El tema de San Isidro parece estarse enfriando poco a poco y por ello puede ser el momento para un análisis desde una perspectiva más amplia, menos emocional.
Lo primero que salta a la vista es la magnitud de la respuesta y la difusión que se le ha dado a este asunto. Creo que es lógico. Visto desde una perspectiva regional, lo vivido en los últimos días es la expresión cubana de la crisis de gobernabilidad que azota la región, agravada por la tensa situación económica y por la pandemia de Covid-19. Sin embargo, si comparamos lo sucedido en Cuba con lo que ha pasado en los últimos dos años en países como Ecuador, Venezuela, Nicaragua, Bolivia, Chile, Perú, Guatemala y hasta en los Estados Unidos, lo nuestro resulta ridículamente pequeño.
Simultáneamente, dentro del ritmo interno de la nación, estamos en los albores de un nuevo ciclo histórico –al menos, ese es mi criterio–. Este parece ser un momento de transición en el que se están fundando las bases para el modelo que va a regir en las próximas décadas. Cada vez que algo como eso ha sucedido en los últimos 150 años, ha estado acompañado de inestabilidad social. De hecho, el actual período de cambios es hasta ahora el más tranquilo de nuestra historia.
¿Qué papel tienen en este proceso los intelectuales y artistas? Como parte integrante de la sociedad, ese gremio ha jugado un rol en la historia de la nación. Por problemas de espacio no abundo sobre el tema. Baste decir que a lo largo del proceso revolucionario, casi como en ningún otro, la intelectualidad ha estado dividida entre los que apoyaban y los que se oponían, en complejos reacomodos que tuvo momentos de mucha tensión. El más relevante de ellos fue a inicios de la década del 70, a raíz del llamado Caso Padilla y el Congreso de Educación y Cultura que generó el Quinquenio Gris. En la génesis de la actual crisis está el Decreto 349, que es visto con desconfianza precisamente porque se siente como una vuelta a las políticas de aquellos años.
Volviendo a una visión más general los sucesos de San Isidro y, especialmente, al plantón frente al Ministerio de Cultura el pasado 27 de noviembre, podrían considerarse históricos para el caso cubano. Quizás lo más cercano, guardando las obvias distancias, fue el llamado Maleconazo del 5 de agosto de 1994, hace más de veinticinco años.
A ambos sucesos los une el hecho de ser movimientos espontáneos –me refiero a la concentración del grupo de intelectuales y las manifestaciones de diferente tamaño que se dieron en la capital y en algunas provincias–; ambos tuvieron su origen en eventos ocurridos en zonas pobres de la Habana –la falsa noticia lanzada por Radio Martí de que un barco recogería a los interesados en irse del país en 1994 y la «huelga de hambre» de los miembros del MSI–; ambos ocurrieron en momentos de crisis económica, mientras se arreciaba el bloqueo y el gobiernos tomaban medidas que resultaban impopulares –es curioso como el tema de las tiendas en MLC, antes fueron TRD, aparecen en ambos escenarios–; finalmente, parece que ambos tendrán similar resultado.
En cuanto al Estado, ya lo dije: está en pleno proceso de transformación de sus estructuras institucionales y económicas; con una nueva Constitución y una apretada agenda legislativa llamada a ser implementada y, lo más importante, en medio de un proceso de cambio generacional sin precedente en los últimos sesenta años.
De cualquier modo, considero que ha logrado salir airoso de esta crisis, al tiempo que estableció un precedente importante en la relación entre los individuos y las instituciones, legitimando el diálogo entre cubanos dentro de ciertos marcos, lógicamente, como vía para resolver diferencias. Esto hubiera sido impensable en otro momento.
Incluso en los últimos procesos de consulta, ocurridos a raíz de los Lineamientos del Partido y para el proyecto de Constitución, la vía fue vertical, «de arriba hacia abajo». Esta vez ocurre en sentido inverso y eso es particularmente beneficioso para la nación y para el propio Estado, más allá de campañas internacionales –o nacionales– de descrédito que fracasan por estar enajenadas de la realidad cubana.
31 comentarios
Esto puede derivar en un cambio pacifico, mediante la presion de los que quieren cambios en Cuba, cuando lleguen las eleciones los inconformes pueden y estan en su derecho exigir a los candidatos que se adhieran a un programa politico, economico y social que esten impulsando los sectores del cambio, pues de que vale votar por gente que solo sigue las indicaciones de los que ejercen el poder? si no aceptan pues simplemente no voten, para que legitimar el actual estado de cosas en la que no estan de acuerdo? Me parece un poco presuntuoso y futil decir que aqui acabo todo, la historia se construye y la del 27N apenas ha comenzado.
Dejo aquí algunas consideraciones sobre ciertos planteamientos del artículo:
1 lo que se denomina eufemísticamente “complejos reacomodos” han sido procesos de mayor o menor represión ideológica dentro del sector cultural; 2 la afirmación de que se ha salido airoso de la crisis, contradice su explicación anterior sobre la influencia de la pobreza y el tema del uso del usd como moneda, comparar los hechos ocurridos en el 94 y ahora no es posible pues son escenarios muy diferentes separados por más de un cuarto de siglo.
2 el diálogo “dentro de ciertos marcos” que pudimos apreciar en una convocatoria vertical, no legitima a sus convocantes, es algo habitual para manejar el disenso.
3 La apretada agenda legistativa está desconociendo el mandato de la nueva Constitución en cuanto a habilitar jurídicamente derechos fundamentales que se requerirían para que el diálogo fuera verdaderamente democrático y no se tergiversaran hechos como el ocurrido el 27 de noviembre.
Parece ser así. Líderes que no son líderes; el barrio de San Isidro y zonas aledañas, no es Cuba; las preocupaciones de un sector social, no siempre son las preocupaciones de una sociedad; la identidad cultural no siempre tiene las mismas percepciones en una población rural que en una urbana, en el oriente que en el centro u occidente.La ideología social de Cuba es diferente a la ideología social de latinoamérica (Norte, Centro y Sur), muy diferente a la musulmana o cristiana esteeuropea. No obstante, hay que considerar, parafraseando lo que decía el Che, el Gobierno y el PCC tiene que tener y carecer de lo que tiene y carece el pueblo. Esto NO SE PUEDE OLVIDAR NI RELEGAR, es un precepto muy diáfano y concreto. Las lecciones aprendidas y sacar las conclusiones (otro parafraseo de alguien).
sin que mi comentario pueda ser interpretado como una descalficacion,voy a opinar,que conste !!! Cada cual opina lo que cree……
Lo pernicioso que resulta ser gobernado tanto tiempo por un Esado con una ideologia basada en el conocimiento adquirido de una Verdad revelada,sale al leer este articulo de un joven culto,preparado y normal.La sociedad comunista cubana,al igual que la de otras de igual signo,produce solo personas que no
a pueden tener un espiritu critico acerca de lo que ven,pues no menejan otras visiones y vivencias a las que han estado sometidos. En mi caso,debo confesar que mi reclusion en la UMAP,me aterrorizo de modo tal que no recobre mi claridad de pensamiento hasta mucho,mucho despues y aun siento la opresion de mi vida cubana.La sociedad cubana siempre ha sido constestataria,al menos una parte considerable,a pesar de la castracion mental de las jovenes generaciones ,asi como del silencio complice de los mayores (yo le puse la panoleta a mi hijo !!!!!! Horror!!!!! )Los mas valientes,han sido lapidados moral y algunas veces materialmente, pues se han atrevido a desafiar al Estado con todos sus medios, incluyendo un Mundo manipulado por los Gobbels comunistas.Pura valentia !!!.Sin duda ,el comunismo real y la modernidad no ligan y,mientras llega el Gran Cortafuegos Made In China,tendran al menos visibilidad estos valientes que actuan en gran medidoda con el soplo casi divino que tienen los hombres por el solo hecho de existir.n mi tiempo era ” a solas con el enemigo “.El descontento no cejara,los valientes seguiran,y su aplastamiento,sera seguro…..mientras surja algun liberal en la cupula y todo sera pasado.La Gra demanda ,sera resuelta : dejen decidir al pueblo de Cuba !!!
Estoy de acuerdo con Criollov, no se debe comparar la situación de un país con
el otro, ya que saldrá un ajiaco criollo La ideología social de Cuba es diferente a la ideología social de latinoamérica (Norte, Centro y Sur), muy diferente a la musulmana o cristiana esteeuropea..
Que el barrio San Isidro no es toda Cuba,es muy cierto,pero que toda la problemática que subyace en San Isidro es la generalidad de lo que ocurre en toda Cuba,es más cierto aún.
Y sería muy saludable para todos los que desean opinar,darse una vuelta por cualquier barrio populoso de este país,antes de sentarse a criticar,opinar etcétera etcétera etcétera.
No estoy de acuerdo con las manifestaciones de algunos del MSI, ni en cuanto a proyección política,ni en cuanto a las formas usadas .
Pero cuando usted rebusca el origen,va a llegar a la gran marginalidad existente en gran número de familias. Y esa marginalidad,por mucho que la dirigencia diga, jamás ha sido atendida como debiera ser. La insalubridad,el hacinamiento,la pobreza extrema, la falta de elementos básicos en la vida para cualquier ser humano,provocan un estado latente de rebeldía contra el sistema,sea cual sea este.
Esas familias se pasan el santo día oyendo que la culpa es del bloqueo y del imperialismo. Ah,pero a la vez sólo es con la moneda de ese imperio ( moneda cuasi vedada para la inmensa mayoría ) que se pueden resolver problemas muy agudos del convivir diario. Y si además, se les dice que no hay recursos para mejorar sus vidas,pero en su barrio ¡¡ En su mismo barrio !! ,el hijo de Fulano, o el nieto de Mengano abre
una galería, y viene rodeado de extranjeros, o a cuatro cuadras,el Estado abre un hotel tras otro,entonces sobrevienen estos choques.
Y para colofón, nuestra policía,tanto los de uniformes como los tapiña’os, adolecen de una gigantesca falta de profesionalidad y de conocimiento sobre estas problemáticas. Vienen a actuar con la cabeza cuadrada. Y a la vez son vistos por los habitantes de estos barrios como la representación de ese poder que les impide mejorar.
AZUL estoy de acuerdo con lo que planteas, aun asi me parece que te quedas corto, la realidad que vivimos los cubanos es muy compleja como para exponerla con todos los detalles en un escrito, la desilusión y la desesperación van mas alla de los barrios marginales, mas alla del nivel educacional, el día a día que nos hace pensar mucho y analizar lo que sucede a nuestro alrededor, y aun asi muchos no encontramos la solución a nuestros problemas, lamentable.
EL SIGLO FUTURO 19/6/1878 No. 789 P3
De una entrevista a Maceo en su casa, según Las Novedades de New York.
El titulado general José Antonio Maceo, que ha llegado a esta ciudad desde Jamaica en el vapor Atlas hace pocos días, es un hombre como de unos treinta y cinco años, alto, bien formado, barba muy poblada y no deja de ser reservado al dar ciertas contestaciones.
Reportero: ¿Puede usted decirme algo respecto a la capitulación llevada a efecto con el general Martínez Campos?
Maceo: Debo decir a usted que yo no he capitulado. A principios de abril solicité una entrevista con aquel general, la cual se realizó, pero no pudimos llegar a un acuerdo. No obstante, no se rompieron las hostilidades acto continuo, sino que la tregua duró ocho días; transcurridos estos, mis fuerzas tuvieron algunos encuentros con las tropas españolas. El 7 del mes actual recibí una orden (que muestra) del encargado del gobierno, Titá Calvar, en que me daba instrucciones para abandonar las filas, rebasar las líneas españolas y dirigirme al extranjero con el nombramiento de agente general del gobierno con plazo limitado, debiendo volver a Cuba, si puedo, transcurrido aquel, con los resultados que obtenga en este país. Debo decir a usted también que el general Martínez Campos conocía el objeto de mi viaje; tanto que cuando me despedí de él le dije que venía al extranjero a trabajar por Cuba y para Cuba, a lo que me contestó que ya lo sabía.
_ De manera que ¿trata usted de trabajar aquí en favor de la insurrección?
_ Sí señor; aquí tiene usted una proclama de Calvar a los emigrados cubanos y que esta noche voy a presentar en un club, excitándoles a que me secunden en mis trabajos y me auxilien en la reunión de medios para continuar la guerra.
_ ¿Y cómo explica usted el que, conociendo el general Martínez Campos el objeto de su salida de la isla, contrario a España, no solo le haya permitido salir de ella, sino que lo ha hecho usted en un buque de guerra español?
_ Yo no sé decir a usted: el presidente Calvar creo que ha sido el que ha corrido con estas negociaciones.
_ ¿A qué número ascendían las fuerzas de usted cuando salió de la isla?
_ A esta pregunta no puedo contestar.
_ Por aquí corrían noticias de que sus fuerzas fraternizaban con nuestros soldados y que se le había desertado a usted mucha gente.
_ Alguna se me separó; pero esto no tiene por causa la que usted indica; las deserciones han sido siempre muy comunes desde el principio de la guerra.
