana—, han destacado que el uso de la fuerza se caracteriza por un carácter “excepcional”, es decir, para que el uso de la fuerza esté justificado debe satisfacer los principios de legalidad, absoluta necesidad y proporcionalidad. Pero cuál es el contenido de estos principios que son tan difíciles en ocasiones de evaluar y aplicar en cada una de estas situaciones y que insuflan las obligaciones internacionales en materia de derechos humanos que contraen los Estados.

Pues bien, habría que acudir a los Principios Básicos sobre el Empleo de la Fuerza y de las Armas de Fuego por los Funcionarios Encargados de Cumplir la Ley, adoptados por el Octavo Congreso de las Naciones Unidas sobre Prevención del Delito y Tratamiento del Delincuente, que se celebró del 27 de agosto al 7 de septiembre de 1990 en La Habana y al Código de Conducta para Funcionarios Encargados de Hacer Cumplir la Ley, aprobado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su Resolución 34/169, de 17 de diciembre de 1979, de los cuales podemos extraer algunas pautas:

Principio de legalidad:  El empleo de la fuerza debe estar dirigido a lograr un objetivo legítimo, debiendo existir un marco regulatorio que contemple la forma de actuación en dicha situación; se debe especificar las circunstancias en que tales funcionarios estarían autorizados a portar armas de fuego y se deben prescribir los tipos de armas de fuego o municiones autorizados, entre tantas otras.

Principio de absoluta necesidad: Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, en el desempeño de sus funciones, utilizarán en la medida de lo posible medios no violentos antes de recurrir al empleo de la fuerza y de armas de fuego. Podrán utilizar la fuerza y armas de fuego solamente cuando otros medios resulten ineficaces o no garanticen de ninguna manera el logro del resultado previsto.

Principio de proporcionalidad: Los agentes legitimados para hacer uso de la fuerza deben aplicar un criterio de uso diferenciado y progresivo de la fuerza, determinando el grado de cooperación, resistencia o agresión de parte del sujeto al cual se pretende intervenir y con ello, emplear tácticas de negociación, control o uso de la fuerza, según corresponda, pues su despliegue de fuerza debe perseguir en todo momento reducir al mínimo los daños y lesiones que pudieran causarse a cualquier persona. Para evaluar la proporcionalidad de las intervenciones de las autoridades del orden, debe tomarse en cuenta la intensidad y peligrosidad de la amenaza; la forma de proceder del individuo; las condiciones del entorno, y los medios de los que disponga el funcionario para abordar una situación específica.

Estos son criterios para evaluar lo que vivimos ahora mismo en varias partes de nuestro continente, un escenario abierto de brutal represión. Pero nada, quieren que pensemos solo en Bolivia y sus elecciones.

1 noviembre 2019 23 comentarios 634 vistas
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René Fidel podría demandar funcionarios

por Giordan Rodríguez Milanés 25 septiembre 2019
escrito por Giordan Rodríguez Milanés

A partir hoy, el Dr. René Fidel González García podrá establecer demanda ante el Tribunal Supremo Popular contra la viceministra primera del Ministerio de Educación Superior (MES) por abuso de poder, o contra la Presidencia del Consejo de Estado por no atender la reclamación hecha por un ciudadano.

El doctor en Ciencias Jurídicas René Fidel González García fue expulsado de la Universidad de Oriente hace dos años, y le fue invalidada su categoría docente, por iniciativa de la actual viceministra primera del MES, Martha del Carmen Mesa Valenciano, al considerar esta que, con las publicaciones del doctor en sitios de izquierda como Rebelión y LJC, perdía prestigio como profesor.

No fueron atendidas ninguna de las peticiones y quejas presentadas por González García a las diversas instancias de la Fiscalía General de la República –órgano del que él mismo fue miembro—. Tampoco sus quejas emitidas al Consejo de Estado y a la Presidencia de la República. Según la Instrucción 245/2019 del Tribunal Supremo Popular, aparecidas el pasado 21 de junio en La Gaceta Oficial, René Fidel podría ser el primer cubano en interponer una demanda  contra el Presidente del Consejo de Estado o cualquier funcionario del más alto rango cubano, desde 1959 hasta la fecha.

Destacadas personalidades de diversas posturas ideopolíticas han manifestado de diversos modos su respaldo al doctor René Fidel, y le han pedido al gobierno que responda a sus quejas y peticiones, entre ellos el politólogo Esteban Morales.

