Era un domingo de poco tráfico y poco entusiasmo. Acababa de salir de un estudio de televisión donde fui a grabar un programa sobre arte joven. Decidí caminar hasta mi casa a pleno mediodía con un largo vestido azul y la cara maquillada como para una fiesta. Yo pensaba en la situación del transporte, en los almendrones, valoraba la posibilidad de conseguirme una sombrilla para mis largas caminatas y maldecía la hora en que se me ocurrió ponerme tacones para hablar sobre arte joven.
Justo frente al Hospital Calixto García, cuando mis pensamientos iban a mudarse del transporte público a la salud pública, me abordó un hombre alto, rubio, de ojos verdes que traía en la mano un gran mango pelado a medias. El extranjero, en un perfecto español, me preguntó cómo llegar a la Plaza de la Revolución. Le expliqué, con mi perfecto español, y seguí mi camino. Resulta que el Hombre del Mango, que no se había separado ni tres metros de mí, me preguntó si yo también iba para la Plaza. Le contesté que mi casa quedaba cerca de allí. Entonces nos acompañamos hasta el histórico monumento.
Por el camino me contó que era sudafricano y que se dedicaba a viajar el mundo con solo dos mudas de ropa, un repelente para los bichos, una hamaca y el dinero justo para trasladarse “a dedo” y alimentarse con lo básico. Llevaba 21 días en Cuba y había recorrido todo el país, la Plaza era el último destino y luego cogería su avión que salía a las cinco de la tarde de ese mismo día. Su mochila de viaje era más pequeña que mi bolso de mano, su ropa estaba mugrienta y sus zapatos rotos. Parecíamos una princesa y un mendigo.
Hablamos del mundo, de la gente de aquí, de las cosas absurdas y las cosas maravillosas de esta Isla. Me dijo que yo era una cubana loca, porque era la primera que conocía no quería irse de Cuba. Cuando llegamos a la Plaza aún tenía el mango en la mano, un mango gigante que le choreaba hasta el codo.
Puso la fruta en el piso y me pidió que le tirara una foto con su celular de último modelo que tenía la pantalla rota adornada con los pelos rubios del mango. Yo estaba en posición de tomar la foto, encuadrados el Martí y la raspadura, con un hermoso contorno de cielo azul, entonces el hombre se paró de cabeza y así, con el mundo al revés, quedó capturado en su iPhone 7.
¡El Hombre del Mango y yo hicimos tremenda química! Hablamos de todos los temas y nos reímos y me dijo que quería casarse conmigo, que regresaría a Cuba en dos años a buscarme. Tanto intimamos en ese paseo, que me pidió que lo llevara a mi casa para lavarse las manos y terminar de pelar su mango. Le dije que a mi casa no podía llevar un extraño lleno de churre con un mango, pero que tenía un buen amigo cerca y allí podría lavarse las manos. Lo llamé y le dije: “Voy pa llá con el Hombre del Mango”.
Cuando llegamos al alquiler de mi amigo, un pequeño apartamento en una especie de pasillo interior, él me abrió la puerta y se quedó “muerto” con la visión extraordinaria del Hombre del Mango. Mi amigo estaba con un short corto de colores, se había acabado de sacar las cejas, de pintar las uñas y tenía un torniquete en la cabeza protegido por una media panti. Nos sentamos a la mesa con el Hombre del Mango y nos lo comimos entre todos. (Al mango, aunque mi amigo hubiera querido también comerse al hombre.)
Solo tenía 3 CUC para coger un carro hasta el aeropuerto, almorzar algo y guardar algunas monedas para su colección. En mi humilde posición de asalariada, tenía 70 pesos cubanos y lo invité a almorzar. Compartimos una pizza y una malteada, no alcanzaba para más. Le regalé todo el dinero que me quedaba para su colección y le pagué un carro de los que van por Boyeros hasta cerca del aeropuerto. Él entraría caminando hasta la Terminal 3.
Cuando nos despedimos me pidió que le diera un beso en la boca, yo contesté que no besaba a extraños ni aunque fueran millonarios. Me dijo: “¡Loca cubana!” Intercambiamos los contactos y lo vi alejarse en un almendrón diciéndome: te amo. Qué loco Hombre del Mango!!! En cuanto llegué a mi casa lo googlié y descubrí que se trataba de un millonario aventurero que nadaba con las pirañas y dormía entre los osos salvajes. Resulta que tenía maestrías y doctorados en economía y trabajaba en Dubai como asesor de negocios.
A los pocos días de nuestro encuentro publicó en su Facebook 100 fotos de su viaje a Cuba. En la número 99 aparecíamos mi amigo y yo en su apartamento comiendo mango picadito con tenedor. La foto tenía un pie que decía así: “Un típico apartamento cubano.” No le di like a esa foto, ni mi amigo ni yo éramos un típico apartamento. ¡Qué lástima que el Hombre del Mango no pudo ver más allá! En la foto número 100 estaba la Plaza de la Revolución en la que, por un instante, nos miraba patas arriba. Quizás en esa incómoda posición entendió más de mi Cuba y su Mundo que con los pies en la tierra.
