El viejo banco del parque

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Vemos a Jorge Alí por televisión en la retransmisión de su programa “Punto G”, Reinaldo Miravalles está actualmente firmando una película en Cuba. Todo eso me parece excelente pero ¿Por qué es distinto con el deporte? ¿No son cubanos también los deportistas que están fuera de Cuba?
Estoy de acuerdo con que el país tenga una política respecto al deporte pero ¿Quién la traza? ¿A quién responde? ¿Con quién cuentan?

Por: Osmany Sánchez

Cuenta la historia que en cierto lugar había durante las 24 horas del día un soldado montando guardia sobre un banquito de madera. Era una posta de 24 horas y a nadie se le había ocurrido preguntarse el porqué de esa guardia. Cuando lo hicieron descubrieron que todo empezó cuando varios años antes el banquito fue pintado de blanco y se puso la guardia para que nadie se sentara. El tiempo pasó y la guardia también.

A veces creo que en Cuba sucede así en algunos tópicos. Se mantiene una actitud, se sostiene un punto de vista, se defiende una posición sin preguntarse las razones para hacerlo. Un ejemplo de lo que digo puede ser el tema del deporte.

No es la primera ocasión que abordo este tema. He dicho y sostengo que aunque en otras esferas hemos avanzado, en este, el deporte, nos hemos quedado detenidos en el tiempo.

El deporte debe convertirse en una forma más de aportar divisas al país. Lo hacemos con los médicos, otra área sensible, otro logro de la Revolución, entonces por qué no hacerlo con el deporte. Esto lo dije en la reunión de los lineamientos y no fui el único. Creo entonces que se debe escuchar más lo que opina el pueblo sobre este tema.

He leído entrevistas de ex deportistas cubanos (Pedro Luis Lazo, Víctor Mesa, etc) que han planteado la necesidad de insertar jugadores en ligas profesionales de otros países, lo que además de aportar económicamente al país y al propio deportista, incide en su preparación pues los mantiene compitiendo a un alto nivel. No solo deportistas retirados, otros emblemáticos como Yuliesky Gourriel también han hecho declaraciones similares.

Nuestros médicos no son vendidos a hospitales privados, son parte de un convenio de colaboración donde se benefician todas las partes. Hace pocos días la televisión nacional mostró las declaraciones de un técnico de fútbol colombiano que explicaba cómo pudiera hacerse esa inserción en ligas foráneas sin perder a los jugadores.

En el periódico Granma de hoy leo que las deserciones «siempre han sido un mecanismo empleado por la CIA para difamar y denigrar al socialismo, tanto contra Cuba como otros países» bueno y seguiré siendo así, al final ese el objetivo de nuestros enemigos y no van a renunciar a ello. Ante eso, como en materia de cambio climático, tenemos solo dos opciones: Mitigación y Adaptación.

Los atletas mejores atendidos en Cuba son los peloteros que participan en la Serie Nacional de Béisbol. Se pasan varios meses viajando en buenos ómnibus, hospedándose en hoteles, buena alimentación…sí, eso está muy bien pero: ¿y la familia que dejan atrás? Al final como sucede en Matanzas, una parte de ellos deja el deporte, unos para emigrar al extranjero y otros para irse a trabajar para Varadero.

El pasado lunes, se le realizó una entrevista Eugenio George, donde en un momento se produce este intercambio:

Decenas de jugadores se han marchado en los últimos 12 años. ¿Existe la posibilidad de un reencuentro en algún momento?

Pudiera ser. Es una consideración a tener en cuenta, pero se trata de una decisión que obedece a la política del país respecto al deporte. Los voleibolistas nos abandonaron por diversas vías y razones, algunas totalmente incorrectas y faltas de principios. Pensamos que lo más importante es crear nuevos talentos y no depender de los que están fuera. Quizás un reencuentro nos beneficiara, pero debemos contar con lo nuestro, con jóvenes mejor formados que respondan a los principios del honor, la vergüenza, el amor a la bandera y el inigualable privilegio de sentirse aplaudidos por su pueblo.     

Hay una frase de esta respuesta que me pone a pensar. Dice Eugenio que esa decisión obedece a la política del país respecto al deporte. Estoy de acuerdo con que el país tenga una política respecto al deporte pero ¿Quién la traza? ¿A quién responde? ¿Con quién cuentan?

Si importantes figuras del deporte plantean que deben cambiarse cosas, si lo hace el pueblo, si el concepto de Revolución dice que debemos cambiar todo lo que debe ser cambiado. ¿A qué esperamos entonces?

El deporte es un logro de esta Revolución, pero también lo es la medicina, o la cultura y con ellos las reglas de juego son diferentes. Vemos a Jorge Alí por televisión en la retransmisión de su programa “Punto G”, Reinaldo Miravalles está actualmente firmando una película en Cuba. Todo eso me parece excelente pero ¿Por qué es distinto con el deporte? ¿No son cubanos también los deportistas que están fuera de Cuba?

