¿Mercado es igual a desigualdad?

por Consejo Editorial

La revisión de los comentarios a mi último post me llamó a la reflexión. Da el pie forzado para tocar un tema del que ya he escrito: el mercado. Según pude apreciar, algunos consideran que entre mercado e igualdad social hay un antagonismo. Por tanto, debe escogerse si:

1- Tener mayor igualdad social -no hablo de igualitarismo-, con menos mercado,  más planificación central (más bien asignación central).

2- Más mercado, con mayor crecimiento económico, acompañado del aumento de la desigualdad. De forma tal, que no se pueden tener los dos a la vez -según el criterio en cuestión-.

¿Esas son las opciones? Lo primero que se aprende de la dialéctica, es a no aceptar opuestos ya establecidos formalmente: finito e infinito, ser y nada, concreto y abstracto – y en este caso mercado e igualdad social-, ya que nos obligan a seleccionar entre dos caminos que son ambos demostrables como verdaderos desde el punto de vista lógico. Fíjese que hay demostraciones y juicios muy racionales para defender un lado u otro (mercado acompañado de crecimiento o igualdad social). Por lo que me ahorraré ser parte de este ejercicio que termina en un debate de fe.

Siendo consecuente con esa dialéctica que menciono, se trata de rechazar la premisa de esos dos caminos, e iniciar la observación de la cuestión sin separar, para no caer en una falsa oposición, y escapar de ese partidismo. Sobre todo, porque el mercado y la igualdad social, no son fines de la sociedad en su mismos, sino expresiones de las dinámicas de esta.

Esa desviación del pensamiento de aislar formalmente y contraponer -aunque se ajuste a un modelo kantiano- no responde a la formación kantiana de quienes formulan tal antagonismo –aunque la reproduzcan  inconscientemente-, sino a lo que  identifican por mercado, o mejor dicho, “libre mercado”. Por eso, vayamos al grano.

Hay que señalar antes, que estas líneas van del mercado en el sector privado diferente del estatal, ya la forma mercantil también existe en la propiedad estatal.

Se piensa que el mercado es libre y esa libertad crea riqueza, pero lo hace generando desigualdad (ricos por un lado y pobres del otro). Pero, ¿cómo se hace rico el que lo logra? ¿En qué contexto, en abstracto? Sin incluir las respuestas a estas preguntas se estará hablando de mercado sin más, de un  mercado en cuanto tal, del “libre mercado”, del “puro mercado”.

Lo cierto es que nada es puro -no porque lo explique Hegel-, sino porque si miramos al mercado, este se da en un contexto social, político, moral, cultural, etc. Tal pureza solo tiene existencia en la abstracción, ya que existen en la sociedad todas esas dimensiones a la vez, y son inseparables. Por eso, ese puro mercado es -sin ofender- una auto-complacencia mental de algunos teóricos, que otros se han tragado como verdadera.

¿Está en algún lugar entonces aquel “libre mercado”? La noción del libre mercado, es la de un mercado que no es influenciado por nada, que está “puro”, y es un pensamiento que olvida el conjunto de reglas en las que el mercado cobra vida. Por ejemplo, un productor necesita normalmente que su producción esté autorizada legalmente a circular, y a través de la publicidad, que la gente conozca y se sienta atraída a su consumo.

Ilustrémoslo un poco. Miremos a la bandera del capitalismo: EUA. ¿A qué se dedican las grandes empresas, solo a ese “puro y libre mercado”? En realidad gastan mucho dinero en publicidad, porque necesitan llevar el producto a la sociedad. También hacen lobby para comprar políticos y otros  mecanismos ya conocidos, porque necesitan un sistema legal y la superestructura que los respalde. Entonces ese “puro mercado”, tiene que ir a lo social, lo político y demás, para poder garantizar su reproducción, es decir, la realización de los productos.

A quien le convienen las reglas del mercado (que ya vemos se crean desde afuera) como precios, subsidios, permiso de publicitar, control sobre las leyes, hacen abstracción de estas y hablan de libre mercado; y el que no se beneficia en ese marco, le suele dar por querer desaparecer al mercado, sin darse cuenta que lo que hay que hacer es cambiar las reglas de este. Lo que hace que el debate sobre el libre mercado, sea solo la lucha por conservar el ambiente del intercambio contra los que quieren cambiarlo.