_ ¿Cuál es el jefe más caracterizado que existía en Cuba a su salida?
_ Vicente García, que es el jefe militar de las fuerzas cubanas.
_ ¿A qué número ascienden las fuerzas que manda Vicente García?
_ No puedo contestar a usted.
_ ¿Cree usted que continuarán la lucha los pocos que quedan en armas todavía?
_ No lo sé.
_ ¿Cuál es el territorio que está hoy ocupado por las fuerzas de ustedes?
_ El territorio es pequeño: es el que se extiende desde entre el río Jobabo y la punta de Maisí.
_ ¿Cómo verificó usted su salida de la isla; se embarcó usted en Santiago de Cuba?
_ No señor: un paradero antes de esta ciudad desembarqué del ferrocarril para pasar al Fernando el Católico que me iba a conducir a Jamaica. En este paradero vi al general Martínez Campos y me despedí de él.
_ Recibió usted buen trato en el Fernando el Católico?
_ Me trataron con mucha decencia y política.
No estando solos con Maceo, pues había con nosotros algunos individuos de la prensa americana, no pudimos ni quisimos alargar nuestra entrevista, y además porque lo oímos quejarse de bastante malestar a consecuencia del tiempo húmedo que resiente sus heridas. Estas, según nos dijo, son veinte y tantas, de las cuales diecisiete son de bala y el resto de arma blanca, última circunstancia que pudimos notar por tener las manos con señales evidentes de heridas y mutilaciones en los dedos.
No estoy de acuerdo en un éxito real de una respuesta a un dialogo que termino en monologo, y mucho menos airoso cuando usted mismo asegura que desde el gobierno se actuó “ legitimando el diálogo entre cubanos dentro de ciertos marcos, lógicamente, como vía para resolver diferencias”, me parece aplacada la contradicción desde la acostumbrada fuerza, silenciada la disconformidad desde el hablemos entre los que nos son afines o menos problemáticos, pero es un capitulo abierto sin respuesta a la vista.
Ayer Leia los comentarios de una entrada en segundacita y Silvio pone un comentario de FB de Jorge Fuentes en creo expone el principal problema que la sociedad Cubana hoy ante la realidad que el cumulo de ineficiencias económicas y la falta de respuestas exitosas por años de viejísimos problemas económicos e improductividad crónica han traído en la insatisfacción de la población, y el Sr. Fuentes lo concretaba a esta realidad
“La nación también debe entender que aunque no hay pluripartidismo, la base social con diversos criterios ideológicos y políticos existe. No existen los partidos, pero la base social está ahí. Estamos obligados a tener en cuenta esa diversidad de pensamiento y vivir en la diversidad.”
Entonces ese acuerdo social al que se había llegado en aquellos años 70 donde la revolución triunfante paso a formar gobierno revolucionario en aquella época dorada con el bloque socialista, pero con el desmerengamiento del bloque socialista se dejó de ofrecer prosperidad y progreso en esa nefasta década de los 90, pero casi 30 años después, no creo se ofrezca diferencia otra cosa que el eterno posponer planes y aspiraciones a esas nuevas generaciones que solo han vivido en restricciones, una realidad económica mucho más complicada a causa “del sin prisa pero sin pausa” que ha devenido en una gran obtusa y costosísima pausa para todos los cubanos, entonces esos diversos criterios ideológicos y político existentes pero no representados políticamente, se vuelven cada día más visibles y compartibles para muchos que no encuentran salida a su propia realidad de vida.
Personalmente creo que la patria es de todos, revolución fue idea de muchos, en los que me incluyo hasta mi desencanto allá por los 90, pero que ante su incapacidad de ofrecer otra cosa, de mirar las cosas diferentes dejo de ser tanto para mí como para muchos, el estado en el socialismo tropical es el monopolio único que lejos de redistribuir entre los menos favorecidos, se ha encargado de aplastar a todos a lo que ellos creen que te toca y el partido único que usted llama unidad, es la forma más simple que un grupo de históricos y sus compinches de mantenerse en le poder sin dar explicaciones, pero sin dudas viendo a por donde van las cosas, el agotamiento del socialismo burocrático que la Sra. Alina expuso en uno de sus escritos cada día es más evidente.
Creo que el autor se ha apresurado a lanzar un suspiro de alivio cuando nos dice….”El tema de San Isidro parece estarse enfriando poco a poco”…mas adelante nos da una version, muy propia eso si, de los sucesos de 1994, en la que nos dice que, todo aquello fue producto de una “bola”.
Yo todavia no siento que hemos llegado al punto de desenlace de esta crisis. Las anteriores; 1994 (Maleconazo), 1980 (Embajada del Peru, Mariel) y 1965 (conflicto armado, enfrentamiento de facciones, expropiaciones, Camarioca); fueron todas, episodios de caracter politico que el Estado canalizo y soluciono habilmente, transformandolos en oleadas migratorias que actuaron como valvula de escape.
Esta vez no se cuenta con unos Estados Unidos dispuestos a recibir el flujo de inconformes a bordo de cualquier cosa que flote. Hoy, el “Que se vayan”! no es una solucion tan facil, porque esta vez habria que pagarles un pasaje de avion, imposible. Entonces queda la incognita; que pasa con toda esa energia que no ha sido “liberada”?
El estado actual de alerta y tension permanente de los cuerpos represivos, solo puede sostenerse por un periodo limitado de tiempo, sobre todo cuando el pais atraviesa una crisis economica a la que no se le ve fin a corto plazo. Yo me sigo preguntando; que sucedera con esa energia contenida, pero no liberada, en el momento en que ese marcaje a presion baje, por agotamiento natural, a un nivel de vigilancia menos estricto. Si llegado ese momento no ocurre nada, se podra hablar de enfriamiento; hasta entonces, sigan aguantando la respiracion.
El marcaje de la presión no va a bajar. Al contrario cuanto más aumenta la presión más crece la sensación de injusticia.
La presión sobre los díscolos de momento se limita a un fusilamiento de la reputación y a poner policías para no dejarles salir de casa, además de las detenciones arbitrarías. Con eso se busca meter miedo para contener la rebelión.
No creo que con eso llegue para contener la rebelión; por lo que anticipo que van a aumentar la presión con lo que aumentará la sensación de injusticia. Además en cualquier momento puede suceder algo inesperado: por ejemplo un mitin de repudio que se va de las manos y causa alguna víctima mortal o la grabación de una paliza propinada por la policía. En USA y otros países saben de cosas así. Hablo de hechos aparentemente poco importantes que se magnifican.
Recordemos que Mariel comenzó con un autobús empotrado contra una embajada; la caída del Muro de Berlín la causó un error de lectura de un ministro en una rueda de prensa; y el derrocamiento de Ceaucescu en Rumania comenzó con dos locos que le abuchearon en un discurso público.
Estoy de acuerdo con lo que dice. Cuando hablo de marcaje a presion no me refiero a la represion, esa permanece; lo que no es sostenible, ni economica ni sicologicamente, es la elevadisima presencia policial en las calles que hay en estos momentos, ese es el “marcaje a presion”.
….bien dice alex Garcia: Basta con analizar el incidente del joven desfilando por el bulevar San Rafael el que es reflejo de la realidad cubana….rodeado de muchos ciudadanos que contemplaron impotentes e impávidos sin reaccionar desfavorablemente a los reclamos del joven siendo este el centro de atención silenciosa de muchos testigos viéndolo moverse de un lado a otro….eventualmente llegaron las fuerzas represivas, lo despojaron de su cartel y lo detuvieron….este fue el momento y la chispa que definió la situación en que varias señoras parte de los transeúntes del boulevard al grito de NO LE PEGUEN, ES SU DERECHO se enfrentaron a los agentes…. multiples cámaras de teléfonos moviles captaron el desafío y la represión de un ciudadano ejerciendo su derecho amparado en la nueva constitución
La COMISIÓN de DERECHOS HUMANOS(HRC) declaró que la intervención de la Seguridad del Estado cubana en la sede del Movimiento de San Isidro por motivos políticos y bajo la excusa de que uno de los acuartelados en el lugar violó las normas sanitarias del país, informa en una nota publicada en la página del sitio lo común que se ha vuelto este pretexto por parte de las autoridades cubanas para justificar todo tipo de arbitrariedades.
Sorprende que una dirigencia dispuesta a dialogar con Trump o con el presidente americano que sea, a pesar del bloqueo y todos los pesares, se niegue a dialogar con cubanos pacíficos que viven en Cuba y que no son ni terroristas ni mercenarios.
La crisis demostró un decálogo de varias cosas:
1. Una crisis (en verdad muy fuerte) pero exógena al modelo cubano, provocada por el cierre parcial de la economía mundial producto del Covid-19, ha sido presentada como situación madura para un estallido social en Cuba contra la Revolución (Señora Alina Bárbara).
2. En el intento de revuelta han jugado carta varios factores: un gobierno que no se acerca del todo a TODOS Y CADA UNO de ciudadanos (sin excepción alguna que es lo que caracteriza a un comunista) y sus carencias (materiales y espirituales), pese a que dice ser comunista, grupos marginales que la crisis ha ido golpeando casi de forma hereditaria año tras año, intentos de la reacción nacional e internacional por aprovechar el momento para deshacerse del gobierno de Raúl Castro (Señor Alcántara llegando para sumarse a un movimiento ajeno a él) etc.
3. Carencia de condiciones subjetivas en Cuba para el desarrollo de una contrarrevolución.
4. Despliegue de todo un arsenal de multimedias, e intelectuales que van consolidando su oposición al gobierno, sin complejos ni miedo alguno.
5. Constatación de la existencia de dos grupos totalmente antagónicos y con intereses irreconciliables entre sí: el sector liberal burgués de las altas esferas del Partido Comunista y el empresariado estatal y el grupo liberal burgués que defiende la propiedad privada, que no quieren negociar (correo impositivo que el segundo grupo envío al Ministerio de Cultura controlado por el primero) o que no va a admitir un diálogo que extralimite los intereses de su grupo (como fue la respuesta del Ministerio de Cultura ha dicho correo).
6. La correlación de fuerzas muy favorable y abrumadora del primer grupo, que cuenta con más apoyo popular que el segundo.
7. Las profundas diferencias y gran división que existe en el segundo grupo liberal burgués mencionado.
8. La imposibilidad práctica que tiene el segundo grupo de conducirse con independencia, sin el apoyo, las muletas y la intromisión de los anticastristas de La Florida, es decir su falta de autonomía.
9. Lo ocurrido demuestra cuan peligroso puede resultar el escenario post “Día Cero” en la Tarea Ordenamiento
10. El sector anticapitalista está acéfalo, pero su masa es inmensa, se pudo ver en la Tangana del Parque Trillo (con independencia de quien la haya convocado) y que, parafraseando a Che, es la mayoritaria en todos los aspectos por ser la que crea los “valores” (savia del capitalismo), aumenta con su trabajo “abstracto” y fetichista la riqueza, y por ello siempre ha echado a andar las ruedas de la historia y que, salvo una gran casualidad y convergencia de factores históricos, JAMÁS apoyará masivamente al grupo liberal burgués que defiende la propiedad privada capitalista en Cuba.
Saludos y gracias al autor del artículo
Usted ya lo que da es risa. !
Impertinente con sus comentarios desde la lejania e irresponsable en su defensa de un sistema y sociedad que no conoce, que no ha vivido y que cree conocer y dictar catedra con su obsecada idea de los dos sectores. Que decir de su comentario improcedente sobre la profesora Alina.!!
Vaya Señor hacer su trabajo con sus infames mandantes.!
Para empezar se debe aclarar que los movimientos contrarrevolucionarios en Cuba NUNCA FUERON NI SERAN ESPONTANEOS, DIGO SI SE QUIERE CATALOGAR DE ESPONTANEO LA PRESENCIA TOTAL Y ABSOLUTA DE LOS GOBERNANTES NORTEAMERICANOS, SUS SICARIOS DE MIAMIA Y LOS REMANENTES DE LOS TERRORISTAS QUE HOY PIDEN EL DERRAMAMIENTO DE SANGRE CUBANA EN ESTOS HECHOS, por lo que lo de espontaneo, NO CABE NI CABRA NUNCA EN CUBA, SIEMPRE ESTARAN LOS CESARES NORTEAMERICANOS Y SUS SICARIOS MAS RECALCITRANTES Y CRIMINALES, POR LO QUE NUESTRO ESCRITOR HA DADO MUESTRA DE UN DESCONOCIMIENTO INEXPLICABLE EN UN CUBANO DESPUES DE MAS DE 60 ANOS DE POLITICAS CRIMINALES, GENOCIDAS, TERRORISTAS Y HEGEMONICAS DE LOS GOBERNANTES NORTEAMERICANOS CONTRA CUBA Y CONTRA EL MUNDO.
Mi analisis sobre los hechos los copio a continuacion:
Todo lo que se aplique para privar del trabajo a un cubano debe ser criticado y mucho mas cuando no se ha probado vinculacion alguna de la persona con los senores que hoy liderean la contrarrevolucion y son los enemigos numero uno de la humanidad.