25 comentarios
El tacaño del Mango, un poco mas y nació en Alicante, el mundo esta lleno de esos seres diferentes, raros, extraños, surrealistas, el extraño del mango, quizás nunca podrá comprender, que le dieron todo lo que tenían a quien le sobra, no creo que sea un problema de entender la isla o el mundo, es una experiencia personal, intrascendente, observación desde el punto de vista del pobre, pobre que comparte lo que tiene, al rico que pretende no tener nada, para de esa forma experimentar el otro extremo de la realidad, lo interesante seria saber que piensa el hombre del mango… 😉 Saludos 🙂 🙂 🙂
bonita anecdota
En mis viajes siempre he sido consecuente con el principio de ayudar y conocer un poco los países que visito, mi estilo personal es entre turista y viajero, diferencia que estriba entre solamente gozar el placer de una viaje, comer, beber, nadar, visitar lugares interesantes,etc (turista) o visitar, conocer las gentes, costumbres, tradiciones, historia del lugar, etc (viajero), lógicamente, viniendo de un pais pobre y atrasado como es Cuba, pero, donde el nivel educacional es muy alto para su rango de pobreza, los dos estilos son compatibles en una misma persona! la gozadera estilo cubano siempre va conmigo, pero la eterna curiosidad de los isleños para los países allende a sus mares, también siempre marchan conmigo! 🙂 🙂 🙂 Saludos
Igual hubiese sido un pedofilo, o un violador, o un asesino… pero bueno, como era “yuma”, le diste un citytour gratis, y hasta lo llevaste a casa de un amigo, quien no solo incluso le quería abrirle las puertas… sino otra cosa … que ingenuos … “Un típico apartamento cubano.” es una frase donde caben muchos insultos a nuestra dignidad. Me pregunto si “el hombre del mango” hubiese sido cubano…. hubiere siquiera una anécdota… Sigan pensando que todo lo que viene de “afuera” es bueno, que un día se van a llevar un susto.
NEO creo que tienes muy pocos datos para enjuiciar moralmente a la autora y su amigo.
Saludos
El relato, de ficción o no, puede tener muchas lecturas. Considero el post, de indiscutible calidad. Cada cual asume los riesgos que que quiera correr. Tengo los datos que me da el conocer a las personas, la calle necesaria para saber leerlas, las vivencias personales y colectivas de muchas, muchas personas. No enjuicio a nadie… solo soy realista :).
Gracias por compartir tan bonita e interesante historia. Que muestra una Cuba más allá de lo que la puede conocer un turista en una breve visita, donde lo lo esencial no siempre es percibido por quien nos visita, los valores y la idiosincrasia del cubano, dicen mucho de lo que somos, aunque algunos se fijen solamente en lo que tenemos.
Un cuento de las mil y una noche……….un hombre que solo mostro un lado de su vida , que pudo mentir para cubrir el otro , otro megalomano millonario ?……. que mientras ensena 3 monedas , oculta las cartas bancarias y de credito en su bolsillo. Una muestra de la ingeniudad y la hospitalidad del cubano…….Cuando se trata de un extranjero…. pero todavia queda la esperanza de un segundo rencuentro dentro de 2 anos con ella o con su amigo .
Interesante historia, que recoge las mil y una que de modo similar ocurren en el mundo, sobre todo en la india
Unos de mis sueños tambien ha sido ese, vestirme como un mendigo para ir por el mundo dandole a OTROS la oportunidad de realizar una BUENA accion conmigo. Yo seria solo el medio para que esa persona se sientiese feliz. Luego, como buda, regresaria a la comodidad de mi hogar, a seguir disfrutando de la vida aunque siendo ya mas humilde ( 🙂 )
Pero a cada persona que me es cercana y que le he contado ese sueño me han dicho !Ni loco lo hagas! !Nos vas a tener a todos preocupados, vamos a tener que curarte de todas las enfermedades que se te peguen, podrias morir por ahi, en fin no NOS LA PONGAS DIFICIL a los DEMAS para que sea Tu el que realice un sueño. !Seria arar en el mar!
Y es por eso que me quedo en casa 🙂 !Todavia tengo demasiadas personas encadenadas a mi existencia! 🙂 !Quizas un dia se liberen y me liberen a mi!
🙂
El cubano por naturaleza es solidario, está en sangre, en la isla es más palpable, ya los que vivimos por años fuera el medio nos va poniendo duros y antes de prestar una ayuda pensamos muy bien las consecuencias que podría traer esa ayuda.
En Cuba una persona con un patatum o sirimba le llegan 10 en su ayuda y tremendo corre corre y griteria, aquí de lejos llamas al 911 y tiras 3 fotos para tus amigos en FB, se despetroca una vieja en Cuba y la cargan 10, aquí le pasas por el lado y que la pare otro, se cuidan, la vieja puede decir que le jorobas un dedo y te demanda por metido, así son de diferentes las sociedades y los hombres.