25 septiembre 2019 8 comentarios 300 vistas
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El Estado Socialista de Derecho

por Daniel Rafuls Pineda 22 septiembre 2018
escrito por Daniel Rafuls Pineda

Art.1: “Cuba es un Estado socialista de derecho, democrático, independiente y soberano, organizado con todos y para el bien de todos…”

Así, con el enunciado exergo, se inicia el nuevo Proyecto de Constitución de la República de Cuba que, desde el pasado 13 de agosto y hasta el 15 de noviembre del año en curso, ha comenzado una etapa de discusión popular, masiva e inédita en relación a otras partes del mundo. Pero, más allá de lo novedoso de su formulación, convendría recordar cuándo surge el término “estado de derecho”, cómo es entendido política y académicamente hoy y qué de particular puede tener su empleo en el contexto actual de construcción del modelo económico y social cubano.

La expresión Estado de derecho, en términos convencionales, es equivalente al concepto hispano “imperio de la ley” o a lo que los anglosajones denominan “Rule of law” que significa regular la existencia del Estado a partir de leyes concretas[1]. Pero aunque algunos autores se refieren a Inmanuel Kant como precursor intelectual del concepto[2], tampoco es falso que su origen etimológico parece remontarse a la doctrina alemana del “Rechtsstaat” (Estado constitucional o de derecho) que se hizo pública, próximo a la segunda mitad del siglo XIX, para oponer el naciente estado burgués a la política estatal aristocrática[3].

El Estado de derecho, sin embargo, vinculado, sobre todo, a resaltar valores de los sistemas políticos capitalistas, pero utilizado también para denigrar la legitimidad de estados como China, Vietnam, Corea del Norte o Cuba, ha sido presentado a través de dos dimensiones básicas.

Una primera dimensión, más formal, que hace depender el poder del Estado, con todas sus estructuras y funciones, de procedimientos legales establecidos, lo que no necesariamente excluye los llamados estados autoritarios[4] por su potencial apego a determinadas normas y regulaciones jurídicas[5]. Y otra dimensión, más compleja aún, predominante en los espacios políticos y académicos contemporáneos, y “cuantificada” por lo que se ha dado en llamar Índice del Estado de Derecho[6], que considera no solo la existencia formal de leyes que regulen, globalmente, el Estado, a través de sus estructuras, mecanismos y funciones, sino que normen también sus contenidos y límites, lo que llega a precisar, con mayor profundidad, su relación con el ciudadano en concreto y la sociedad civil en su conjunto.

Esta segunda manera de entender el Estado de derecho que, expresamente excluye los llamados estados totalitarios[7]y que, según los medios de difusión y la convicción conformada en millones de personas, suele llamarse “democracia plena”, se articula alrededor de tres ideas esenciales que no deben ser soslayadas:

  • Primero, la existencia de la división clásica de los tres poderes: Legislativo, ejecutivo y judicial que no solo cumplan funciones autónomas y diferentes, y despersonalicen las decisiones, sino que tampoco, por separado, puedan tener jurisdicción decisional sobre los otros poderes.
  • Segundo, la habilitación de un conjunto de mecanismos y procedimientos que, al tiempo que regulen, legalmente, la elección de representantes a las distintas instancias de poder del Estado, también normen, desde el punto de vista legal, las vías para revocarlo.
  • Y tercero, la garantía de que toda norma jurídica y cualquier funcionario del Estado cuando las aplica, respete, promueva y consagre los derechos esenciales que emanen de la naturaleza de las personas y de los cuerpos intermedios que constituyen la trama de la, tradicionalmente llamada, sociedad civil. Es lo que exige la existencia de regulaciones jurídicas que protejan a los ciudadanos (independientes o agrupados en empresas privadas o cooperativas,  ONG, iglesias, asociaciones sindicales, partidos políticos y, entre otros grupos humanos, los movimientos sociales) de los potenciales desmanes del poder público.

En este sentido, para legitimarnos, en Cuba, como “Estado de Derecho” y democrático, no basta con declarar políticamente que tenemos un Estado institucionalizado, con funciones y límites, bien diferenciadas legalmente, que nada tiene que ver con la  tripartición de poderes[8] defendida, en particular, desde Occidente. Tampoco es suficiente recordar que disponemos de una Ley (No.89/ 14-sept.-1999) de Revocación del mandato que, por diferentes causas, y a diferencia de la mayoría de los Estados, permite poner fin, en cualquier momento, a la condición de representantes públicos.

Además, no obstante ser cierto que disponemos de un amplio historial práctico de beneficios sociales, en las esferas de la salud, la educación, la cultura, así como en la seguridad y asistencia social, igualmente debemos probar que, desde el punto de vista legal, tampoco hay impunidad para ningún funcionario del Estado, en especial, cuando viola derechos ciudadanos plasmados en nuestra Constitución, lo que requiere un análisis más detallado.

[1]Según los autores J. Mark Payne y Pablo Alonso, para que exista un Estado de derecho debe coincidir que el Derecho, sea el principal instrumento del gobierno, que la ley sea capaz de guiar la conducta humana y que los poderes la interpreten y apliquen congruentemente. Ver: República del Perú: Evaluación de la gobernabilidad democrática. Madrid (2007): Universidad Complutense, Instituto Complutense de Estudios Internacionales. p. 66.