En el caso de Cuba, entonces, ocurre que hemos venido construyendo un mercado en el sector privado desde hace varios, en el cual se crearon las reglas que favorecieron la desigualdad, que como todos, ni puro, ni libre.

Si hay personas en ese sector con altísimos ingresos (que no es necesariamente malo, sino solo un ejemplo), es porque nuestro sistema legal y su aplicación, las políticas económicas, y la cultura de consumo que se tienen en el país, lo han permitido. Es decir, han sido partícipe de ello.

Lo que no quiere decir, que de un día a otro se cambie el marco legal, y se ‘mueva” al mercado. Como ya mencioné, las separaciones solo tienen lugar en la mente, por tanto, ese mercado que puede ser cómplice de la desigualdad en Cuba, va acompañado de una moral, de una cultura, de lógicas de desenvolvimiento socioeconómicos y encadenamientos, de intereses ya creados, que no se desplazan mecánicamente al mover la cosificación de las leyes sociales: su forma legal.

Ese mercado fomentador de desigualdad hoy (que no es el único que lo hace), es el “monstruo” que nosotros mismos hemos creado, y cumple una función social a veces compatible con los intereses nacionales. Es el niño malcriado que comienza a dar problemas a los padres, pero que pudo ser evitado con la educación requerida: si en un país subdesarrollado donde los tipos socioeconómicos se dan anómalamente, se hubiese abierto curso a un mercado con un análisis de las reglas en las que se iba a insertar, y como construir estas en beneficio de la nación.

Tal vez cuando aprendamos que el mercado no es un mal necesario, sino simplemente necesario, resultado de la evolución social y como resultado de esta no puede escapar de su entorno, se comience o se mejore una política, en la que se le de un uso más racional. Después de todo, las transformaciones económicas en la Revolución, se hicieron para que el mercado (laboral, estatal, privado, monetario, etc) no continuara generando las desigualdades de aquel mercado que favorecía principalmente al capital extranjero y la burguesía nacional.

Las sociedades construyen las condiciones para generar el mercado que les sea orgánico a sus intereses (normalmente a las élites dominantes). Donde ha generado desigualdad, es porque así era necesario para quien lo impuso. En otros casos, donde el interés es por el bienestar social -aunque los menos-, han construido el mercado a lo interno en función de ello.

Evidentemente en Cuba se busca el bienestar social, pero si el mercado ha generado lo contrario, ha sido por su manejo torpe. Los que han avanzado en sus objetivos con su uso interno, no es que sean mejores sino que no se tragaron el cuento de que es libre y puro, sino que en realidad puede generar o no desigualdad. Solo hay que escoger para qué usarlo, y saberlo hacer.

9 comentarios

Livio Delgado 22 diciembre 2018 - 9:52 AM

No estaría muy seguro hoy, mirando fríamente y desde la distancia en tiempo y en espacio que me da ser emigrado, esta afirmación suya sobre el resultado de la revolución cubana “Después de todo, las transformaciones económicas en la Revolución, se hicieron para que el mercado (laboral, estatal, privado, monetario, etc) no continuara generando las desigualdades de aquel mercado que favorecía principalmente al capital extranjero y la burguesía nacional.”. Creo que próximo a cumplir 60 años el experimento del socialismo tropical y comprobando como desgraciadamente año tras año el margen de crecimiento económico que ofrecen autoridades es menos alentador para su pueblo, Cuba esta muy jod….., mucho mas de lo que los simples mortales alejados de las mieles del poder pudiésemos suponer.
Me gusta cuando se muestran cifras y se llega a una conclusión desde el propio convencimiento que ofrece la estadística como estudio de tendencia, en su blog, ELESTADOCOMOTAL, el economista cubano Pedro Monreal en un articulo del 26 de Diciembre del 2017 llamado “Crecimiento económico cubano en 2017: ¿Qué pasó? ¿Qué vendrá?” nos dice sobre el siempre presente tema al final del año, tanto en lo personal como en lo económico social de cómo nos fue. Nos muestra “Desde 2009, el crecimiento del PIB ha tenido resultados mediocres que solamente han superado el 3 por ciento una sola vez, en 2015 (con 4,4 por ciento), justamente antes de entrar en crisis, en 2016. El decrecimiento anual de -0,9 por ciento en 2016 y el registro mínimo de 1,6 por ciento de 2017, arrojan una insignificante tasa promedio de 0,34 por ciento para el bienio 2016-2017. “, sí actualizamos los datos que tenemos hoy, el 2018 un crecimiento del 1.2 y el pretendido crecimiento para el próximo año de 1.5, entonces es muy simple asegurar que la economía cubana a vivido un QUINQUENIO PERDIDO en últimos 5 años de reformas económicas emprendidas por Raúl. Todos los conocedores del tema fijan en un crecimiento mínimo del 5% o más para realmente poder decir que se creció algo, estas “modestas” cifras son quizás reproducción simple que no llevan a nada nuevo, así que lo que se hace llamar tendencia deseable o zona de crecimiento mínimo de despegue según Anuario Estadístico de Cuba, que es crecer por encima del 5% anual para salir adelante sigue siendo otro de las tantas promesas nunca cumplidas ahora por un nuevo presidente designado.
Tengo usted y todos los cubanos un buen fin de año y felices fiestas.