El socialismo no es una propiedad privada de cubano alguno, tenga el nivel que tenga en el gobierno y el partido, es una propiedad de todo un pueblo y como tal debemos de actuar, dicho esto, y aclarando que soy un defensor total y absoluto de los gobernantes historicos, de los continuadores, del partido comunista de Cuba y de todas nuestras organizaciones de masas, que son la columna vertebral del centralismo democratico en el pais.
Empecemos ha hablar de Valdes Paz, quien toda su vida la invertido en viajes al exterior, fundamentalmente Espana, auto-invitado por las organizaciones progresistas en ese pais y donde ha dado conferencias y lecturas sobre el proceso cubano, esto lo ha convertido en un auto nombrado embajador cubano de la revolucion, titulo que nadie le ha dado, auto-titulo que le ha permitido tener mas horas de vuelo que un piloto de cubana de aviacion, lo que lo ha desvinculado de la realidad cubana en su avanzar dentro del pluebo cubano de a pie, sus actuales escritos estan plagados de vacios politicos, ideologicos y economicos y todo como consecuencia de su alejamiento de la fuente esencial dentro del pais Cuba EL PUEBLO CUBANO DE A PIE.
Fernando Perez, aqui podemos aplicar el dicho DIME CON QUIEN ANDAS Y TE DIRE QUIEN ERES, este senor se ha caracterizado siempre por un individualismo magistral y permanente, mantiene vinculos con cuanto seudo intelectual y enemigo de la revolucion existe en Cuba, digamos TANIA BRUGUERAS, elemento este que todos conocemos por sus vinculaciones con los centros de poder en los Estados Unidos de America, sus visitas a los centros diplomaticos capitalista en la Isla, sus exabruptos politicos e ideologicos contra la revolucion estan ahi y nadie en Cuba los negaria so pena de ser catalogado de mentiroso y desinformador, esta senora es una activista contrarrevolucionaria de primer orden, y estuvo junto al senor Fernando Perez en el grupito que visito y exigio, sin moral y prestigio alguno, un dialogo de leon a mono con los funcionarios del Ministerio de Cutura, aliados todos a los muchachitos contrarrevolucionarios del MSI, elementos dirigidos, organizados y financiados por el gobierno de los Estados Unidos de America, un apendice a extirpar en Cuba por su dependencia economica, politica e ideologica de los senores del Departamento de Estado de los Estados Unidos de America y los mas rancios terroristas radicados en Miami, se que los aqui senaladpos saltaran como lobos atrapados en una trampa, pero no haran otra cosa que negar lo que aqui se ha dicho por mi, eso seria el pataleo de un muerto que ya apesta por los dias que lleva en el proceso de descomposicion total y absoluta.
Hablemos ahora de la organizacion de los HS, que estuvo entre los seudo intelectuales que visito la residencia del MINCULT en la Habana, aqui cabe tambien decir, dime con quien andas y te dire quien eres, y cabe la pregunta, SABEN LOS REPRESENTANTES DE LA BHS, esos que estuvieron junto a los contrarrevolucionarios del MSI, que los hermanos Saiz fueron ejecutados por el capitalismo y sus sicarios de ocasion en Cuba???, sabian ademas que los que militan en la contrarrevolucion en Cuba, estan asociados a los que se fueron de Cuba en 1959, que eran miembros activos de los servicios represivos del dictador Batista y que ellos ocasionaron mas de 20 mil cubano muertos por torturas y disparos y regados sus cuerpos sagrados por toda la geografia cubana???, sabian los muchachitos representantes de la HS que los terroristas de Miami fueron y son los que dirigen las acciones de los del MSI, acciones terroristas dentro del territorio nacional y que sus guias y mentores son, entre otros TANIA BRUGUERAS, FERNANDO PEREZ y otros de similares caracteristicas terroristas y contrarrevolucionarias, aqui vendra el pataleo como lo ha hecho y hace hoy el senor Harold Cardenas Lema, que ha convertido el sitio de Antonio Guiteras, La Joven Cuba, en un antro que podemos denominar EL NUEVO DIARIO DE LA MARINA O EL DIARIO DEL ODIO , con toda la carga contrarrevolucionaria y desestabilizadora que ello implica.
Estamos en la obligacion tambien de mencionar a los representantes de la UNEAC que estuvieron en la bochornosa reunion presidida por el Vice-Ministro de ese Ministerio, que nunca debio aceptar reunirse con la flor innata de la contrarrevolucion en Cuba, pues con ello les estaba dando el sello de reconocimiento oficial de los mismos, cosa que no ha ocurrido por parte del Gobierno del Companero Diaz Canel, el companero General de Ejercito Raul Castro como Primer Secretario del Partido, y mucho menos por nuestro pueblo cubano de a pie, entonces hay que preguntarse, COMO ES POSIBLE QUE LOS REPRESENTANTES DE LA UNEAC QUE ACUDIERON AL BOCHORNOSO ENCUENTRO, LO HICIERON EN UNION DE LO MAS SELECTO DE LA CONTRARREVOLUCION CUBANA DEL MOMENTO, ??? a esa reunion nada mas que falto que asistiesen los ya conocidos, desprestigiados y asalariados mercenarios cubanos al servicio del gobierno de los Estados Unidos de America y sigo mis preguntas, ESTOS SENORES DE LA UNEAC NO FUERON CAPACES DE DIFERENCIAR UNA TANIA BRUGUERAS Y UN FERNANDO PEREZ, DE LOS QUE SUPUESTAMENTE, HOY SE DECLARAN INGENUOS Y ENGANADOS POR LOS DEL MOVIMIENTO MSI, ES POSIBLE QUE PERSONAS ANEJAS EN ESTAS LIDES DE LUCHA CONTRA LA CONTRARREVOLUCION, NO SE PERCATASEN DE COMO SE HUNDIERON EN EL FANGUIZAL Y LA PODREDUMBRE DE LA CONTRARREVOLUCION EN CUBA??? Pienso que los que dirigen la UNEAC Y LOS QUE CONTROLAN UN MINISTERIO COMO EL DE LA CULTURA EN CUBA, DEBEN DE SER ANALIZADOS PROFUNDAMENTE, PUES MANANA SE PODRIA APARECER TRUMP EN CUBA Y EXISTE LA POSIBILIDAD DE QUE TODOS ESTOS PERSONAJES SE REUNAN CON EL Y DESPUES DECLAREN QUE FUERON ENGANADOS.
Son muchos los anos de lucha, sacrificios, muerte, destruccion y desinformacion que hemos sufrido los cubanos de a pie en estos ultimos sesenta y tantos anos, por lo que no nos tragamos el tema de ingenuidad, desconocimiento y defensa de algunos seudo intelectuales que manifiestan que han sido olvidados y enviados al olvido en su bregar por la cultura cubana, siempre he pensado y pienso que uno de los valores que mas he admirado en cualquier hombre cubano, es la sencillez y la humildad, esos que trabajan y lo hacen dia a dia sin pedir reconocimiento y premios de tipo alguno, esos que lo dan todo y no piden algo, solo el respeto total y absoluto de todo un pueblo por los heroes y martires que nos dieron lo que hoy tenemos, no se puede mancillar esos hombres y mujeres con actos como los sucedido en el MINCULT, tanto por los contrarrevolucionarios, como por los funcionarios de ese organismo, que hoy se tuvieron que retractar del asqueroso e innecesario compromiso con la contrarrevolucion de seguir con las reuniones acordadas, esta situacion tiene que ser analizada con sumo cuidado y profundidad para que no se vuelva a repetir en Cuba, somos muchos los que pedimos la toma de medidas contra todos los que participaron de una forma u otra en este bochornoso acto contrarrevolucionario, si vamos a entregar la vida por el proceso revolucionario cubano en un enfrentamiento con el enemigo numero uno de la humanidad, nuestras espaldas tienen que estar protegidas de los quinta columnistas, los caballos de troya y los traidores, morir en la lucha es un honor, morir traicionado es un horror que no permitiremos nunca que suceda.
Que dificil debe ser, eso de andar todo el tiempo con esa camisa parda a cuestas.
Señores,nada más basta con caminar por los lugares llamados ” neurálgicos ” para darse cuenta de cómo está la tensión en la calle. A mí, ojalá esté equivocado,me da la impresión de un miedo atroz por parte de los represores. ¿ Qué apedrearon una tienda MLC ? Allá va todas las noches una patrulla con tres militares. ¿ Que si una manifestación está convocada ? Allá va la 7 ma flota criolla a esperar. A este ritmo no va a quedar nadie pa’ coger a los bandidos. Y entonces ??
Entre colas y disidentes tienen cogí’os pa’l trajín a todo el MININT y otras “yerbas aromáticas “
Azul, y asi ha sido durante 62 años.
El MSI terminó justo dese el momento en que se mostró todo el dinero q había circulando a su alrededor y el origen del mismo, además de toda la vulgaridad de los que se hacían llamar artistas. Estos hechos no tienen arraigo en el pueblo, han quedado moralmente al desnudo. Por otro lado quizás exista una lectura apropiada por parte de las instituciones y se generen nuevas formas o quizás espacios de diálogos para aquellos artistas, en el sentido estricto de la palabra, o para aquellas personas honestas y trabajadoras q no están al servicio de terceros vendiendo su alma al diablo a cambio de algunos centavos q pretenden alentar en Cuba y entre los cubanos la confrontación y la discordia a un altisimo precio.
No es posible ignorar el bloqueo económico q sufre cuba, ponerse al servicio del gobierno q lo ejerce y esperar levantar un movimiento popular en contra de las autoridades de la isla.
Faltaría añadir lo q hicieron con los símbolos de la nación. Del MSI, con estos antecedentes, solo queda desprecio e incredulidad y para aquellas personas honestas q lo apoyaron posiblemente tengan que cargar con la mirada desconfiada de la mayoría de los cubanos. Saludos
Por cierto, la cita de Maceo que acaban de destacar en Cubadebate da mucho miedo. Me refiero a “machete, machete que son poquitos”
¿De qué serán capaces?
En mi opinión, la crisis del MSI y la derivada de la sentada ante en el MINCULT no ha sido solucionada para nada a pesar que el Estado pretende haber dado una magistral clase de patriotismo, soberanía y diálogo constructivo. Empezando porque la prensa y los intelectuales de plantilla nos siguen atiborrando de sus argumentos y de su interpretación soberbia e inexacta de la realidad socio política existente como por el ambiente de susurros contestatarios en muchas partes y en muchos segmentos de la población. Los acontecimientos a partir de la actitud y represión del MSI, con todo y la escasa empatía que este grupo genera, siguen latentes y no parece que sean muy facil de desaparecer, aunque puedan no generar fracturas mayores.
Ni la actual dirección del poder tiene el talento ni el carisma para sobrellevarlo con éxito politico (que no represivo ni impositivo) ni los jóvenes tienen el compromiso ni la deuda con ese poder, asi como se desarrolla en un contexto de comunicaciones e informaciones no controladas del todo en las redes, por lo que de facto se crea una situación inédita que no pudieramos comparar con otras precedentes.
Algunas de las crisis anteriores fueron creadas o aprovechadas por el propio poder para liberar presión de la caldera, como en 1965 y 1994, que no es el caso actual aunque existen dificultades, pero no ese control requerido en la sociedad.
Tampoco me parece que haya relación con situaciones regionales, absolutamente diferentes a la nuestra, ni intentos de crear primaveras en un contexto demasiado peculiar e inédito.
Los “cambios” institucionales emprendidos incluida la nueva constitución no permiten los reacomodos necesarios para fomentar la esperanza para un disenso y una oposición constructiva que permita una Cuba inclusiva, ajena por supuesto a un anexionismo o a convertir a la nación en un show-room de neoliberalismo y paraíso de monopolios. Todo se ha hecho para eternizar una ideología de partido unico, incuestionable, irrevocable y solo dispuesta a dialogar para perfeccionarle su dominio y preponderancia.
La mala noticia es que parece muy improbable una solución pacífica y racional a este crisis tácita de ingobernabilidad (o para decirlo mejor, de gobierno eficaz y legitimado por los gobernados) salvo hechos fortuitos cercanos al milagro por la invariable postura de ese poder a aceptar un diálogo genuino y medular . La buena, pero muy buena noticia es que no pueden ser eternos y en términos políticos (que no religiosos) la eternidad no es mucho tiempo.
No es posible comparar la situación de Cuba con la de otros países en Latinoamérica porque sólo en Cuba hay un sistema unipartidista sin legislatura o justicia o prensa independiente que ha estado en uso por mad de medio siglo. Eso permite un nivel de represión que no es fácil de alcanzar en los demás países.