Me agradó el post.
Chacha bro…….el capitalismo norteamericano esta enfermo grave ……aqui en Quebec sigue siendo muy similar a Cuba , no pararse ayudar a una persona en una situacion X es censurable desde la sociedad y las personas .
Bro según trompeta hay muchos locos😆,pero es así cómo están educados, las demandas civiles vía para sacar dinero han llevado al freno de la solidaridad.
Saludos
Manuel y tu de verdad te crees todas esas cosas?
Cava ……vivo al lado de la linea americana y visito a EE UU cada 2 semanas …compro alla muchas cosas , creo conocer algo de EE UU . Nada , ni nadie reacciona igual ……..Chacha escribes de sus vivencias y sus puntos de vista de la sociedad norteamericana …….yo respeto eso .
Exactamente, nada ni nadie reacciona igual, pero en tu comentario generalizas cuando dices “el capitalismo norteamericano esta enfermo grave”.
Tu puedes respetar a todo el mundo, yo también respeto las opiniones pero que se respete una cosa no significa que sea cierta.
Mano muchos locos,el país mas consumidor de sicofarmacos, sicotropicos, opiodies y drogas de todo tipo, no saben si la sirimba es sobre dosis como las cajeras o el corazón
Saludos
Chacha aqui se produce una de las mejores mariguanas de Canada ……en medio de los campos de Maiz ves las maticas …..es un negocio que da mucho $$$$……asi que siempre hay quien tome el riesgo ……aqui fumarte un cigarro de mariguana mirando la television es como tomarte un vaso de agua ………….ahora la historia es diferente si bajos los efectos de la misma te pones a conducir ,o a gritar o le dices una groseria a cualquiera …….o si te paran y tienes mas de un cigarro arriva …….te pasan la planadora de la ley ., pierdes el carro , pierde4s el permiso , la multa es de varios ceros , la prision te acoge , estas obligado a ir a desintoxicacion y cursos de abstinencia en centros especialisados , un expediente criminal (que pesa en todo aqui) y varias horas de trabajo comunitario para que aprendas a respetar a la comunidad, si estas alquilado el propietario te puede decir by by …y la policia te echa el ojo ……
manuel comparar el actuar diario de los canadienses sin limitaciones económicas con el de los cubanos que muchas veces lo hacen de manera altruista no creo que sea objetivo. Yo personalmente vi a unos suizos muy educados fajarse cuando vieron que no cabían todos en un único avión que saldría de cuba para Europa en algún tiempo (cuando aquello del problema del terremoto y la cenizas en Europa).
Saludos
Michel…….Cuando hablo de la forma de funcionar en Quebec ……..jamas lo comparo con Cuba . El error mayor esta alla donde muchos comparan los logros de la Revolucion con paises del primer mundo para resaltar la obra revolucionaria, sin que falte la coletilla y esos que somos un pais bloqueado , tercer mundista y pobre para seguidamente apuntalar……..gracias a la Revolucion . No te olvides que vivas donde vivas …..los humanos reaccionamos muy parecidos antes eventos iguales . Si tu casa coge candela en grande ……corre que te quemas .
Michel en que se basa para decir suizos “muy educados”? alli como aqui en Suecia, hay chusmeria, chabacaneria y otras lindezas no crea que porque son callados no se botan pa`l solar cuando lo creen necesario la diferencia es que en Cuba esos males ya son normales solo ver a la mayoria de jovenes como se comportan hoy tanto alla o cuando salen a otros paises que los hay bien educados? si los hay pero hoy son minorias.
cubanos estos suizos eran científicos de los que se fajaban hasta una persona por tirar un perro al mar, todo muy lógico y cívico, pero cuando vivieron la crisis de lo de la cancelación de los vuelos indefinidas los que tenían problemas familiares allá empezaron a sacar los codos y menos mal que no había un perro de por medio porque si no lo quitaran del medio también.
Mi punto es que una misma persona no actúa igual bajo condiciones de crisis que en condiciones sociales sin necesidades humanas básicas que cubrir.
Saludos
A muchos personas permeadas que toman al capitalismo norteamericano como refernecia general caen en la trampa de aplicar lo mismo a todas las soceidades capitalistas ………………..esta a Quebec es una sociedad que la palabra solidaridad y ayudar esta presente no solo en palabras si no en los cientos de Centros donde las personas trabajan de forma voluntaria con apoyo directo del estado , las empresa privadas y la popblacion.
Mano aclaro que así de diferentes son las sociedades y los hombres, yo cuento lo de aquí y tu de allá, se que Canadá es muy diferente a la Yuma
Saludos
Chacha ……no me referia a tu opinion….. es una opinion personal , desde la Isla se repite mucho lo que dicen sus periodicos sin nunca haber puesto un pie en un Pais capitalista …..
Esto me recuerda a yuna yunai a tí te gustan los yumas 😀
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