[2]Sobre todo, por ejemplo, a partir de su propuesta acerca de que los hombres tienen la obligación absoluta- imperativo conceptual- de regular su conducta y de su defensa del principio de separación de poderes en ramas legislativa, ejecutiva y judicial.

[3]Fue a partir de esa fecha, con la publicación del libro “La ciencia de la política alemana de acuerdo a los principios de los Estados de derecho” (Tübingen, 1833), de Robert von Mohl que comenzó a utilizarse el término. Para mayor precisión ver del autor Antonio Javier Abellán (2015), La doctrina del Estado de derecho. Montesquieu ha muerto, parte IV, http://entierradeinfieles.blogspot.com/2015/04/la-doctrina-del-estado-de-derecho.html> [10/2/2016].

[4]La Ciencias Política occidental considera “autoritario” a aquellas ideologías, movimientos y estados, cuyo liderazgo, no admite crítica. Se caracteriza por el abuso de poder en detrimento de las libertades ciudadanas. El término toma relevancia con el nacimiento del fascismo. Para ampliar ver: “Autoritarismo”, en Diccionario de la lengua española(23.ª edición). Madrid: Espasa (2014)

[5]Autores como Joseph Raz son partidarios de usar el término Estado de derechoen sentido formal, reduciendo el estado de derecho al principio de legalidad. Él decía: “Un sistema jurídico no democrático, basado en la negación de los derechos humanos, en una gran pobreza, en segregación racial, en desigualdad sexual y en la persecución religiosa puede, en principio, conformarse a los requerimientos del Estado cualesquiera de los sistemas jurídicos de las más ilustradas democracias occidentales. Esto no significa que este sistema sea mejor que aquellas democracias occidentales. Sería un sistema jurídico inconmensurablemente pero sobresaldría en un aspecto: en su conformidad al Estado de derecho”. Ver: La autoridad del Derecho. Ensayos sobre derecho y moral, 2ª ed., Instituto de Investigaciones Jurídicas, UNAM, (1985), México, pág. 264

[6]Según el World Justice Project (WJP), la referida segunda dimensión del Estado de Derecho “Justicia Mundial”, se mide por 47 criterios agrupados en los sgtes 8 parámetros: el control de los poderes gubernamentales; ausencia de corrupción; orden y seguridad; protección de derechos fundamentales; gobierno abierto; cumplimiento de la ley; acceso a la justicia civil; y acceso a la justicia penal (Project, WJP Rule of Law Index 2014, 2014), lo que hoy se evalúa en unos 100 países.

[7]El término “totalitarismo”, cuyo origen también se vincula al denominado estado “totalitario” que se promovió bajo el mandato del fascista Benito Mussolini en Italia, parece haberse empleado, por primera vez, a partir de 1941, para denominar al nazismo alemán. Una parte no despreciable de la literatura universal llama estados “totalitarios”, como otros autores los denominan “estados autoritarios”, a países donde, se considera, existe una negación de la libertad y los derechos individuales, desconociendo además la dignidad de la persona humana. Esa misma literatura no solo considera “estados totalitarios” a las monarquías absolutas, sino también a todas las experiencias de construcción del socialismo conocidas hasta hoy, comenzando por el mandato de Stalin en la antigua URSS.

[8]La tesis fue promovida por el Barón de Montesquieu, en su obra de 1789 El Espíritu de las leyes (Edit. Porrúa, México, 1992, p.104). Allí auguró acerca de la necesidad de crear toda una estructura del Estado, conformada por instituciones de carácter ejecutivo, legislativo y judiciales, que garantizara la existencia de un balance adecuado y justo, respectivamente, entre los poderes del Monarca, el parlamento y los jueces, de manera que ninguno impusiera sus prerrogativas sobre el otro.

22 septiembre 2018 12 comentarios 413 vistas
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Tribuno de la plebe

por Mario Valdés Navia 31 julio 2018
escrito por Mario Valdés Navia

La tradición democrática greco-latina siempre ha estado presente en el imaginario del movimiento revolucionario y comunista internacional. La apelación a Espartaco, los hermanos Graco y las luchas de la plebe romana forman parte indisoluble de la acumulación cultural de la izquierda mundial. En sus luchas contra el soberbio patriciado, una de las mayores conquistas plebeyas fue la instauración de la figura de los tribunos de la plebe –primero tres, uno por cada tribu, pero llegaron hasta diez–, funcionarios investidos de amplios poderes para defender a los comunes de los excesos del Senado y los cónsules, autoridades patricias que hubieron de entregarles una gran cuota de poder ante la amenaza de la plebe de abandonar Roma e irse a fundar otra ciudad.