CARLOS ALBERTO, médico y escritor, me asombra el nivel de ignorancia que demuestra sobre la realidad del país. Usted es de los que está desinformado por los medios de difusión totalitarios, y que no tiene ni dinero ni tiempo para buscar otra información que no sea la oficial. Lo comprendo, ETECSA, mantiene los precios más altos de las Américas, para comprar sus paquetes de datos, no tiene tarifa plana, y la intranet reproduce el discurso oficial único. Usted esta desinformado oficialmente. En los últimos 3 años, lo único que ha hecho la dictadura, es poner en blanco y negro sus prácticas totalitarias de represión, y de violación de todos los derechos ciudadanos, ninguno reivindicable ni justiciable en el país. Lo que sigue haciendo es “legalizar” sus prácticas violatorias. Acá le dejo mi texto académico sobre el Totalitarismo en Cuba, para que empiece a ver los árboles y el bosque y no se quede con la desinformación oficial. El parlamento cubano cada vez que se reúne aprueba leyes y decretos leyes inconstitucionales porque violan los derechos plasmados en la CONSTITUCIÓN. Aprenda por favor, a entender la realidad cubana más allá del humo de la propaganda oficial, creo que es su responsabilidad ciudadana. Me alarma la ligereza con que usted toma la represión en Cuba y su falta de empatía mínima con la destrucción de miles de vidas físicamente y cívicamente de sus compatriotas. Horror de horrores!. Si usted es de izquierda, yo soy del planeta Marte. “Apaciguar” en medio del capitalismo militar de estado sin derechos, es una traición.
“Totalitarismo en Cuba: violencia estatal institucional, práctica y discursiva”. Las formas de sujeción, control y dependencia ciudadana al Estado, son inéditas en otros regímenes políticos contemporáneos. Los enfoques históricos, filosóficos, ideológicos o políticos sobre los regímenes totalitarios, no se han ocupado, hasta el momento, de los niveles de control social estatal de estas sociedades, que difieren de los que podemos encontrar en sociedades autoritarias o en sociedades democráticas. La cualidad específica de estos tipos de control social estatal ha sido solo mencionada en algunos aspectos, en el debate académico sobre el concepto y los regímenes políticos totalitarios realmente existentes (Traverso, 2001).
El presente texto toma el término “totalitarismo” usado en el lenguaje coloquial mediático y lo somete a un análisis profundo, en su condición de concepto analítico para explicar los múltiples tipos de control social estatal y las consecuencias que implica ese régimen político y económico contra las poblaciones que aún hoy las sufren, como Corea del Norte y Cuba.
En los últimos sesenta años, Cuba ha sido leída por la progresía internacional como una “caja negra” indescifrable, en tanto no se ha analizado por sus leyes, sus instituciones (organizaciones y reglas del juego) y sus políticas públicas. Salvo los pilares de salud y educación —siempre citados a partir del discurso oficial y con cifras fabricadas a puertas cerradas y sin control público—, el resto de la vida cotidiana de Cuba ha quedado invisibilizada, bajo ríos de propaganda del gobierno.
Aunque existen rasgos totalitarios que se observan en las dictaduras de partido único de China, Vietnam, Rusia, Venezuela y Nicaragua, a saber: la omnipresencia y privilegios de la policía política en esas sociedades, el terror estatal sistemático contra los ciudadanos y una vasta nomenclatura partidista parasitaria encargada de encuadrar y controlar a la población, los cinco países mencionados no presentan todos los rasgos del concepto totalitarismo. Los modelos económicos de esos países tienen amplios espacios de economía de mercado, tienen aún pequeños resquicios de oposición política legal, algunos medios de difusión independientes, algunos derechos restringidos de manifestación pacífica, algunas organizaciones de la sociedad civil independiente, aunque el actual gobierno de Nicolás Maduro pretenda copiar hasta el suspiro el modelo estalinista cubano.
En otras palabras, todos los países mencionados aplican el terrorismo de Estado[1] contra sus ciudadanos, pero solo Corea del Norte y Cuba son regímenes totalitarios estalinistas, aunque el régimen coreano se vista de la idea “Juche” y Cuba se vista de instituciones formales, vacías de contenido y contrarias a las “reglas de juego” democráticas. Como el “Putinismo” —hoy en Cuba—, las organizaciones y las leyes con alguna tolerancia hacia algunos derechos —“letra muerta”— se crean para no atemorizar tanto a los aliados y adversarios, y parecer menos impresentables ante la comunidad internacional.
Como dice el politólogo Leandro Querido en su artículo La moda de los datos: falacias y desinformación en datos sin contexto, los datos fuera de contexto que proporciona el gobierno cubano son una falacia:
“La falacia es un concepto muy bien conocido por quienes se dedican a las Ciencias Sociales o la academia, dado que es una afirmación o conclusión que se basa en la presunción de correspondencia entre ciertos datos o hechos que, en realidad, no es tal. Como ejemplo citaremos una aclaración que solemos sostener en la ONG: afirmar que un país es democrático solo porque celebra elecciones es una falacia, dado que la calidad de esa democracia puede delatar la presencia de un autoritarismo competitivo o incluso una dictadura, como en los casos de Venezuela (1999-2016) y Cuba, respectivamente.
Mal puede estudiarse la calidad de un fenómeno allí donde no existe, por lo que no hay estudios sobre calidad democrática que incluyan a Cuba o a Arabia Saudita, una dictadura una, y una monarquía teocrática absoluta otra… resaltar la paridad de género en un régimen totalitario es un dato vacío, porque para el dato comparativo solo debemos contemplar a los regímenes democráticos o competitivos. Las mujeres en el parlamento cubano representan al Partido Comunista, no a las mujeres cubanas” (Querido, 2020: 13).
En efecto, el 53.2 % de mujeres cubanas diputadas en la Asamblea Nacional no tienen voz política independiente al Partido Comunista de Cuba (PCC) y las mujeres discrepantes son sistemáticamente violentadas por las autoridades represivas del Estado.
La ausencia de discusión, prohibida de facto por el dictador Fidel Castro, sobre qué tipo de “socialismo” se reprodujo en Cuba, en sus leyes, instituciones (organizaciones y reglas del juego) y políticas públicas, impiden el conocimiento del país, sus estructuras de funcionamiento y la sistemática represión de todos los derechos universales, ninguno reivindicable ni justiciable. Hoy Cuba y Venezuela resultan los gobiernos que de manera más integral violan todos los derechos humanos: económicos, laborales, sociales, civiles, culturales y políticos en Latinoamérica.
La academia, dentro y fuera de Cuba, en su abrumadora mayoría, califica el régimen político y económico cubano como autoritario; no se permite el término de totalitarismo, parece ser que por la ausencia de campos de trabajo forzado o de campos de exterminio, o porque no aparecen comúnmente ciudadanos muertos en las cunetas (aceras, calles)[2]. El problema es que solo comprenden dicho término por las brutales consecuencias del “totalitarismo histórico” fascista, nazi y estalinista, y no actualizan el concepto ni su capacidad analítica para dar cuenta de la realidad.
Dicha academia atenúa y desconoce la gravedad de las consecuencias (costo social, económico, educativo y cívico) que ha traído para la ciudadanía seis décadas de dictadura, y a partir de los inicios de los años 70 del siglo pasado, de una dictadura estalinista totalitaria con todos sus mecanismos de violencia y control social estatal.
Por otra parte, se califica de “hegemónico”[3] al partido único cubano, cuando en realidad es un partido totalitario: al margen del control público y por encima de las leyes y la constitución. Esta “ligereza” en la utilización de los conceptos obedece también a la mordaza a las ciencias sociales y su sovietización desde los años 70, así como la eliminación de la carrera de Ciencias Políticas en 1970. Es decir, se mantiene en el país una falta de información y formación del aparato conceptual y académico para discernir los tipos de regímenes políticos modernos.
Hablar de dictadura y totalitarismo en Cuba es cruzar la barrera de la inclusión a la exclusión social, de la pertenencia social al ostracismo, de la “tranquilidad” ciudadana a la represión y la cárcel. Para los académicos cubanos en el exterior, pasar esta barrera cuesta el destierro y la imposibilidad de visitar de nuevo su país. Un procedimiento no escrito en ninguna ley de la República, pero sistemáticamente aplicado a todos los ciudadanos cubanos o de origen cubano y extranjeros que discrepen de manera pública de alguna política vigente en el país. El control del léxico —pleno de distorsiones y ausencias— con el cual se describe la realidad y la historia, es uno de los primeros síntomas del totalitarismo cubano y ha sido aplicado durante las últimas seis décadas.
Sin diagnóstico certero de la realidad, con un corrimiento y dilución de los conceptos que pudieran aprehender y explicar la realidad, la academia, los periodistas, la comunidad internacional y los propios ciudadanos cubanos —cautivos y desinformados en su mayoría—, no son capaces de generar una propuesta válida de cambio profundo y viable para la nación: sobre cuáles leyes, cuáles instituciones y cuáles políticas públicas erradicar, y cómo deben ser las “nuevas reglas del juego”[4], para luego no comenzar de nuevo la lucha contra el capitalismo militar de Estado, orientación actual del gobierno según las señales que da el actual presidente designado, Miguel Díaz-Canel, y los funcionarios de su gobierno, también designados.
La violencia que genera la ausencia de diagnóstico certero de la realidad, la ausencia de derechos económicos, laborales, sociales, civiles, culturales y políticos, empuja a la ciudadanía a la revuelta popular, como único medio de ser escuchada por el poder totalitario, y/o al mantenimiento del “caos social” cotidiano por la arbitrariedad de dicho poder y sus funcionarios. Los canales de participación ciudadana están herméticamente cerrados con los mecanismos del terrorismo de Estado, pero también por el encuadramiento ciudadano obligatorio y compulsivo a las organizaciones estatales que no los representan, creadas y financiadas por el PCC.
Las recientes declaraciones de Díaz-Canel sobre “destrabar” las empresas estatales dentro de las cuales los militares controlan los activos fundamentales, mientras las empresas no estatales están asfixiadas por decretos leyes y resoluciones ministeriales, manifiesta esta orientación hacia el capitalismo militar de Estado como línea central estratégica para el año 2020 y los posteriores. La empresa privada individual y cooperativa está pensada por el gobierno como una economía de “timbirichis”[5], sin valor agregado y en funciones marginales de servicio de baja calificación.
La lectura que hace la academia nacional e internacional de la realidad cubana, a través del discurso oficial, hace a investigadores rigurosos deslizarse hacia la superficialidad e irresponsabilidad. Así, el historiador Enzo Traverso, alerta sobre Cuba en la primera página del prólogo de su libro:
“En Cuba, los medios de comunicación son monopolizados por el Estado, la creación cultural está asfixiada por una autoridad de corto entendimiento, la palabra de Fidel se transformó en doctrina oficial, la expresión democrática de los ciudadanos está paralizada por un aparato burocrático omnipresente, pero la mayor parte de la población sigue percibiendo el régimen como el heredero de una revolución que liberó al país del yugo colonial. Una revolución desfigurada no es necesariamente sinónimo de aniquilación totalitaria de la política. Que hoy el fantasma del totalitarismo sea agitado por los sectores cubanos de Miami tiene más que ver con la propaganda anticastrista que con el debate intelectual y político (Traverso, 2001)”.
Esta visión de Enzo Traverso responde a la desinformación que ofrece el discurso oficial y su prensa maniatada, que el investigador constata pero no asume. La extinción totalitaria de la política se consumó en Cuba en los primeros cinco años después de enero de 1959.[6] Varios aspectos que describe Traverso resultan irresponsables:
1. Como se hace evidente, el autor no se percata de los tipos de violencia estatal que permiten todas estas desfiguraciones, las cuales, según él, no son rasgos del totalitarismo. Lamentablemente, el totalitarismo queda constreñido a los gulags soviéticos y los campos de exterminio nazi.
2. Hablar de “la mayoritaria percepción de la población” sobre los orígenes de la revolución, no cancela la posibilidad del totalitarismo en Cuba, como la revolución antizarista de 1917 no invalida el totalitarismo estalinista ni lo circunscribe al período en que gobernó Stalin.
3. “La percepción mayoritaria de la población” o “la propaganda anticastrista en Miami”, están tomadas de la narrativa oficial del partido único. Elemento “clásico” y repetitivo en el desconocimiento sobre Cuba[7], que no excluye su irresponsabilidad como académico.
Siendo su libro un valioso recorrido y una sistematización del debate sobre el totalitarismo, sus limitaciones académicas y sus preferencias políticas no le permiten al autor visibilizar las múltiples violencias estatales implementadas contra los ciudadanos.
En su libro El Telón de acero: la destrucción de Europa del Este (1944-1956), Anne Applebaum estudia el concepto de totalitarismo en Italia bajo Mussolini, y el estalinismo en la URSS, Europa del Este, Corea del Norte y China bajo Mao. También analiza el concepto desde la perspectiva de académicos y políticos, algunos detractores y otros que lo sostienen, para concluir:
“Sin embargo, aunque la idea de ‘control absoluto’ pueda ahora parecer absurda, ridícula, exagerada o tonta, y aunque la propia palabra haya perdido la capacidad de impresionar, es importante recordar que el ‘totalitarismo’ es algo más que un insulto mal definido. Históricamente hubo regímenes que aspiraron al control absoluto. Si esperamos entenderlos —si esperamos entender la historia del siglo XX—, tenemos que comprender cómo funcionaba el totalitarismo, tanto en la teoría como en la práctica. Además, el control absoluto no está totalmente pasado de moda. El régimen de Corea del Norte, establecido en el de la línea de Stalin, ha cambiado poco en 60 años. Si bien las nuevas tecnologías parecen dificultar la aspiración al control absoluto, y aún más su consecución, no podemos estar seguros de que los teléfonos móviles, Internet, y las fotografías por satélite no terminen convirtiéndose en herramientas de control en manos de regímenes que también aspiran a ‘abarcarlo todo’. El término ‘totalitarismo’ sigue siendo una descripción empírica útil y necesaria. Ya va siendo hora de recuperarlo” (Applebaum, 2014: 26).