Miguel Alejandro Hayes 22 diciembre 2018 - 10:17 AM

La revolución triunfante en el 59 se puede enfocar de muchas maneras, y como esta intentaba eliminar los males del capitalismo en Cuba, por tanto de su medio: el mercado… Por eso “Después de todo, las transformaciones económicas en la Revolución, se hicieron para que el mercado (laboral, estatal, privado, monetario, etc) no continuaría generando las desigualdades de aquel mercado que favorecía principalmente al capital extranjero y la burguesía nacional.”
Concuerdo con usted sobre la importancia de las cifras, por eso agradecemos mucho que expertos como Monreal las usen.
Solo le comento algo, las estadísticas sirven para demostrar el punto del expositor, no para explicarlo. Dicen el qué, no el por qué. Incluso, luego de ejercicios de validación de hipotesis desde el punto de vista estadistico, la explicación del por qué se da desde un modelo teórico. Mi punto, para no enredarme ( recién me levanto), es que no con estadistica se pueden defender los puntos, porque los números pueden demostrar casi cualquier cosa, porque como todo lenguaje, puede ser un ejercicio retorico( en el sentido griego).
Saludos

Big Point 22 diciembre 2018 - 11:46 AM

La estadistica (puritana) devendria practica retorica. Habria que concordar en los modelos y metodos para el calculo estadistico. Veo resultados; pero no fuentes debidamente expuestas. Ese ha sido uno de los mayores obstaculos en la lectura de la estadistica cubana (el cambio de metodos para el calculo , la omision de datos … e incluso la ausencia de estadistica publica)
Para mi no es confiable o cientifica una conclusion estadistica cuando esta evade el analisis cientifico, o cuando se esgrimen otros factores. Como se calcula el crecimiento? Por que existen lagunas en el estudio estadistico?
La estadistica es referencia para las proyecciones.
Un saludo a todos. El invierno en Toronto. Escribiendo sin acentos en un teclado en ingles. Felices celebraciones de fines de 2018.

manuel 22 diciembre 2018 - 7:09 PM

Seamos justos ….se tiene el mercado que los lideres de la revolucion querian ? No…….se tiene el mercado que se ha podido tener , el que las condiciones historicas ha permitido , un mercado que ha resuelto la subsistencia del Pais , un mercado que ha permitido la sobrevivencia de el mal llamado socialismo tropical cubano.
Mercado es una palabra , una definicion dada por el hombre y Cuando se dice mercado libre……los comunistas tiemblan por esa palabra ……miedo al mercado ? ……si es el que nos ha permitido llegar hasta aqui , mas mal que bien pero …llegar.
Hay que liberar las fuerzas productivas , que produscan , que invente , que generen y si producto de TODO eso tienen lo que tienen que tener en recursos bien habidos……felicidades ! , el producto generado es al servicio de la mayoria . Hay que tener mercado para TODOS los bolsillos porque en el Socialismo hay diferenciacion social , debe tener mas, quien mas trabaje , quien mas venda y mejor su producto …..”a cada cual segun segun su trabajo” …………….el igualitarismo es malo , malito ……mas malo que el peor de los capitalismos .
Claro!…. el Estado esta hay para regular , para tasar , para repartir , para proteger a los que menos tienen , para calibrar la balanza social , para corregir , para enjuiciar a los aprovechados y a toda suciedad que genera el delito .