Más de dos milenios después esa autoridad se ha modernizado y trastocado en la figura constitucional del Defensor del Pueblo (DDP) que se ha extendido a la mayoría de los países, a veces con otros nombres pero con funciones similares: garantizar los derechos de los habitantes ante abusos por parte de los poderes políticos.

El DDP suele ser un cargo elegido por el parlamento de una lista de candidatos que presentan diferentes fuerzas políticas y de la sociedad civil, y que es sometida a un previo debate público. Tras ser elegido, es independiente del legislativo, aunque tampoco puede vetar sus resoluciones como los antiguos tribunos. En América Latina el único país que no lo tiene es Cuba.

En los debates de la propuesta constitucional no se ha planteado la instauración de esta figura, o de alguna similar. ¿Pensarán que no hace falta una figura como esta en nuestra constitución socialista porque se considera que todo el aparato judicial y político cubano es defensor del pueblo y nunca hará alguna trastada a ningún ciudadano/ciudadana? Por ese camino también se podrían eliminar los abogados, y hasta los jueces, pues el propio fiscal bastaría para interpretar y aplicar la ley. A fin de cuentas, hoy es la Fiscalía la institución encargada de suplir las funciones del DDP en nuestro sistema judicial.

Por suerte, hay instituciones estatales, como el MININT, que posee un Departamento de Atención a la Ciudadanía que actúa como un defensor de los derechos humanos violentados por la acción de algún funcionario público al menos en los predios de ese ministerio.

Yo prefiero que haya muchas instituciones poderosas que protejan los derechos del ciudadano/ciudadana, y si se solapan en algún momento pues mucho mejor. El DDP podría ser una de las que ayude a blindar nuestro estado de derecho ante los desmanes de los burócratas empoderados, ya que muchas veces los comunes llegan a sentirse impotentes en la defensa de sus derechos individuales frente a los poderes públicos desbocados. Por eso incluiría esta figura y aún les añadiría otras que la complementen, como la de un Tribunal Constitucional –o como se le quiera llamar–, y la introducción sin cortapisas de derechos mundialmente reconocidos como el habeas corpus y el habeas data que son inmanentes a la condición de terrícolas vivos del año 2018.

31 julio 2018 39 comentarios 292 vistas
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leyes

La Ley de Leyes Universal

por Nyls Gustavo Ponce Seoane 27 enero 2017
escrito por Nyls Gustavo Ponce Seoane

La Ley de Leyes Universal. Su proyección y aplicación política y social (en contra del dogmatismo y por una nueva mentalidad en Cuba y en el mundo)

 A José Julián Martí Pérez, promotor de los principios y precursor de esta Ley, en el 164 Aniversario de su Natalicio (1853-I-28 ^ 2017-I-28).

INTRODUCCIÓN

 “El Universo, es lo universo. Y lo universo, lo uni-vario, es lo vario en lo uno” (1)

En el Universo todo es diverso. A su vez, todo es análogo. Semejanzas y diferencias coexisten. Están indisolublemente ligadas: en las mismas especies de cada uno de sus reinos, cada una es, individualmente, otra, lo que señala la singularidad dentro de la generalidad.

Este es un hecho que se observa en todas las formas y procesos funcionales de vida, animada e inanimada, a las cuales le es inherente el movimiento de:

  • origen o génesis,
  • desarrollo o evolución; y por último,
  • muerte o transformación, que las caracteriza en general.

 Son fenómeno y funciones que se revelan en todos los mundos, vinculándolos entre sí, desde el macro mundo cósmico, hasta el micro atómico, pasando por el meso mundo de los reinos mineral, vegetal, animal y social.

LA EXPLOSIÓN DE UN TÉRMINO.

“Para mi la palabra Universo explica el Universo: versus uni: lo vario en lo uno” (2)

Así, en el Universo, analogía y diversidad se reflejan dondequiera. Absolutamente todo es similar y distinto: en el plano de especie, género, orden, clase y reino. Las analogías y diferencias también se encuentran en sus funciones y en sus derivados.

Es un hecho existente que se percibe por la conciencia humana a través de sus formas de conocer: las ciencias y las artes, que se expresan por medio de variados lenguajes y terminologías, las cuales se han desarrollado e ido acentuando con el decursar del progreso científico técnico y por los conocimientos acumulados por la Humanidad a lo largo de su Historia.

La analogía (del griego ana – reiteración o comparación y logos – estudio), es una relación de correspondencia o comparación de atributos parecidos en seres o cosas diferentes a través de características generales y particulares comunes, lo que permite comparar un objeto con otros en sus semejanzas y en sus diferencias.

La Diversidad (del lat. Diversitas – abundancia, variedad; pero también del prefijo di – divergencia o separación y del verbo vertere – girar, dar vueltas, por lo tanto, divertere – girar en dirección opuesta), es una noción que hace referencia a la variedad y a la abundancia de cosas distintas.