Applebaum señala los cinco rasgos más sobresalientes del totalitarismo según los autores más reconocidos que han tratado el tema durante las décadas de 1940 y 1950 del siglo pasado: “Una ideología dominante, un único partido en el poder, una fuerza policial secreta dispuesta a utilizar el terror, el monopolio de la información y una economía planificada” (Applebaum, 2014: 24). La autora reconoce a Hanna Arendt como la estudiosa más importante al plantear el surgimiento de “la personalidad totalitaria”: hombres y mujeres cuya identidad dependen por completo del Estado, y las similitudes más que diferencias entre la Alemania nazi y la Unión Soviética.
Las leyes y violencia del sistema jurídico y legal del totalitarismo cubano
La nueva constitución cubana de 2019 conserva la jurisprudencia soviética estalinista en cinco aspectos claves que impiden el reconocimiento de los derechos humanos en Cuba:
La unidad de poderes, que anula los contrapesos de los poderes judicial, legislativo, electoral y ejecutivo.
El partido único se mantiene por encima y al margen de la ley. No existe control público sobre sus decisiones y funcionamiento, no existe tampoco ley que lo regule: el partido nunca rinde cuentas a la ciudadanía.
Como la constitución estalinista de 1976, no existen garantías constitucionales, jurídicas ni procedimentales para reivindicar y juzgar las violaciones de los derechos humanos universales en el país.[8]
La supremacía mayoritaria de la propiedad estatal “socialista de todo el pueblo” y la planificación centralizada de la economía por el partido-Estado, así como su control directo de todos los mecanismos de exportación-importación, mercados mayoristas, financiamiento y capital económicos.
El monopolio de los medios de comunicación, los cuales el gobierno considera “socializados”. Aún hoy, es el secretario ideológico del Comité Central del PCC el encargado de censurar lo que se puede publicar y qué no, y qué enfoque utilizar en cada publicación. La agenda de la prensa oficial, la televisión y la radio, la decide un pequeño grupo de altos funcionario del PCC, específicamente la comisión ideológica de su Comité Central (Azor, 2019b).
Los derechos proclamados en la nueva constitución, económicos, sociales, culturales y civiles, siguen siendo, un año y medio después, “letra muerta”. La ley electoral recientemente aprobada mantiene las comisiones de candidatura paralelas a los Consejos electorales en el nivel de circunscripción electoral, municipal, provincial y nacional, las cuales se encargan de elegir a los representantes —similar al sistema soviético— e impedir la elección de estos por la ciudadanía, a la que únicamente se les permite votar (Azor, 2019a).
Las nuevas normas en el sector de la cultura contra la libertad e independencia de creación —Decreto-Ley 349 y 373—, contra la gestión privada —Decreto-Ley 35—, contra las cooperativas —resolución ministerial del verano del 2017–, contra la gestión privada y los contenidos publicados en Internet —Decreto-Ley 370—, y contra el desarrollo de la pesca cooperativa e individual privada —Ley de pesca 2019—, establecen en blanco y negro las prohibiciones aplicadas por el partido-Estado de manera discrecional durante las últimas seis décadas.
El cambio de gobierno en los últimos tres años ha consistido en “legalizar” las prácticas totalitarias, aunque la narrativa oficial asegure que pretende acercarse a la ley[9] (Azor, 2019 a). El partido-Estado impone la unidad de poderes y no permite ninguna institución de contrapeso. Por eso el sistema judicial no imparte justicia, pues se somete a las orientaciones del partido y, en el caso de los discrepantes, a las arbitrariedades de los órganos represivos de la policía política y la PNR (Policía Nacional Revolucionaria). El ciudadano no puede acceder a abogados no estatales: los abogados independientes cubanos no pueden representar a los ciudadanos en los tribunales, aún siendo graduados de las instituciones educativas del país. Una norma no escrita pero aplicada desde hace sesenta años: “todo dentro del Estado, nada fuera del Estado”.
La nueva constitución de la República mantiene la imprecisión de los derechos, una narrativa más política que jurídica que condiciona los mismos y sus garantías a leyes complementarias hasta el 2028. No existe ningún canal ciudadano para participar y controlar el contenido de las leyes elaboradas por el partido-Estado, ni tampoco para exigir leyes no contempladas y menos aún para priorizar unas leyes respecto a otras obedeciendo a un determinado interés ciudadano colectivo o consenso popular. El reciente Decreto-Ley 6 y su reglamento sobre la información gubernamental, exige un convenio de confidencialidad con el ciudadano, impedido de difundir información pública y también la exigencia de explicar para qué se va a utilizar la información, contraviniendo los estándares internacionales sobre la información pública[10].
En la nueva ley electoral aparece un acápite sobre las “consultas populares” en los centros de trabajo y estudio estatales, así como en los barrios, pero sin valor vinculante. Es decir, los funcionarios —con la información cautiva por el partido-Estado— no están obligados a publicar el contenido de las demandas ciudadanas resultado de esas consultas, mucho menos a explicar a los ciudadanos las que pueden o no aplicarse. Las “consultas populares” en Cuba son decorativas para la ciudadanía y de cara a la comunidad internacional. No hay compromiso gubernamental con las demandas ciudadanas ni efecto vinculante para los funcionarios públicos.
En el reciente referendo para aprobar la nueva constitución se ocultó la demanda ciudadana sobre los siguientes aspectos, recogidos a lo largo del territorio nacional:
La exigencia de eliminar el papel “superior” del PCC en el sistema político cubano y someterlo a una ley que lo controle, para que rinda cuenta de sus fuentes de financiamiento y de los activos y bienes económicos que maneja.
La exigencia de un Tribunal de Garantías Constitucionales para monitorear la discrecionalidad con la cual se aplican e interpretan la vieja y nueva constitución por los funcionarios públicos, con efecto vinculante.
La exigencia de eliminar el capítulo tres donde se establece el derecho a utilizar la violencia, incluida la militar, contra los ciudadanos considerados “traidores”: un término utilizado por el partido y la policía política contra todos los discrepantes del discurso oficial, y que legaliza los “actos de repudio” y el vandalismo contra los mismos.
La exigencia de creación de una Comisión nacional o una Oficina Nacional que monitoree los derechos humanos en el país y con efecto vinculante[11].
Ninguna de estas demandas ciudadanas se publicó en los medios de comunicación monopolizados por el partido-Estado, tampoco se les dio respuesta a los demandantes.
En el código penal cubano existe el delito de “seguridad pre-delictiva”, descrito y con las penas correspondientes en los artículos del 73 al 84. Según este delito, las autoridades definen a los acusados por conductas “antisociales” que atentan contra las “buenas costumbres”. Esta laxa definición permite a los órganos represivos imponer la falta de libertad y confinamiento en centros especiales de trabajo y estudio, durante uno o cuatro años, a ciudadanos que no han cometido ningún delito tipificado, los que serán monitoreados por la policía política y la PNR.
Las organizaciones de derechos humanos cubanas han contabilizado decenas de miles de ciudadanos encarcelados por esta figura delictiva en los últimos cuarenta años. Por supuesto, ha sido y es una figura delictiva para castigar la discrepancia política. Como correlato de la actual legislación, el gobierno se ha permitido declarar durante más de seis décadas que no existen presos políticos en Cuba.
Las leyes cubanas están explícitamente escritas de una manera difusa —no es posible entender que existan juristas y filólogos graduados en las universidades cubanas con tales errores e imprecisiones técnicas e idiomáticas—, para permitir la interpretación discrecional de cada funcionario público: “todo contra la ciudadanía”. Por eso, la demanda de un Tribunal de garantías constitucionales y de una Comisión de derechos humanos son relevantes, si bien fueron no escuchadas u ocultadas por el gobierno.
Sistema de control y violencia institucional en Cuba
Las organizaciones legales en Cuba, sean estatales o civiles, tienen como condición de existencia y cooptación “la lealtad política” al PCC. Por lo tanto, el criterio de selección de sus miembros no está basado en la competencia especializada, habilidades de desempeño, intereses ciudadanos y/o concursos de oposición. Las organizaciones independientes al PCC son ilegales, por lo que sufren represión sistemática, y cuando son toleradas, actúan con la incertidumbre de que tal tolerancia termine en algún momento (Cárdenas Lema, 2020). La permanente persecución y criminalización de la autonomía ciudadana es otro rasgo sobresaliente del totalitarismo cubano (Azor, 2019a).
Por otra parte, las organizaciones fundamentales del Estado, el PCC y las organizaciones civiles masivas o gremiales creadas por este —que son la mayoría—, tienen una estructura piramidal y jerárquica, carecen de transparencia y control público, y sus dirigentes son designados y aprobados por el PCC. Sus métodos de funcionamiento son militares —de “ordeno y mando”—; no discuten las órdenes de instancias superiores, las cumplen. Los reglamentos internos de estas organizaciones son desconocidos para la gran mayoría de los ciudadanos y se utilizan de manera discrecional por los funcionarios públicos que las dirigen, para sancionar, promover, premiar, separar y expulsar a sus miembros.
El tráfico de influencias es el segundo criterio más utilizado, luego de “la lealtad política”, para incorporar nuevos miembros a las organizaciones oficiales: “ser amigo de alguien en el poder” trae ganancias financieras y/o de promoción y “protección” social.
El tercer criterio de cooptación es la compulsión obligatoria y automática cuando se llega a cierta edad, se reside en determinado barrio, se ingresa a un empleo estatal o se arriba a un centro de estudios: desde la enseñanza primaria hasta la universitaria. Los ciudadanos son reprimidos si no se incorporan a estas organizaciones barriales, estudiantiles, gremiales —según la profesión—, femeninas —como la Federación de Mujeres Cubanas—, o del sindicato único.
Todo el que no quiera pertenecer a estas organizaciones controladas y creadas por el partido-Estado —o pretenda crear asociaciones y organizaciones alternativas—, es violentado con represalias que van desde la pérdida del puesto de trabajo o estudio, el impedimento de salida del país, citaciones ilegales de la policía política y la PNR, arrestos y multas arbitrarias, hasta la cárcel, como sucede con los miembros de organizaciones civiles independientes. Este sistema de encuadramiento, regimentación y control de la ciudadanía, tanto a nivel individual como por sectores, solo acontece en regímenes totalitarios vigentes como el cubano.
Las “reglas del juego” resultan indefinidas y arbitrarias. La ausencia de responsabilidad y transparencia, así como la negligencia de las instituciones estatales frente a la precariedad económica y la pésima calidad de los servicios públicos, hace coexistir la represión política con las reglas del “más fuerte” y “sálvese quien pueda” en la sociedad: otra violencia cotidiana en la convivencia pública que genera el totalitarismo[12].
Las “reglas del juego” nunca están claras o son abiertamente represivas. Todo lo que no se reprima por ley está prohibido de facto para la ciudadanía, similar a la experiencia estalinista soviética. En este sentido, coincido con los autores que describen el régimen totalitario como el “caos permanente” que vive la ciudadanía y no como la aplicación de la técnica de manera instrumental en los campos de exterminio nazi. En Cuba, la irracionalidad —el fermento de las pasiones de amor y odio, actos de repudio, vandalismo social contra las casas de los opositores y el canto a la estulticia—, es promovida por el partido totalitario para provocar los enfrentamientos cotidianos entre los ciudadanos. La irracionalidad es el discurso y la práctica de una sociedad encuadrada y regimentada bajo la violencia estatal institucional y discursiva.
El MININT y la PNR allanaron la casa de la periodista independiente Iliana Hernández sin orden legal, le “confiscaron” laptop y teléfono y le impusieron una multa utilizando el Decreto-Ley 370,[13] según su artículo 6, por “difundir, a través de las redes públicas de transmisión de datos, información contraria al interés social, la moral, las buenas costumbres y la integridad de las personas” (AA, 2020). Este tipo de represión, habitual en los últimos tiempos, evidencia que el interés social, las buenas costumbres, la moral y la integridad de las personas, las define el PCC de manera arbitraria y de espaldas al consenso ciudadano.
Las instituciones y organizaciones estatales, partidarias, masivas y gremiales en Cuba, ¿son débiles o fuertes? Las organizaciones construidas con criterios políticos de exclusión, escoltadas por la represión, obligadas a defender los intereses del partido y no los del ciudadano, son un cascarón vacío de legitimidad, como evidenció el derrumbe del totalitarismo soviético. Las instituciones fuertes son aquellas transparentes, con claras “reglas del juego”, bajo control público, con probidad en su desempeño y que siguen funcionando normalmente y con eficacia de servicio, al margen del partido político que se encuentre en el poder. Para el PCC, sin embargo, las instituciones cubanas son “fuertes” porque están militarizadas y bajo su mando. Sin alternancia de poder frente a otras corrientes políticas y sin control público independiente, el PCC pasó de representar la “vanguardia revolucionaria” a ser la retaguardia reaccionaria que obstruye el desarrollo y viola todos los derechos y garantías constitucionales.