No podemos esperar a que un día algunos funcionarios se miren a la cara y digan ¿eh, y por qué no hemos hecho esto?. Quizás todos asumen que este tema es tabú y que es competencia del otro. Mientras eso suceda seguirá el guardia dando vueltas alrededor del viejo banco del parque.

129 COMENTARIOS

  1. Tengo mucho trabajo y ningún tiempo disponible, pero el tema me provoca.
    Jimmy, planteas el problema como si no existiera una política delineada y pagada por los que más tienen para sacarle los deportistas a Cuba con el objetivo de desprestigiarla y lacerar el espíritu nacional.
    Caundo Víctor Mesa planteó querer jugar con Industriales la Comisión Nacional no estuvo de acuerdo y era en Cuba, pero en nuestra concepción, la cubana, no me interesa las de otras gentes, ¿cómo iban a entender los villaclareños eso? ¿No sabes que cuando Muñoz se casó en Cienfuegos y se fue a jugar por allá, los espirituanos no se lo perdonaron nunca?. Los pinareños nunca aceptaron que Omar Linares fuera el entrenador de Industriales.
    ¿Cuándo veríamos jugar a nuestros atletas en los equipos cubanos, si para que Messi jugara con Argentina en una olimpiada se formó tremendo rollo?. Te imaginas al Departamento de Estado presionando para que los equipos profesionales no dejen a sus atletas jugar con Cuba.
    Además, con relación a la recuadación de divisas, nuestra concepción sobre el deprote no ha estado basada nunca en la recaudación de dinero, porque sería más económico prescindir de las EIDE y las ESPA y los equipos nacionale que son SUPERCOSTOSOS y eso sería más económico.
    No me preocupan los que se van, me enaltecen los que se quedan con nosotros. El que se quiere ir, ese es su problema. ¿No has pensado que en Cuba viven y trabajan científicos, profesores, etc. que son «estrellas» en sus especialidades, que vivirían materialmente mucho mejor en países desarrollados (como ocurre con la mayoría de los buenos profesionales del mundo). Con la visión que tienes sobre el deporte, ¿cómo sería trasladada a la ciencia? ¿Como verías que la gente del CIGB o del Centro de Inmunoensayo, en lugar de estar aquí buscando vacunas y medicinas que pueden ser aplicadas a tu hijo o a los demás cubanos, trabajara en transnacionales que despue´s venden las medicinas a precios prohibitivos para las grandes mayorías?
    En la misma Universidad, ¿ crees que Carlos Echevarría, Juana Zoila, la gente del Centro de Energía, la de los Probióticos, etc. debían traajar para los que más le pagan y no para la sociedad que los formó?
    Jimmy, los grandes problemas de la Humanidad ( de todo tipo), los han resuelto personas que no han tenido en cuenta el dinero como lo primario. el problema está en ¿qué es lo primario, el ser o el tener?

    • @Jesús López Martínez
      Creo que no estamos hablando de lo mismo, cuando se habla de deportistas de élite, de artistas, de científic@s, médic@os, enfermer@s , académic@s, investigador@s. Sin tener las ideas muy claras, ahí hay tres situaciones bien distintas. Por un lado los primeros, personas de pocos años en plenitud de condiciones, carreras deportivas cortas por lo general, frente a los demás que tiene muchos años de ejercicio profesional por delante tanto sean artistas como no lo sean.
      Lo que aporta Tatu es que se abra la posibilidad de que los deportistas en su mejor momento o antes, cuando se observa que pueden tener una gran proyección, puedan elegir entre quedarse en el deporte cubano o integrarse en el deporte de otro país. Eso es lo normal es todo el mundo, menos en pocos sitios. Esa anormalidad no tiene sentido. Así de sencillo.
      Tatu plantea que se pueda elegir (no creo que me esté confundiendo) y quien vea promoción personal estrictamente deportiva o sencillamente económica, opte por lo que crea más conveniente. Si opta por jugar a balonmano en España, que pueda representar a Cuba cuando toque y no tener que «hacerse español como Rolando Uríos. Messi es argentino y hace muy bien en no «pasar por el aro» de la nacionalización. Messi tiene que estar en esa «cosa» que es el juego del Barça (algo así como el Circo del Sol pero siempre con balones) y también tiene que estar jugando a fútbol con Argentina.
      ¿Supondría eso que la pelota cubana perdería calidad? Muy posiblemente, pero de qué ¿hablamos de deporte o de espectáculo?
      Quien vive unos colores, un club, una afición, se queda. Quien opta por otras cosas, se marcha, pero debe poder volver a vestir los colores de Cuba.
      Es mi opinión.