A pesar de ser conocido, a este último término no se le había prestado tanta atención, ni se había extendido tanto su uso como en la actualidad, a tal punto que se puede decir que ha sido algo olvidado su indisoluble o eterno acompañante natural: la analogía ¿Por qué?

La extinción masiva de especies a la que asistimos, y el peligro de extinción de la propia especie humana por la sobreexplotación a que está sometido el planeta debido la actividad antrópica, condujo a la necesidad de que surgiera en la mente de los hombres, para su propia defensa, el término diversidad biológica o biodiversidad, relacionado con la supervivencia de la vida biológica en la Tierra.

La biodiversidad o diversidad biológica es el término que se empleó y emplea para referirse a la amplia variedad de seres vivos sobre la Tierra. Comprende igualmente la variedad de ecosistemas y las diferencias genéticas dentro de cada especie que permite la combinación de múltiples formas de vida, y cuyas mutuas interacciones con el resto del entorno fundamentan el sustento de la vida sobre el planeta.

Es por esto que desde sus inicios fue acompañado de los términos de diversidad genética, taxonómica y ecológica.

Dicho término se utilizó por primera vez en septiembre de 1986 en el título de una conferencia sobre el tema, el National Forum on BioDiversity, convocada por Walter G. Rosen, a quien se le atribuye la creación de la palabra (3).

La Cumbre de la Tierra celebrada por Naciones Unidas en Río de Janeiro en 1992 lo hizo suyo y reconoció la necesidad mundial de conciliar la preservación futura de la biodiversidad y la vida en la Tierra con el progreso humano, según criterios de sostenibilidad o sustentabilidad promulgados.

Entonces, su extrapolación y homologación a las ciencias y a otras artes, por su importancia conceptual, no se hizo esperar y a partir de la década del 90 surgen o se comienzan a utilizar ampliamente los términos de geodiversidad, diversidad religiosa, sexual, cultural, lingüística y otras.

Diversidad es a lo que se le podría decir, en otras palabras, variedad, pues ¿cuántas variedades de colores, de formas, de países y otras, existen? Diversidad y variedad imperan por doquier.

LA LEY

“El Universo es palabra admirable, suma de toda filosofía: lo uno en lo diverso, lo diverso en lo uno.” (4)

Popularizado el término y estimulada la atención y el interés social por el cúmulo de información científica e histórica que ha surgido en torno a la necesidad de la supervivencia humana, este se repite cotidianamente en y por todos los medios. Se puede llegar a la conclusión de que se está en presencia de una ley muy conocida.

Sin embargo, vaya sorpresa: en las ciencias físicas, naturales y exactas, así como en las sociales, solo se puede encontrar lo expuesto sobre los distintos términos y sus definiciones, en concordancia con su objeto de estudio y que se han desarrollado explosivamente en los últimos tiempos, pero no se encuentra enunciado de ley alguna al respecto. Sí se realiza una búsqueda más detallada, que se apoye en la red global donde casi todo se expone, ni enunciado ni formulación alguna de semejante ley se encuentra.

Estamos pues en presencia de una realidad que, aunque reconocida por todos, nunca se ha concientizado en forma de ley. No se ha formulado como lo que verdaderamente es o debe ser: una Ley Universal, que lo abarca todo como fenómeno existente que se repite en el Universo, el Mundo, la Naturaleza y la Sociedad, en todas sus formas y manifestaciones. Es prácticamente una verdad absoluta, porque hasta la propia verdad es diversa y variada.

El término se debe realizar como una ley que debe ser, más que general, universal, por abarcar todo el mundo material e inmaterial (espiritual) existente: desde los confines más recónditos del Universo y de las partículas elementales, hasta los fenómenos físicos—químicos naturales y sociales (incluyendo los psico-individuales y psico-sociales), conocidos.

Si se tiene en cuenta que “una ley científica es aquella que:

  • repite una relación constante entre uno o más fenómenos, factores o variables,
  • que se produce, surge y reproduce en condiciones determinadas,
  • que responden a normas y reglas constantes, invariables de las cosas y
  • que se expresa o matemáticamente o en un lenguaje formalizado”.

Se observa que ni esa expresión matemática ni ese lenguaje formalizado se halla para una ley de tal naturaleza como la que nos ocupa, y que debe ser la de la Diversidad Universal.

La más próxima o cercana existente por su nombre, no así por su contenido, fue el de la ley de la variedad requerida o de Ashby (5,6), que llevó al médico y neurólogo inglés William Ross Ashby (1903 -1972), a hacer una contribución decisiva a la consolidación de la cibernética moderna; y desde las especialidades de la neurología y la psiquiatría, a ofrecer la reproducción de la estructura y mecanismos de funcionamiento del cerebro humano.

De igual forma, se halló que la ley de la analogía la vinculan a asociaciones mentales con aspectos psicológicos individuales, o con el Todopoderoso, o que es un principio de interpretación del Derecho (7), que se sustenta en la semejanza que debe existir entre el caso previsto y el no previsto para una decisión judicial.