La crisis estructural del sistema desde hace 30 años no se debe al embargo estadounidense, sino a la incompetencia del partido-Estado para facilitar y comandar el desarrollo, y permitir con ello el bienestar ciudadano. No existe ninguna justificación para mantener estas formas de sujeción, control y represalias estatales contra los ciudadanos: económicas, laborales, cívicas, sociales, culturales y políticas. Si los militares cubanos se han apropiado de los mayores activos de la economía dizque estatal y se han centrado en el turismo, es cierto que padecen el embargo. Una economía diversificada, sin monopolios, con formas de propiedad y gestión medianas y pequeñas, permitiendo su respaldo jurídico, sin impuestos leoninos como los existentes, eliminaría de facto las consecuencias del embargo estadounidense.
En Cuba se puede acceder gratuitamente a una operación de corazón abierto —otro asunto es cuánto tiempo se sobrevive—, pero la economía centralmente planificada no logra mantener una venta de jugo natural en las esquinas de cualquier ciudad, en un país productor de cítricos.
El totalitarismo fabrica una pantalla irreal para la comunidad internacional. Por eso, la información sobre la mortalidad infantil (Sánchez, 2020), los índices de pobreza, los resultados de votaciones, la seguridad alimentaria, el crecimiento de la economía, todos datos fabricados a puertas cerradas y sin control público independiente al PCC, carecen de credibilidad.
Todas las organizaciones internacionales de derechos humanos tienen prohibida la entrada a Cuba: o no son invitados, o tienen prohibición expresa de entrar al país, como Amnistía Internacional. Todos los Relatores especiales de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), dedicados a evaluar las condiciones carcelarias, los arrestos arbitrarios, las desapariciones forzadas, la libertad de expresión, reunión, manifestación pacífica, libertad sindical, o no son invitados a visitar el país, o directamente se les niega la entrada. En los últimos 12 años han visitado el país tres relatores de la ONU: alimentación (2007), trata de personas (2017), y cooperación internacional (2017), los tres con “visitas dirigidas”[14] y acceso solo a la información gubernamental. Los resultados evaluativos de estas visitas son desconocidos por la ciudadanía.
La base del terrorismo de Estado en Cuba
Siendo una política del Estado la represión a los distintos tipos de discrepancia económica, social, civil, política y cultural, la violación cotidiana de los derechos fundamentales es ejercida por las autoridades en los arrestos y en todos el resto de procedimientos judiciales, laborales y penales.
El procedimiento es el siguiente: la policía y los Instructores del MININT tienen un catálogo de delitos comunes en el código penal, del cual imponen cualquiera de ellos por delitos no cometidos.[15] El Fiscal siempre confirma dichos delitos fraudulentos, no hay revisión de la pertinencia o no de las acciones de los detenidos y el delito que se le imputa, y el proceso sigue su curso con otras tantas violaciones al propio código penal y a su reglamento. Los tribunales reciben las informaciones de la fiscalía y no existen mecanismos de defensa para impugnar los resultados de las investigaciones de los fiscales. Los abogados defensores tampoco pueden impugnar los resultados de la investigación fiscal y pedir una investigación independiente. Los abogados defensores tienen, por ley, acceso al expediente del preso cinco días antes del juicio, es decir, la ley los incluye una vez terminado el proceso investigativo[16]; pero como estos pueden demorar ocho meses o más, los prisioneros pueden morir en prisión y no haber tenido acceso nunca a un abogado defensor (Agencia EFE, 2017).
La discrepancia política no está contemplada en las leyes cubanas como delito; es más, la crítica de los ciudadanos aparece como derecho en la Constitución de la República de 1976; tampoco está contemplado el delito de manifestación pacífica. Sin embargo, para paliar estas ausencias, la PNR, los instructores del MININT, los fiscales y el sistema de tribunales, imponen con total impunidad delitos no cometidos por los supuestos infractores: “atentado contra la autoridad” cuando es el detenido quien sufre detención violenta, “receptación ilícita” aún cuando se muestran los documentos que demuestran la propiedad de los bienes incautados, “usurpación de la capacidad legal” para los periodistas independientes, “disturbios del orden público” cuando hay manifiestación pacífica. Por eso muchos activistas de Derechos Humanos, periodistas independientes y activistas políticos no firman las actas de detención, porque en las mismas aparecen delitos que no se han cometido (Azor, 2017).
El asesinato estatal de la reputación de los opositores en la televisión nacional
Al líder de UNPACU (Unión Patriótica de Cuba), José Daniel Ferrer, preso desde el 1 de octubre del 2019, se le imputó una causa por “lesiones” a otro ciudadano, que fueron desmentidas por testimonios de la propia familia de la supuesta víctima y otros activistas de UNPACU. A finales de noviembre del 2019 la televisión estatal difundió un video con material creado por la policía política para liquidar la reputación del activista, presentándolo como un delincuente común y reincidente, sin contar con las versiones del acusado, los testigos, familiares de la supuesta víctima y activistas de la organización. Este ejercicio televisivo violó la presunción de inocencia del incriminado antes del juicio oral y ocultó toda la información precedente de un activista que también había estado preso a raíz de la Primavera Negra del 2003.
En febrero del 2020, la televisión vuelve a intentar legitimar el sistema jurídico cubano contra Ferrer, aún sin abogado defensor y sin ser presentado ante los tribunales; por lo cual, la difamación viola nuevamente el derecho de presunción de inocencia. Dos habeas corpus fueron presentados por activistas de la organización y familiares del líder opositor, pero este recurso del derecho internacional no existe en el Código Penal cubano. Una vez que el fiscal dicta prisión provisional con la fecha discrecional que él entienda, el preso no tiene derecho al habeas corpus.[17] Esta arbitrariedad orientada por el partido-Estado a todos sus órganos represivos, judiciales y laborales, constituye la base del terrorismo ordinario en Cuba (Azor, 2017).
El juicio a puertas cerradas aplicado a José Daniel Ferrer contó con todas las irregularidades. El abogado defensor de oficio y estatal solo tuvo nueve días para preparar la defensa, luego de casi seis meses de privación de libertad, y no tomó como testigo a los familiares del supuesto afectado que contradijeron la denuncia del acusador. El testimonio de los familiares de Ferrer, subrayó cómo fue reprimido el léxico y cómo un agente de la policía política le hacía señas al tribunal para que cortara testimonios que podían evidenciar la inocencia del acusado. Aunque recientemente Ferrer ha sido excarcelado, sigue confinado en su domicilio con una licencia extrapenal que le indica cumplir cuatro años y medio más. Los tres activistas de UNPACU presos y encausados junto con José Daniel Ferrer fueron excarcelados bajo las mismas condiciones y tiempo de reclusión domiciliaria.
El control, la violencia territorial y de los espacios deliberativos ciudadanos
El Decreto-Ley 217 del 22 de abril del 1997 (López Benítez, 2012) sobre la movilidad territorial interna, reprodujo el mismo mecanismo de control soviético de los ciudadanos. No solo para residir en un territorio de la república y para tener una cartilla de racionamiento es necesario tener un permiso de las autoridades: también visitar y permanecer en casa de los amigos es un delito, por lo que el ciudadano puede ser desterrado a su ciudad de origen si es un discrepante público. Muchos activistas y periodistas independientes han sido obligados por la policía política y la PNR a montarse en un transporte público para regresar a sus provincias sin poder realizar las gestiones que los llevaban a trasladarse a otras provincias del país. También las autoridades prohíben arbitrariamente a los activistas y periodistas independientes salir de sus provincias de origen.
Por otra parte, este decreto y la creación del Ministerio de Planificación Física, aplican el desalojo de las familias que han construido barrios “llega y pon” para huir de las condiciones paupérrimas de sobrevivencia en sus provincias de origen. Estas poblaciones vulnerables no tienen alternativas de estadía y construcción, a no ser que sean necesarias como mano de obra en las empresas estatales. A veces son toleradas, otras no. El grave problema de vivienda acumulado desde hace décadas ha provocado la aparición de numerosos cinturones de miseria alrededor de la capital (López Benítez, 2012).
Los espacios deliberativos en instituciones estatales están fuertemente reprimidos. Los espacios de las pocas revistas u organizaciones civiles toleradas, o cualquier peña literaria en los domicilios de los autores, están custodiadas por la policía política. Los espacios estatales, como por ejemplo los Últimos jueves de la revista Temas, existen a condición de que los panelistas sean cuidadosos y no se salgan del discurso oficial. Las peñas y encuentros privados de escritores o de organizaciones de la sociedad civil independiente son sencillamente abortados y reprimidos.[18]
Las “consultas populares” son dirigidas por funcionarios sin resultado vinculante, y bajo la presión de ser reprimidos si discrepan de la línea aprobada por el partido. Por ejemplo: fue una orientación expresa del PCC prohibir la discusión, en las asambleas antes del referendo, del lugar y el papel del partido, la violencia legalizada contra los discrepantes y el carácter irreversible del socialismo en la nueva constitución.
La nueva ley migratoria de 2013 eliminó un permiso de salida que costaba 150 dólares y un permiso de residencia en el extranjero que costaba 900 euros en 1999, sin el cual se perdían los bienes familiares heredados y el derecho a ellos. Si no se pagaba este permiso, los bienes eran confiscados por el Estado al cabo de 11 meses. Sin embargo, la nueva ley obliga a regresar al país cada 24 meses, de lo contrario los bienes son confiscados.
La ley del 2013 deja el margen para impedir salir del país a los activistas de derechos humanos y periodistas independientes según “el interés público” y “los criterios de la Seguridad del Estado”, dos figuras no definidas en la ley y utilizadas discrecionalmente por el gobierno totalitario, cuya cifra de regulados sin razones legales entre 2019 y los primeros meses del 2020 superan las 240 personas, en su mayoría notificadas en el momento de subir al avión.
La violencia discursiva y la represión del conocimiento
El término y contenido de la “neolengua” aparece bien definido en la novela 1984 de George Orwell. Se trata de resemantizar el léxico habitual y convertirlo en un arma de dominación del partido único sobre los ciudadanos. Eliminar la riqueza del lenguaje, simplificarlo; eliminar radicalmente algunas palabras y dar a otras un nuevo significado: todos son procedimientos que generan una manera de nombrar un mundo alternativo al real, impidiendo el pensamiento discrepante y asfixiando la autonomía ciudadana (Azor, 2018: 70).
Por ejemplo, en el discurso oficial cubano no encontraremos el término “autonomía ciudadana”. El PCC no entiende que los ciudadanos puedan tener autonomía económica, social, civil, política y cultural. Este término desapareció del lenguaje popular y de los medios masivos de comunicación. Por eso, quien reivindique autonomía ciudadana y respeto a los derechos humanos es tildado de “enemigo”, sufriendo represalias económicas, sociales, culturales, civiles y políticas.
Los derechos humanos están ausentes de la opinión pública y de la investigación social dentro de Cuba. Cuando aparece este término en el discurso oficial es para mencionar los derechos a la salud y la educación, el acceso a la “ornamental” cultura permitida, y a los deportes.[19] Los derechos humanos restantes son invisibles y no nombrados por el discurso oficial.
El término de “políticas públicas” apenas se utiliza en el discurso oficial, que no se permite el análisis de las mismas como parte de la opinión pública, ni tampoco en las ciencias sociales. Quien intente hacerlo, deberá atenuar la realidad y acercarse al discurso oficial: de cualquier manera, no es escuchado.
“Democracia” es igual a partido único; “democracia participativa” significa obedecer las órdenes del PCC de manera militarizada. La “sociedad civil” se compone de organizaciones subvencionadas por el Estado que trasmiten las órdenes del PCC al resto de la población y se dedican a controlar, vigilar y reprimir a los discrepantes.
El término “pobreza” solo se utiliza para describir la realidad exterior, nunca para describir la pobreza en el país. Un tema tabú imposible de conocer, porque el gobierno cubano es el único en Latinoamérica que oculta los índices de pobreza y desigualdad desde hace más de 30 años.
El término “libertad” es igual a independencia nacional, pero no existe como derecho individual ni colectivo. Los términos patria, nación, revolución y partido comunista son intercambiables: para el poder y sus medios oficiales, significan lo mismo (Azor, 2018).
Además de resemantizar las palabras habituales y hacer desaparecer otras, el aparato ideológico del partido reprime la construcción del conocimiento sobre la realidad cubana y del mundo.
Las represiones gnoseológicas que el partido totalitario impone a los medios masivos de comunicación y a las ciencias sociales en Cuba incluyen: ocultar la realidad económica, social, cultural, civil y política en el país; permitir una historia oficial y reprimir la historia nacional; ausencia de datos vitales para la información ciudadana y la investigación social; prohibición de evaluar las políticas públicas y las decisiones gubernamentales en curso, con represalias de diferente grado: desde multas exorbitantes hasta la expulsión al exilio o la cárcel.