    • Jesu pienso igual que tú en la mayoría de las cosas que dices pero debe ser porque no sé explicar bien lo que propongo que no me entiendes.

      No hablo de poner el dinero por encima de todas las cosas, sabes que no pienso así.

      Creo y sostengo que el deporte se debe convertir en una fuente de ingresos para este país. Eso mejoraría el nivel de vida de los atletas a partir de su aporte como queremos que sea en Cuba y los mantendría en forma.

      Si lees los comentarios de este post te darás cuenta de que para esta gente nada está bien, hagas lo que hagas siempre te van a criticar por eso no se les debe tener en cuenta, al final lo único que quieren es jodernos y para eso acuden a la manipulación y a las mentiras como siempre.

      Mencionas el caso de Messi pero no es lo que propongo. Hablo de insertar jugadores en ligas profesionales por ejemplo el voleibol en Russia. Con una cláusula de que los atletas representarían a Cuba en las principales competencias. Estoy seguro de que muchos clubes no se opondrían a eso.

      Se han hecho concesiones en áreas mucho más delicadas en esa como el tema de la propiedad por ejemplo, por qué seguir entonces seguir aferrados en el tema del deporte?
      Saludos y nos vemos por ahi ja ja ja

  2. No es lo mismo la situación de los deportistas que la de otros sectores.
    A su vez, dentro del deporte, las situaciones son muy distintas y las soluciones a los problemas muy variadas. En países como España, también hay una ambigüedad en muchas áreas. Mientras en fútbol, baloncesto,tenis, ciclismo, etc hay deporte profesional en otros deportes siguen teniendo la consideración de aficionados, con más o menos ayudas. En atletismo por ejemplo sin PLAN ADO no hay medallas; sin los centros estatales de Alto Rendimiento, no hay medallas. Por lo tanto el tema en ese sentido es igual que en Cuba. Alguien paga para que se obtengan resultados a nivel de «medallas»: en España, los patrocinadores privados y el estado y en Cuba, sólo el estado.
    ¿Futuro? Dado que no tiene nada que ver el modelo español y el modelo cubano, cada contexto sabrá qué hacer ante la realidad de hoy: el deporte de alto nivel es un mercado en el que funciona la oferta y la demanda, pero como medio de pago está el dinero y poco más.
    ¿Cuba puede mantener la utopía del deporte no profesional? Depende de quien «mande» y de cómo se vivan las cosas. En un modelos «capitalista» por supuesto que no. En un modelo socialista, supongo que sí.
    ¿Se vivió con pasión la reciente fase final de pelota dentro de Cuba?
    Creo que sí. Eso es deporte.
    ¿Se disfruta viendo como la liga de fútbol profesional en España es «cosa de dos», Madrid y Barcelona, debido a que influye de forma decisiva los presupuestos para poder comprar a los mejores, aunque sean todos de Laponia? Creo que sí. Eso es espectáculo que vale una pasta gansa y gracias al dinero de las televisiones no vale ir a ver un partido el sueldo de un mes (en la reventa sí). Claro que esa financiación de las televisiones obliga a jugar los partidos de 10 a 12 de la noche, a 4 grados de temperatura ambiente muchos días.

  3. Esta gente de verdad que son increíbles, a veces me pregunto para qué pierdo el tiempo comentando aquí con un grupo de sordos que solo escuchan lo que quieren oir.

    mira la cantidad de calificativos que me ganado solamente por decir lo que pienso…qué barbaridad y critican al gobierno cubano.

    NO pierdo más el tiempo por ahora, tengo cosas que hacer ahora, solo lanzo un reto.

    Algunos encabezados por Kalida han repetido varias veces que yo llamo traidores a todo el que se vaya del país. No repito lo que he explicado antes. Si alguien me pega aquí la parte donde lo dije pues les doy la razón pero si no lo pueden poner entonces son unos chismosos y unos mentirosos, lo que me demuestra una vez más que para algunos la libertad de expresión consiste en poder mentir y difamar todo lo que uno quiera.

    De veras quie siento lástima con ustedes, debe ser triste tener que inventar cosas por falta de argumentos.
    saludos

  4. Luego de contarnos la fábula del guardia inútil o de la inútil guardia, Tatú, nos dice que: «A veces creo que en Cuba sucede así en algunos tópicos. Se mantiene una actitud, se sostiene un punto de vista, se defiende una posición sin preguntarse las razones para hacerlo. Un ejemplo de lo que digo puede ser el tema del deporte.»

    Tatú, debo retificarle, a la actitud, el punto de vista, la posición y las razones que usted se refiere, o sea, las relacionadas con la política deportiva cubana han sido sobradamente explicadas a lo largo de más de 50 años y de múltiples maneras; vistos muy sintéticamente, los argumentos van, desde los principios básicos que rigen la actividad en el país hasta los resultados obtenidos a partir de la aplicación de tales principios o normas.