Frustrada la búsqueda del principio o ley que abarque a ambos términos universales, no quedaba entonces otra alternativa que asumir la definición, formulación y enunciación de la misma. Y así se hizo.

Ley de la Diversidad y Analogía Universales

En el Universo, el Mundo, la Naturaleza y la Sociedad, todo es diverso y análogo, en sus generalidades y en sus particularidades. Todo se comporta como una Unidad, compuesta de variedades generales y particulares.

Es la ley que condiciona la Unidad. Sin variedad no hay unidad, pues ella, objetivamente, siempre se manifiesta, explícita e implícitamente, tanto en fenómenos y cosas, como en sus funciones o procesos.

“El Universo, con ser múltiple, es uno” (8)

Las ramas de las ciencias y sus objetos de estudio se desarrollan, como premisa fundamental, en función de las leyes científicas que las rigen; leyes estas que pueden demostrarse mediante pruebas directas e indirectas para comprobar su veracidad. De ahí que el físico Max Karl Ernest Ludwig Planck (9,10) haya propuesto los siguientes principios que conforman las bases de la actividad científica:

– La Naturaleza existe de por sí, y el hombre no es sino una pequeña parte de ella.

– La Naturaleza es legal (satisface leyes) y la legalidad es causal (no hay azar objetivo).

– La realidad puede conocerse de a poco, aunque jamás perfectamente.

– La ciencia marcha de la diversidad a la unidad, de lo subjetivo a lo objetivo, y de lo relativo a lo absoluto.

Estos principios de Planck se pueden ampliar como fundamentos de la ciencia, y de hecho se han ampliado con los siguientes, aceptados por la mayoría de los científicos:

– Todo lo existente está regido por leyes naturales.

– Estas leyes son invariantes en el tiempo y en el espacio.

-La actividad del científico consiste en describirlas.

– La existencia de estas leyes es independiente de que el ser humano las describa o no.

Proyección político-social de la Ley de Leyes Universal.

“Todo es análogo en la tierra, y cada orden existente tiene relación con otro orden” (11)

 El concepto de ley científica y los principios enunciados no permiten dudar que los fenómenos y efectos análogos – variados de la Naturaleza se materialicen con sujeción a leyes constantes y fijas, mediante las cuales se realiza el orden universal.

Leyes y principios se pueden, deben y de hecho se aplican a la previsión del hombre a la infinita variedad de sucesos que rodean su vida. La previsión carecería de sentido y sería imposible si no existiesen leyes constantes sobre las cuales pudiera fundarse la presencia de los sucesos futuros.

 Por lo tanto, como La Ley de la Diversidad y Analogía Universales cumple y satisface tanto la definición de ley científica, como los principios expuestos que la sustentan en todas las ramas de las ciencias, incluyendo las sociales, se debe considerar su proyección política y social como muy útil para tratar de prever y evitar de que este nuevo milenio sea el último de la existencia humana sobre la faz de este astro.

De ahí su importancia, por lo que debe ser dada a conocer y enseñarse desde la mismísima escuela primaria, para su verdadera concientización; y no solamente emplearse como un término en cualquier medio, como un ejercicio intelectual más.

“Estudiar las fuerzas de la Naturaleza y aprender a manejarla es la manera más derecha de resolver los problemas sociales” (12).

La socialización de esta concepción como Ley en su aspecto político, ideológico, cultural y social, es fundamental ya que debe responder a la necesidad histórica de superar limitaciones, prohibiciones, acosos, presiones, imposiciones y discriminaciones que durante milenios han predominado a lo largo de la Historia humana, donde se han implantado ideo-hegemonismos, a la corta o a la larga insustentables, si no se tiene en cuenta la diversidad ideológica.

Más aún, cuando los que hicieron del marxismo un dogma establecieron, sustentaron y aseveraron que las leyes de la naturaleza no podían transferirse a las de la Sociedad. Contradicción absurda este si se sostiene también que la Sociedad forma parte de la Naturaleza. Desde luego, en el caso que nos ocupa, no se trata de una transferencia mecánica, sino analógica, por analogía, de acuerdo con las características del sujeto u objeto de que se trate.

Esta Ley debe ser la base para una auténtica tolerancia, que permita el respeto por la coexistencia de la diversidad de pensamientos. Sería el cimiento de la genuina dignidad plena del hombre y aún más, de la unidad en y con la diversidad. Sería tomar conciencia de algo nuevo o renovado, que reforzaría el término y definición utilizados. Sería la base sólida y verdadera de la futura sociedad siempre deseada de “con todos y para el bien de todos” (13) y de “igualdad y libertad plenas” (14).