Miguel Alejandro Hayes 23 diciembre 2018 - 2:10 PM

Claro que no es el mercado que los líderes querian, pero las intenciones pueden ir por un lado y los resultados por otro.

Marlene Azor Hernández. 23 diciembre 2018 - 3:32 AM

Yo no sé quiénes fueron los asesores de Raúl Castro para iniciar las reformas del 2011,pero sí conozco todas las propuestas que han hecho los economistas cubanos residentes o no en Cuba desde los años 90s y que no son funcionarios públicos.Los funcionarios públicos cubanos van en dirección contraria a las propuestas de los economistas cubanos que no están en el poder. Lo que se observa es que el gobierno no escucha y toma las propuestas de los especialistas que no están dirigiendo en Cuba. La raíz del problema es el sistema económico que se defiende por los dirigentes cubanos: el sistema de planificación centralizada y control directo de todos los mandos de la economía que implosionó en la URSS y dejó en la mayor hambruna e indefensión al pueblo ruso en los noventas. Este sistema criminaliza la autonomía ciudadana económica, social, cultural civil y política y por eso ni crecemos ni creceremos. Con solo mirar el desarrollo y el bienestar de los países nórdicos, se hace evidente que el crecimiento económico, el desarrollo sostenible y los altos niveles de bienestar social, sólo son posibles cogestionando la economía con la propiedad privada y cooperativa.Dando libertad y aprendiendo a regular, no asfixiar el aporte de todos los sectores económicos al bienestar social. La desigualdad es mínima en estos países y está compensada por sistemas de seguridad social generosos y estables. No hay que inventar el agua tibia.

milblogscubanos 23 diciembre 2018 - 5:21 AM

Además de la consabida letanía de descalificaciones gratuitas (en modo me porto bien) y difamaciones estudiadas (en modo cubanet.org), ahora resulta que hasta muestra la señora Marlene un desconocimiento asombroso de cosa tan elementales como tratar de comparar Cuba con “los países nórdicos”, en un alarde de demagogia made in Miami…

Noruega es un país nórdico, que hace pocos años vivía de la pesca y poco más y tenía un desarrollo, una renta nacional, etc… inferior a Chile, España etc… como se lee en el enlace.

De pronto, sobre 1969, se descubre petroleo y gas en sus aguas territoriales y Noruega pasa de país sin pena ni gloria a país rico y nada de desarrollo sostenible, porque una economía, local,regional, mundial, basada en los combustibles fósiles, no tiene nada de sostenible.

Además, la gestión de los recursos que Noruega obtiene del petróleo no sigue el modelo capitalista que la señor Azor defiende y basta un artículo de divulgación, para tratar de conocer qué es ese Government Pension Fund Global, esos fondos soberanos que controla, etc.

Gobierno de Noruega, Banco Central de Noruega, etc son la clave del estado de bienestar que hoy vive ese país nórdico y todo basado en una gestión pública inteligente de los recursos naturales.

enlace citado: https://www.eleconomista.es/economia/noticias/7136339/11/15/Noruega-o-como-un-pais-pobre-puede-llegar-a-ser-el-segundo-mas-rico-del-mundo.html

Armando 23 diciembre 2018 - 10:15 AM

Milblogs
Suecia no tiene petróleo,han encontrado,pero ha decidido no sacarlo para no poner en riesgo,las aguas de la región,el modelo sueco es unos de los más liberales del mundo,pienso que es un modelo a seguir,el estado se financian en gran parte de los impuestos de la empresa privada,tanto grandes como pequeñas,el deporte se financia con la lotería del estado,dinero que está marcado de oreja,ese dínero es solo para el deporte.

juan 24 diciembre 2018 - 7:59 PM

Conceptualmente está definido así el mercado, y, se dice, cuando hay fallos de éste, debe, supletoriamente, intervenir el Estado. Tal como señala usted, existen una serie de manoseos y nunca se cumplirá el equilibrio de oferta y demanda. Me acerco un poco al tema, cuando Thomás Pikety (El capital en el siglo XXI) nos habla sobre la riqueza, deja entender que ésta no es consecuencia de la productividad o la gerencia de sus dueños, sino está más allá, como la herencia, el papel que desempeñan los gobiernos en direccionar la rentabilidad nacional e internacional de las acciones, bonos, intereses, etc.
Abrazos
Juan Verástegui Vásquez

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