Está prohibida la comparación con las leyes, instituciones (organizaciones y reglas del juego) y políticas públicas de los países del mundo y de la región más eficientes en estos aspectos. Está prohibido el análisis del “socialismo real” soviético y su copia en Cuba, así como de la institucionalidad soviético-cubana vigente en el país (Azor, 2018).
Otras represiones gnoseológicas: imponer el discurso oficial único del determinismo histórico, cultural y geopolítico para justificar la dictadura de partido único y el subdesarrollo endémico; la negativa gubernamental a difundir, educar y aplicar los derechos humanos y los Pactos Internacionales aprobados en la ONU; la prohibición de difundir la represión política y civil, la arbitrariedad de policías y tribunales, y la brutalidad policial contra la ciudadanía. (Azor, 2018).
Escenarios posibles, a manera de conclusión
Según las señales públicas del gobierno y la normativa elaborada en los últimos tres años, que no han hecho más que “legalizar” las prácticas totalitarias de todo el aparato estatal y partidario, el escenario más probable es el deslizamiento a un “capitalismo militar de Estado” sin derechos ciudadanos, en los cuales la nomenclatura estatal y partidaria se distribuya los activos económicos del país comandados por el conglomerado GAESA, dirigido por los militares.
En este escenario, las reformas económicas, políticas y civiles que permitan el respeto a los derechos humanos serán postergadas indefinidamente. Privatizadas o no, la autonomía que logren las empresas estatales sin igualdad de condiciones y derechos con otros sectores no estatales, mantendrá la inoperancia, la ineficiencia y la opacidad de la economía cubana, además de —como hasta el momento— la violación de los derechos humanos, ninguno reivindicable ni justiciable en el país[20].
Un segundo escenario sería posible solo con el apoyo internacional y la presión ciudadana para pasar a un capitalismo liberal, con economía de mercado y Estado benefactor como los existentes en Canadá, los países nórdicos, Suiza, Bélgica, Francia y Alemania, que son los países con mayor respeto a todos los derechos universales.
Un tercer escenario posible con apoyo internacional y presión ciudadana sería la transición a un capitalismo liberal de estado mínimo y economía de mercado con respeto a los derechos fundamentales de expresión, reunión, manifestación, prensa libre, libertad de cátedra y autonomía universitaria.
Los dos escenarios últimos implican reformar la constitución, las leyes, las instituciones (organizaciones y reglas del juego) y las políticas públicas actuales y plantearse un estado de derecho inexistente en Cuba. Una mezcla de estos dos últimos escenarios aparece en la “Propuesta a la nación” de la UNPACU, el movimiento opositor más numeroso del país.[21]
Bibliografía:
AA, (2020): “La Policía multa y decomisa sus herramientas de trabajo a Iliana Hernández”, Editorial Diario de Cuba, 10 de febrero.
Agencia EFE en la Habana (2017): “La disidencia cubana denunció la muerte de un preso político en una cárcel de máxima seguridad cerca de La Habana”, en Infobae.com, 7 de marzo.
Applebaum, Anne (2014): El Telón de Acero: La destrucción de Europa del Este 1944-1956. Barcelona: Penguin Random House Grupo Editorial, S.A.
Azor Hernández, Marlene (2013): “Los cerrojos del sistema electoral cubano”, Cubaencuentro.com, 28 de mayo.
— (2017): “El terrorismo de Estado en Cuba”, Cubaencuentro.com, 6 de abril.
— (2018): “Democracia y derechos humanos: la “neolengua” del gobierno cubano y sus intelectuales orgánicos”. En Las Ciencias Sociales en contextos autoritarios: producción académica, censura y represión en los escenarios de postguerra fría, CADAL, Fundación de Derechos Humanos, ITAM y Campus de León en México.
— (2019a): “La dictadura y su nueva ley electoral estalinista”, Cubaencuentro.com, 25 de junio.
— (2019b): “La dictadura cubana criminaliza toda autonomía ciudadana”, Cubaencuentro.com, 10 de julio.
— (2019c): “La diplomacia cubana se hace de espaldas al soberano” (I), (II), (III), Cubaencuentro.com, 18 de junio, 19 de junio, 20 de junio.
— (2019d): “Cuba: punta de lanza de la izquierda colonial”, Cuabencuentro.com, 28 de octubre.
Cárdenas Lema, Harold (2020): “Camino a la impunidad”, La Joven Cuba, 21 de enero.
Even Sandvik (2017): Cuba fue diferente: El derrumbe del socialismo euro-soviético visto desde el Partido Comunista de Cuba (1989-1992). Tesis de doctorado. Universidad de Bergen.
Helman, Pablo (2017): “El que crea que la oposición cubana es solo la derecha de Miami está equivocado” en https://www.perfil.com/noticias/elobservador/el-que-crea-que-la-oposicion-cubana-es-solo-la-derecha-de-miami-esta-equivocado.phtml , 6 de mayo.
López Benítez, René (2012): “Decreto-Ley 217. Regulaciones migratorias en la Habana”, Referencia Jurídica, 24 de mayo.
Querido, Leandro (2020): “La moda de los datos: falacias y desinformación en datos sin contexto”. Revista digital Desafíos de la Democracia en America Latina, Edición 11, febrero.
Sánchez, Yoani (2020): “El ‘pinchazo’ de las estadísticas en Cuba”, 14ymedio, 6 de enero.
Traverso, Enzo (2001): El Totalitarismo. Historia de un debate. Buenos Aires: EUDEBA.
UNPACU, (2020): “Propuesta a la Nación cubana”, unpacu.org, 25 de mayo.
Notas:
[1] Concepto de terrorismo de Estado: Los Estados poseen el monopolio de la fuerza para poder cumplir sus fines, pero deben usar ese derecho racionalmente y de acuerdo a las leyes. Cuando el Estado a través de sus gobernantes reprime a la población, la hostiga, la persigue, de modo sistemático, para poder llegar a dominarla a través del temor, evitando cualquier acto de resistencia a la opresión, esa manera de actuar recibe el nombre de terrorismo de Estado, que es un abuso de su poder coactivo, donde los civiles son secuestrados, torturados o asesinados, sin juicio previo, o sin las garantías del debido proceso. Aunque existen otras definiciones de especialistas del derecho, todas coinciden en dos puntos: arbitrariedad de las autoridades en la aplicación de la ley y generar el temor sistemático en la población para imponer el dominio de las autoridades sobre la población (Azor, 2017).
[2] Este es el rasgo privilegiado por el historiador Enzo Traverso, para delimitar que aquellos regímenes políticos que no presenten en sus realidades campos de trabajo forzado o campos de exterminio, no pueden ser considerados regímenes totalitarios. En Cuba es un ejemplo de campo de concentración con trabajo forzado las UMAP (Unidades Militares de Ayuda a la Producción), pero aún hoy hay campos de trabajo forzado como las poblaciones penales utilizadas para la producción de carbón de marabú.
[3] La hegemonía gramsciana no tiene nada que ver con el partido totalitario que impone —por la fuerza de la represión y los medios de difusión cautivos por el PCC— una única visión del país y del mundo, un discurso incontestable. No hay intelectuales “orgánicos” sino súbditos a las órdenes del partido. Quien rebase este límite es sistemáticamente reprimido.
[4] Los derechos humanos son un tema tabú en Cuba; quienes intenten discutirlos y analizarlos son brutalmente reprimidos. Aún hoy, la declaración universal de derechos humanos es confiscada en la aduana. Todos los señalamientos hechos por la ONU en las Evaluaciones Periódicas Universales (EPU) del 2009, 2013 y 2018, son desconocidas por la ciudadanía cubana. Todas las evaluaciones de los comités de la ONU sobre los convenios de los que el gobierno cubano es estado parte, son igualmente desconocidas por la población cubana (Azor, 2019c).
[5] Economía de “timbirichis” quiere decir: permitir pequeños puestos de comiderías o reparación de zapatos o equipos domésticos o de autos, que no puedan desarrollarse y carecen de insumos nacionales. Las PYMES que existen el país, como restaurantes y hostales, no tienen respaldo jurídico, porque se les considera instituciones personales y no jurídicas. No tienen derecho a mercados mayoristas, no tienen derecho a importar ni a exportar al margen del Estado.
[6] Si se entiende por “extinción totalitaria de la política”: sepultar los conflictos lógicos de la pluralidad económica, social, cultural y política mediante el terror material, legal y simbólico. Para ello se fusila a los adversarios, o se les encarcela con largas penas de prisión, se elimina la sociedad civil existente y se regimenta y encuadra la sociedad en nuevas organizaciones obedientes al partido único o al líder mesiánico.
[7] En el 2017, la autora fue entrevistada por un periodista argentino que descubrió en ese momento que la oposición al régimen cubano no era un asunto de Miami sino de millones de cubanos dentro y fuera del país. Ver Pablo Helman: “El que crea que la oposición cubana es solo la derecha de Miami está equivocado”, 6 de mayo, 2017.
[8] Aunque aparecen algunos derechos civiles y jurídicos no contemplados en anteriores constituciones como la del año 1976, o la reforma de 1992, estos siguen siendo letra muerta un año y medio después de aprobarse la constitución.
[9] La Ley 88, conocida por “ley mordaza” de febrero de 1999, impedía con penas de cárcel, la difusión de información ciudadana sobre la realidad cubana si estás se publicaban en sitios extranjeros. El Decreto-Ley 370, penaliza con multas astronómicas, acoso y arrestos arbitrarios, publicar en Internet fotos y textos sobre la realidad nacional. No se trata de información “delicada” para la seguridad del país, se trata de anular la posibilidad de comunicar internamente y hacia el exterior, la vida cotidiana de la población y los índices económicos y sociales necesarios para evaluar la realidad por académicos y especialistas.
[10] En el contexto regional, la Ley modelo interamericana de acceso a la Información establece los indicadores del derecho a la Información, en su página 6, punto 5, incisos a, b, c, d, e, f, g y h. Por otra parte, el punto seis regula la necesaria apelación cuando no se obtiene la información, y la protección para no recibir represalias por demandar información pública.
[11] Estas demandas fueron escritas y pedidas por varios comentaristas en el foro oficial de Cubadebate.cu a propósito de la nueva constitución y antes del referendo, también en la prensa online independiente —compuesta por más de 20 sitios de prensa y blogs— bloqueada para el territorio cubano por el gobierno, pero también, la ausencia de información gubernamental pública ha sido señalado por académicos cubanos y extranjeros.
[12] La persistente precariedad material de alimentos, medios de transporte, intermitencia de medicamentos, de fluido eléctrico, de agua potable, la sistematización de los derrumbes de viviendas, los albergues estatales temporales en condiciones deplorables convertidos en albergues permanentes para los afectados de derrumbes, colocan al ciudadano en una lucha por la sobrevivencia similares a las de un país recién salido de una guerra. En este contexto, “las reglas de la jungla” afloran en la convivencia ciudadana.
[13] Los órganos represivos no “confiscan”, roban arbitrariamente los instrumentos de trabajo a los discrepantes del PCC con total impunidad, y la mayoría de las veces no existen documentos entregados a la víctima donde conste los objetos confiscados. Es otra arbitrariedad y violencia del partido estado totalitario contra los discrepantes.
[14] Las “visitas dirigidas” se anuncian en los medios, pero no se puede consultar en Cuba el informe de los relatores. Estos son acompañados en sus visitas por funcionarios públicos que antes han seleccionado, embellecido, reparado y/o mejorado los centros de estudio y trabajo a visitar, así como han seleccionado los ciudadanos que van a interactuar con los relatores. No hay nada improvisado en estas visitas dirigidas.
[15] En los tribunales laborales, los representantes del PCC, los patrones y la CTC (Central de Trabajadores de Cuba), “amarillista” despiden y sancionan a los trabajadores sin posibilidad de apelación: las sanciones y expulsiones siempre son confirmadas por los órganos superiores de los tribunales laborales.
[16] Artículo 281: Formuladas las conclusiones por el Fiscal o, en su caso, por el acusador particular, el Tribunal, de estimar completas las diligencias necesarias para proceder, abrirá la causa a juicio oral, teniendo por hecha la calificación, y dispondrá se requiera a los acusados y terceros civilmente responsables, con entrega de las copias presentadas, a fin de que designen Abogado para su defensa, de no tenerlos ya designados, bajo apercibimiento de que, de no hacerlo en el acto o, a más tardar, dentro de cinco días, se les nombrará Defensor de oficio. Ley de procedimiento penal 1977.
[17] En el caso que nos ocupa, la resolución de privación de libertad del fiscal fue conocida por los familiares de José Daniel Ferrer un mes después de permanecer en prisión. La misma tenía fecha de un mes anterior y como hemos señalado sin abogado defensor, puesto que éste es permitido solo cinco días del juicio o en su defecto, en caso que el encausado acepte firmando un documento los delitos que se le imputan, lo que implica la negación de la presunción de inocencia antes del juicio. Documento que se negó a firmar Ferrer antes y después del juicio. La sentencia del tribunal y la posterior excarcelación para cumpliera condena en el domicilio, aún no le ha sido entregada a Ferrer, con lo cual, el proceso transcurre de forma oral y sin documentos que lo respalden.