La misma debe conllevar al fortalecimiento de la unidad, tanto a nivel global mundial (ONU), territorial (Organizaciones regionales), de un país, local, de una organización cualquiera, movimiento o partido. Solo cabría y habría que aceptar la variedad y la diversidad dentro de cada unidad, base para una verdadera y real democracia.

Como cada hecho o fenómeno lleva en sí su propia contradicción, esta tolerancia no debe ni puede ser de ningún modo ingenua, pues la misma no puede ir ni estar en contra de la Lucha por la Existencia o Supervivencia, que ha regido en la Naturaleza Biológica y mediante la cual todo ser vivo lucha por su existencia.

En otras palabras, el que es atacado para ser destruido tiene derecho a defenderse y a contraatacar Responde a una necesidad de cualquier especie biológica para no perecer ante un ataque que se le hace. Todo ser vivo, de una forma u otra, trata de trascender en el tiempo. Lo mismo, por analogía, ocurre con las ideas de los seres vivos llamados hombres.

Al poseer rasgos comunes, las luchas más severas se dan entre los individuos de la misma especie, al entrar en competencia por la comida o el hábitat. Y esto, acéptese o no, es un hecho objetivo que se ha transferido por analogía a la sociedad humana y a su mundo ideo-espiritual, como derivado de ella.

Si no, ¿Qué han sido y son las guerras?, ¿y las dictaduras religiosas e ideológicas que en el mundo han sido?, ¿Es necesario mencionarlas? Pues ahí están, para quien se quiera hacer el sueco: Los Imperios romano, mogol, otomano y yanqui, entre otros. La Inquisición, el fascismo, el nazismo, el neoliberalismo, también entre otros.

¿Y qué ha predominado? La imposición de las ideas mediante las armas, la fuerza, la presión y la coacción, cuando lo que ha debido predominar son la razón y el convencimiento.

La concientización de la Ley de la Diversidad y Analogía Universales podría dotar a la Humanidad de una mejor arma e idea sólida para el convencimiento y el logro de la armonía y unidad entre los hombres.

Permitiría una mejor posición para la lucha por la supervivencia humana y poder mitigar o neutralizar la posible contradicción que pueda existir con la Lucha por la Existencia, de cualquier persona por sus ideas, más aún si estamos viviendo momentos tales en que, o nos salvamos todos, o nos morimos todos.

Referencias

  • Martí, José. Obras Completas (OC). T. 11, pp.164-165.
  • Martí, José, OC. T.22, p. 255. Editora Nacional. La Habana, 1963.
  • https://es.wikipedia.org/wiki/Biodiversidad.
  • Martí, José, OC. T. 7, p. 250. Editora Nacional. La Habana, 1963.
  • https://es.wikipedia.org/wiki/William Ross Ashby
  • http://es.scribd.com/doc/57958841/20/Inmergencia
  • https://es.wikipedia.org/wiki/Analogía_(derecho)
  • Martí, José, OC. T.13, p.26 Editora Nacional. La Habana, 1963
  • https://es.wikipedia.org/wiki/ley científica.
  • https://wikipedia.org/wi9ki/Max_Planck
  • Martí, José.OC. T.14, p.20. Editora Nacional. La Habana, 1963
  • Martí, José. OC. T.13. p.52. Editorial Nacional de Cuba. La Habana, 1963
  • Martí, José, OC. T, 4 p.279. Editorial Nacional de Cuba. La Habana, 1963
  • Castro, Fidel. Concepto de Revolución. La Habana, Discurso en la Plaza de la Revolución. 1ero. de mayo, 2000.                                                ¡

La Habana, 15-25 de enero de 2017

27 enero 2017 39 comentarios 300 vistas
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La transparencia de una Ley de Aguas

por Javier Gómez Sánchez 15 noviembre 2016
escrito por Javier Gómez Sánchez

En la primera plana del diario Juventud Rebelde el jueves 10 de noviembre, podía leerse un llamativo texto. Se trataba del anuncio del inicio del debate parlamentario sobre la Ley de Aguas Terrestres por parte de los diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP)

Según se describe, la Ley de Aguas Terrestres tiene como objetivo ¨preservar los recursos naturales y favorecer un desarrollo sostenible en los órdenes económico y social¨ a través de la ¨regulación integrada de las aguas territoriales¨

Lo más llamativo es que la publicación hacía igualmente una convocatoria a todos los ciudadanos a tomar parte en el debate, enviando sus opiniones al correo electrónico leydeaguas@anpp. gob.cu

La información sobre el Proyecto de Ley según el texto de la nota podía ser conocida en la página web www.parlamentocubano.cu

Igualmente se publicaban los nombres y funciones de los diputados integrantes de la representación que conduce el debate, que por su carácter incluye a miembros de las comisiones de Asuntos Constitucionales y Jurídicos, de Industria, Construcciones y Energía, de la secretaría de la ANPP y de asesoría jurídica, los cuales trabajan junto a especialistas del Instituto de Recursos Hidráulicos para la confección de la mencionada ley.