    Es sabido que la estrategia de desarrollo del deporte en Cuba apunta hacia la masividad como medio de educación, salud y recreación; y por tanto medio para influir en la formación integral de niños, adolescentes y jóvenes, y mejorar la calidad de vida de los cubanos de todas las edades. El principal objetivo de esta estrategia es generalizar el deporte en Cuba y ponerlo al alcance de todos.

    Entendido ese punto esencial, se debe reconocer que el desarrollo del movimiento deportivo cubano y los magníficos resultados obtenidos en competencias nacionales e internacionales son precisamente consecuencia de la mencionada estrategia,o sea, de la masividad de la actividad deportiva. En pocas palabras, esa línea establecida por la Revolución, es la que ha puesto en el mapa del mundo la actividad deportiva en nuestro país tanto en el deporte para todo el pueblo, como en el deporte de alto rendimiento. Por tanto, es simplista y sin fundamento su primera afirmación. Como usted puede ver la actitud que se mantiene, el punto de vista sostenido y la posición que se difiende se hace, a partir de razones claras y demostradas en la práctica. Otra cosa bien distinta es que usted las olvide o ignore.

    Más adelante, el autor del post, nos advierte con vehemencia que: «He dicho y sostengo que aunque en otras esferas hemos avanzado, en este, el deporte, nos hemos quedado detenidos en el tiempo.»

    No le falta algo de razón, pero sucede que debe aclarar, si se refiere a toda la actividad deportiva nacional o únicamente al llamado deporte de alto rendimiento; por los argumentos y razonamientos que hace posteriormente, se aprecia que se trata del segundo caso. Entonces, para hablar con propiedad, se trata de la paralización en el tiempo del deporte cubano de alta competición, y no de la actividad deportiva en general.

    A seguidas, el articulista expone el verdadero móvil de las afirmaciones hechas anteriormente: «El deporte (de alto rendimiento, agrego yo) debe convertirse en una forma más de aportar divisas al país. Lo hacemos con los médicos, otra área sensible, otro logro de la Revolución, entonces por qué no hacerlo con el deporte.»

    A este reclamo, en apariencia noble y justificado, por cuanto Cuba necesita del aporte económico generado desde cualquier área, pone en evidencia, además de la propia estrategia deportiva nacional, otro principio enarbolado por el movimiento deportivo isleño, el amateurismo. Si las razones que expone el autor para dar tal paso son de esta índole, se le debe advertir que pasa por alto nuevamente otra cuestión fundamental, se trata de insertar deportistas amateurs en el deporte porfesional y la pregunta se impone: ¿cómo lograría el autor sortear las estructuras derivadas del carácter mercantil del espectáculo profesional y de los mecanismos de su organización, y esencial comercialismo y explotación del profesionalismo sin renunciar al amateurismo?, ¿sobre qué bases supone que esto es posible?.

    De estas preguntas se desprende que el autor ignora o no incluye otro aspecto muy relevante para el análisis del tema, o sea, el contexto deportivo mundial, en el cual impera el deporte rentado encadenado a la comercialización, por la vía de la publicidad -las promociones de marcas y productos-, los grandes espectáculos y su producción para la televisión y el vídeo, o sea, un mercado donde impera como reglas el valor de cambio, el dinero. El autor, por ende, no considera que sería imposible insertarse, siquiera insertarse en ese contexto y sobrevivir sin renunciar al deporte amateur. Si sus sugerencias van encaminadas en ese sentido, le pregunto entonces, ¿es esa la única solución que permitirá a nuestro deporte de alto rendimiento seguir adelante y obtener nuevos éxitios en la arena nacional e internacional?, ¿cambiariamos el deporte amateur por unos cuantos millones de dólares?, ¿renunciaremos al principio del deporte aficionado por más medallas? Ahora le recuerdo que de la respuesta a estas preguntas pende el futuro de todo el movimiento deportivo cubano que incluye también el deporte masivo y popular, o es que, ¿también tendremos que sustentar a este con las reglas del mercado?.

    • Tirón de orejas para Tatu, que no se deje arrastrar por los «cantos de sirena» del capitalismo. No debes olvidar que es mejor es tener medallas olímpicas que comer todos los días, porque las medallas son para el orgullo de nuestros dirigentes y la comida… ellos no tiene problemas de comida. Además, mas hambre se pasa en Haití y nosotros tenemos mas medallas que la capitalista Dinamarca, eso es lo importante.

  5. Quisiera saber si un atleta de la EIDE de voleibol ya pertenece a la federación de cuba , aunque halla participado solo en eventos escolares .

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