[18] Son los casos por ejemplo de la peña de escritores de Matanzas dedicada al estudio de la obra de José Martí o las reuniones del Comité Cubano para la Integración Racial (CIR) en La Habana.
[19] Reitero que no se deben considerar derechos aquellos que no pueden reivindicarse ni justiciarse en el país. Si durante las décadas de 1960 y 1970 se impuso “el realismo socialista soviético” como único referente estético para la producción cultural, en los años 90s, luego de la expulsión de los artistas y escritores contestatarios a mediados y finales de los años 80s, la creación cultural se ha vuelto “la cultura florero” para ornamentar las reaccionarias políticas del PCC. El que se salga del “guion” es brutalmente reprimido. El totalitarismo trata a sus ciudadanos como al “buen salvaje colonial”, siempre en harapos, siempre sumisos, siempre sonrientes y siempre sin derechos (Azor, 2019d).
[20] Boris Yeltsin privatizó la economía estatal permitiendo comprarla por centavos. En el caso cubano, incluso sin darle la propiedad de las empresas estatales a sus funcionarios, solo con ampliar sus márgenes de autonomía se conforma la nueva “mafia” de la nomenclatura por el contexto arbitrario y sin leyes que regulen las empresas y sobre todo por la falta de competencia con el sector no estatal de la economía asfixiada: Una economía de los “compinches”, como bien señaló el opositor Antonio Rodiles, con impuestos desmesurados para el sector no estatal de la economía y sin derechos iguales para todos los actores económicos.
[21] Ver en unpacu.org “Propuesta a la Nación cubana” 25 de mayo 2020.
Para contextualizar la crisis” En el mundo real ,en que vivimos”
Cualquier análisis serio sobre la realidad económica, social y política cubana, que mencione tangencialmente el tema del bloqueo y por tanto, dé valor menor a este ,como causal de una realidad impuesta, no deseada y catalizadora de fenómenos sui generis en la isla, debería preguntarse, si es que estar bajo tal arbitrariedad prolongada ,ilegal e inhumana, violatoria de cuanta declaración de derechos humanos se mencionen, cual único propósito manifiesto es un cambio político, a lo interno de un país soberano, sin importar las penurias que cause, no merecería la duda.
En su análisis-adose usted parcializado- parece que tal potencia militar, que no rehúsa de escrúpulos, en medio de una pandemia y crisis económica mundial sin parangón y recordándose una potencia guerrerista con engrosado curriculum intervencionista, que en su ecuestre monumento a la libertad y a la democracia, cabalgan y pesan toneladas de bombas asesinas, que recientemente le han robado la libertad a miles de niños, mujeres, viejos, hombres y a cuanto se ha interpuesto a la codicia material y geopolítica, por tal solo mencionar a Panamá, los Balcanes, Irak, Afganistán, Libia, Siria. Este prepotente gobierno enemigo, que no quiere ser amigo y de serlo condiciona tu amistad tanto en la esfera económica como politica y subvierte hasta la ultima neurona que puede,y de vez en cuando algunas brabuconas ideas vocifera para decirte aquí estoy, yo mando, que entiende que endurecer y jactarse de ello, al intentar asfixiar económicamente a todo un país, y que solo debe tener por opción dicha nación: rendirse ante la arrogancia y el desprecio del poderoso infame. De seguro contamina, todo escrutinio moral y social.
EEUU no es el Bartolomé de las Casas, ni son sus flotas, sus 800 bases militares, y sus marines, la cruz roja internacional. Ni son sus cañones Financieros inocuos. Parece que Cuba no tuviese derecho a defenderse y denunciar la ignominia !!Como si no ha de tomar medidas que no están determinada por una economía en condiciones “inusuales” este país que lucha. Es corto el análisis y siembra una idea, que profana a justicia de millones.
Cuanto pesaría en su opinión y en su ideología, rechazar la Doctrina Monroe? Las leyes H. Burton, Torricelli? La ley del comercio con el enemigo? Es acaso eso, ayuda al pueblo(no Gobierno) de Cuba? O cuerda con nudo, en cabeza rebelde? Se pregunta usted que paso en el Chile de Allende y el papel de la CIA en su economía, Pinochet y el experimento neoliberal de Friedman? Que pasa ahora en Chile? Que paso en Panamá, con el Noriega que antes comulgaba ritos” democrático” y aludiendo EEUU a la droga, Inundo con sangre inocente el Chorrillo , la verdad era, que el Canal el único “culpable” de todo, era un objetivo estratégico? Que responsabilidad tiene Milton Friedman y E Cameron en la aplicación de la doctrina de shock? Que impacto en vidas tuvieron las guerras relámpagos con causas mentirosas, que costaron miles de libertades mutiladas y engordaron supertanqueros y refinerías, así como cuentas privadas, sobre cadáveres sin derechos universales, hechos de violentos de merecida hipocresía, es la libertad selectiva ? Fue Gene Sharp un maquiavélico conspirador de intereses geopolíticos norteamericanos y son sus manuales voluntad imperial, que la CIA aplica por intereses mezquinos y no en nombre de la libertad y si en nombre del gran capital internacional ? Es Julián Assange un símbolo de la libertad de expresión y debe ser Snowden símbolo también, de la justicia y de la libertad? En que mundo vivimos? Lo sabe usted? Moro ,esta muerto. Es el mundo de la libertad secuestrada, condicionada con sangre y fuego, y desterrada al silencio de todo aquello que por nombre no tenga: capitalismo? Lo duda usted? Cuente los muertos? Numancia, Numancia que te espera si te resiste y persistes en ser libre! Mejor coloquemos nuestra estrella en ese rectángulo ya colmado de ellas!
Todo debate debería empezar allí, profundizar allí en la herida de una nación, para llegar a la verdad, sin negar los errores nuestros, pero sin dejar de ver la luz o peor, opacarla!
Un cubano, debe ser tolerante con una intención abiertamente anexionista, que esta demostrada históricamente?
Comparto, que Cuba enfrenta grandes retos a lo interno, es evidente, que hay alojadas ideas no socialistas en sectores de una parte de la sociedad, intereses validos, pero a mi parecer ,un poco individualistas e inoportunos, de una clase media que comienza a parecerse mas a un tiempo, que a veces justa y a veces no, reclama mas libertades, y no esta mal, si no confiere armas a un enemigo poderoso que no vacilara en dominar lo que cree ha de ser suyo y desaparecer para la mayoría la libertad suprema que es la soberanía nacional. Creo en la libertad, pero sin ingenuidades ni fantasías etéreas, la libertad suprema es el consenso social, y la libertad individual esta condicionada a la conciudadana. La ingenuidad o la confabulación, no deben prevalecer ni la traición, si se condicen la historia y el presente ,debe ser este, un pais que intente seguir construyendo una sociedad que imponga justicia social y la libertad como premisas concretas de la Patria, que dé igualdad de oportunidades para el desarrollo de la individualidad y de una sociedad superior, donde la solidaridad encuentre mas poder que el egoísmo, y no dependa del voluntarismo. Ideas existen, que apuestan a un cambio político, no me cabe duda. Creo que la corriente anexionista, la que nunca ha desaparecido y no lo hará por lo pronto ,pues caben miserias humanas en tantas cabezas existan cristianas o no ,todavía esa aspiración es minoritaria, y creo que hay reservas antiimperialista y patrióticas en la sociedad, que no todas arropan las ideas del socialismo, también se vislumbran la socialdemocracia y hasta ideas liberales, inducidas y promovidas, generosamente, pero reales al fin, debieran confluir todas en el interés nacional. Es una realidad que nunca es así!!. Cuba ha de estar unida(en su diversidad) si quiere prevalecer y construir genuinamente la sociedad que aspira. No es el capitalismo la solución, ni de Cuba, ni del mundo, eso debe estar claro, y no menguar ante opiniones medias! Es el socialismo el único sistema que abre la posible y verdadera justicia social. Estas hermanas la justicia social y la libertad,han de andar de manos, para no perderse. También hay deseos descontextualizados, verdades intangibles. Lo cierto es, que la sociedad es mas heterogénea en sus capas generacionales. Hay un gran peligro de fracaso, si el cambio no fluye , para el bien de todos y solo para un elite intelectual , que dígase en su fe superior, no reconocerá si no es por voluntad política, genuina del socialismo(y no del capitalismo), la imposición de la justicia social, Borrar de la faz de esta isla,sus mas sagradas conquistas sociales a nombre de académicos planteamientos neoliberales, seria retroceder como nación a la falsa democracia burguesa, donde la libertad es a punta de dólares y bayonetas; y donde la justicia social es la caridad y la lástima! Donde el poder radica en los emporios económicos , en la propiedad privada y en la concentración de la riqueza, y por tano en el poder real. Los académicos lo saben y se saben , beneficiados, la ética del privilegio manda. No es ese el país, que debería ser mas feliz y útil a un hombre.
Si mi abuela no puede comprar un medicamento del cual depende su vida, no solo es responsabilidad del país que se tiene que defender de una potencia extranjera que la ataca . MI abuela, me dice que su país esta envejecido, y eso duele. Tampoco cuesta ver el cuchillo que brilla en la oscuridad, Efialtes reniega de Esparta, porque teme.
Es el mundo, jamas nosotros. A eso se reduce ese argumento, infantil e irresponsable para justificar la incompetencia e inmovilismo de un grupito. Argumento que descubrieron el dia que ‘Mama URSS” les quito la teta.
Desde mi optica, los resultados tienden a lo negativo.
Mientras MSI asumió posiciones cuestionables mas alla de la filiacion politica, desmarcandose de cualquier intento de dialogo o reconciliacion y evidenciando nula coherencia y organicidad, muchos de quienes los apoyaban trataron sin exito de secuestrar el planton pacifico y respetuoso llevado a cabo por artistas y creadores ante el MINCULT. El diálogo que se derivo de esta segunda confrontacion se reflejó publicamente en muy escasa presencia de intelectuales reconocidos, planteamientos tibios en comparacion con las expectativas creadas -reducidos basicamente a las relaciones con los creadores- , y una continuidad del mismo supeditada a apoyar incondicionalmente las politicas dictadas por la direccion del pais.
Por su parte, el Estado se mostró chapucero y agresivo al informar y atender estas situaciones. Se comenzó por una escueta nota de prensa que trataba de zanjar el asunto clasificando a los participantes de MSI como mercenarios y delincuentes comunes. Al ver que esto no daba resultado, se trató de agregar la falta de credo artistico, empleo y poder adquisitivo como ‘justificaciones’ adicionales para su demonizacion. Finalmente, las mas o menos disimuladas acciones de intimidacion contra el grupo que habian acompañado esta primera reaccion, devinieron en una operacion policiaco-segurosa; un hibrido de equipo SWAT de bajo presupuesto y coreografiantes en batas sanitarias, que en ningun momento condujo a aplicar ninguno de los protocolos y acciones vigentes para eventos de contagio por Covid – que fue el pretexto legal esgrimido para la intervencion por la fuerza.
Mientras la mayoria negra/mestiza y socialmente vulnerable que protestaba como parte de MSI era neutralizada, los ‘miki’ – que es como se conoce en la capital a las personas blancas, de clase media a alta y habitos de vida occidentalizados- que se plantaron ante el MINCULT eran tratados con un guante mucho mas sedoso; virtualmente reducido a la presencia fisica de individuos visualmente reconocibles como lo que en la calle se llama comicamente ‘agentones’. A esta protesta le siguio su contrapartida oficialista, una llamada ‘tangana’ con pretensiones de espontaneidad a la que asistio nuestro Presidente; la cual carecio de distanciamiento social y conto con aseguramiento estatal, como evidencio la parafernalia logistica en exhibicion, incluida la presencia de omnibus con chapa oficial.
A la par de todo esto, periodicos, sitios web y blogs vomitaban articulos, posts, comentarios y reacciones atacando y defendiendo en desiguales tonos de autenticidad, objetividad, estilo y razonamiento logico. Creo que esta habra sido la leccion mas valiosa: la evidencia digital dejada por cubanos de todo tipo en cuanto a extraccion social, residencia, edad, genero, raza, nivel educacional, afiliacion ideologica y motivacion paralela.
Por otra parte, al menos en mi opinion ni el MSI logró un consenso de respaldo y apoyo, ni el 27N alcanzó a la discusion de una agenda integral, ni el Estado alcanzó aunque fuera de lejos a convencer de que quienes se le enfrentan publicamente son vendidos a terroristas pagados en Miami. En lo personal, creo que los sucesos del pasado mes llevaron la insatisfaccion popular desde el murmullo y el semi-anonimato de las redes, los pasillos, las esquinas y los hogares ala accion publica fisica y mediatica; pero no pueden catalogarse como un exito ni para los protestantes ni para el Estado cubano.
Honestamente, acerca del 27/N, creo que fue la primera protesta en la historia de la humanidad que se hace aplaudiendo…
Tablas? Y el odio, los rencores, el dinero; las redes, las fakenews, las verdades objetivas, las absolutas. Tablas?!
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