Finalizaba haciendo énfasis en que ¨los parlamentarios y el pueblo están llamados a comprender las interioridades de esta propuesta, y sus dimensiones y beneficios, así como a tomar parte del debate que se realiza para perfeccionarla de cara a su puesta en vigor¨

Al terminar de leer no pude más que celebrar el hecho de que se haya abierto una convocatoria pública a toda la ciudadanía para elaborar una ley. Es un paso correcto que nos llevaría al socialismo próspero, sostenible y democrático que deseamos tener. Así con todos los apellidos que hay que ponerle, incluyendo al subrayado.

Esa es la democracia en el socialismo. Una magnífica oportunidad para que los que no se la imaginan, no tengan que esforzarse más por hacerlo y la vean. Un golpe para los que intentan mantener separadas en las mentes de quién los escucha, las palabras ¨democracia¨ y ¨socialismo¨.

Es un acto de madurez institucional, de evolución y sobretodo, definitivamente, de revolución. Porque no todos los parlamentos hacen un llamado de este tipo, ni crean mecanismos para ello. Si ya de por si debe ser democrático el acto de elegir a un diputado, más democrático aún debe ser abrir los debates parlamentarios a todo el pueblo, que no es solo trasmitirlos por televisión en un canal exclusivo.

Espero que lo que se ha hecho con esta ley se haga con todas y que se abran completamente las puertas de la Asamblea Nacional al conocimiento ciudadano.

Siempre habrá los que dirán que la mayoría de la gente en Cuba no tiene acceso a internet y tendrán razón. Pero más allá del internet que es importantísimo, esto se trata de crear otros ¨accesos¨. No se menciona como una vía exclusiva, si no la más rápida y practica de estos tiempos cuando se posee. El que prefiera o lo que pueda es enviar una carta que lo haga de esa forma. Si el internet se demora, que la participación llegue primero.

Por eso Lenin decía que el socialismo necesitaba de mucha preparación, pero que si se esperaba a tener esa gran preparación para hacer el socialismo, este no se haría hasta dentro de 500 años.

Que no haya que esperar tanto entonces para lograr lo que expresaba Alfredo Guevara cuando decía: ¨El Poder Popular no solo debe ser popular, sino que también tiene que ser poder¨

Personalmente no tengo mucho que decir sobre una Ley de Aguas. Pero creo que los cubanos amanecimos hoy un poco más libres.

15 noviembre 2016 60 comentarios 359 vistas
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El “Juego” en Cuba y las “Leyes Blandas”

por Consejo Editorial 8 septiembre 2014
escrito por Consejo Editorial

tabla de la bolita

Por: Héctor Hernández Vidal

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Siempre he estado orgulloso de vivir en un país donde se respeten las leyes, y sin ser especialista en Derecho, me atrevería a asegurar que la gran mayoría de las que tenemos vigentes las respetamos y se hacen cumplir, pero lo que me niego es a que existan otras que puedan ser consideradas “Leyes Blandas” y solamente quiero referirme en este post a las asociadas a penalizar el “Juego” en Cuba, aunque sé que dejo mucha tela por donde cortar.

No es que esté a favor o en contra del “Juego”, y lo digo en serio, me da igual, pero hay que aplicar una de dos variantes, o lo combatimos, o lo despenalizamos, pero que se cumpla con la ley, ese es mi punto. En Cuba se juega abiertamente a “la bolita”, hay barrios en los que el número que salió se grita de acera a acera, en otros la cosa es más discreta pero se juega igual. Con la red de informantes que existe en nuestro país, que está más que demostrada su eficiencia, se sabe donde está cada uno de estos bancos de bolita, es un fenómeno totalmente determinado, tolerado y difícil de eliminar, lo reconozco, es que muchos tiene el “Juego” como parte de su idiosincrasia. También está claro que cualquier Lotería del Mundo deja ganancias a su dueño y pregunto entonces ¿Sería muy loco pensar en una lotería nacional administrada por nuestro estado? China por ejemplo tiene Lotería y es uno de los espejos en que nos intentamos mirar cuando nos conviene, otros países como España, tienen varios tipos de loterías, pero por ejemplo una de ellas, la ONCE, supuestamente dedica sus ganancias a ayudar a las personas discapacitadas, lo dejo aquí y cada cual que reflexione…

“La bolita” no es el único juego con el que se convive en Cuba otro bien arraigado, quiérase o no, es la pelea de Gallos, con admiradores, detractores y hasta eufemismos para nombrar las Vallas, como el cartel que se puede ver en la carretera central en el tramo Matanzas-Limonar, donde pone “Coliseo de Lidia de Gallos”, pero por hoy dejo esto aquí, que ya lo de los Gallos da para otro post.

8 septiembre 2014 93 comentarios 579 vistas
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