«Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí». Solo siete palabras bastaron a Augusto Monterroso para articular este relato que destaca tanto por su laconismo como por su significación. El micro cuento del escritor guatemalteco ha tenido, a lo largo de la historia, numerosas lecturas. Ahí probablemente radique su fuerza, en que sea el lector quien determine las múltiples aristas del escueto relato, y ofrezca, según su percepción o interés, un significado del mismo.
Recuerdo haber descubierto El dinosaurio cuando era un estudiante universitario. En una feria del libro, caminaba junto a un socio, recuerdo que hablábamos de filosofía, revoluciones, marxismo —conversaciones típicas de dos estudiantes de Historia— y nos cortó el paso un grupo de muchachos —estudiantes de Periodismo o Comunicación, según dijeron—, que filmaban una especie de corto documental sobre el cuento en cuestión y el significado que para los entrevistados tenía.
Habiendo escuchado nuestra conversación, el grupo que desarrollaba un proyecto de investigación, evidentemente quería una lectura política de aquella escueta historia. Sería oro, más en un país tan cerrado a la crítica como el nuestro, en el que esta clase de materiales resultan piezas de arte aunque poco transmitan realmente.
En aquella época yo no pensaba como ahora —bendita sea la dialéctica—, era un muchacho de provincia, de poco mundo y escaso contacto con la realidad. Nublado por el dogmatismo y la visión acrítica que tenía del proceso cubano, decliné dar respuesta a la interrogante: ¿qué representa para ti ese dinosaurio? Aquel momento, sin embargo, me ha perseguido toda una vida.
Unos años después, graduado e impartiendo Historia de Cuba, recurrí al micro relato de Monterroso. Formulé a mis estudiantes la misma pregunta que años atrás había declinado contestar. Las lecturas al mismo, en muchos casos, fueron sorprendentes, pero un elemento común las unía a todas, o a la gran mayoría: el matiz político. Para casi la totalidad de los estudiantes que se motivaron a interpretar la sintética línea, el dinosaurio representaba lo negativo de la sociedad: la burocracia, la corrupción, el egoísmo, etc.; y es lógico, más si se tiene en cuenta la enorme carga política que estos años han tenido para la sociedad cubana.

Jóvenes alfabetizadores cubanos en la Plaza de la Revolución, La Habana, 1961. (Foto: Telesur)
Por estas semanas de asfixiante calor, altas transmisiones de dengue y constantes cortes eléctricos, me vino a la mente el cuento del dinosaurio. Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí. Dándole vueltas a las siete palabras, y cuarenta y una letras que lo componen, no puede evitar pensar en esta Isla, y en las múltiples generaciones que la habitan. Los apagones ayudaron a esas reflexiones, el tiempo muerto y la calma que conllevan, son propicios para la introspección o los debates en la casa, el barrio, o a través de las redes. Sin dar más vueltas, me explico.
Mis padres nacieron en el tercer año de las décadas del sesenta y setenta. La Cuba en que ambos vieron la luz tenía muy fresco en la memoria el recuerdo de la situación anterior al triunfo revolucionario: la amplia desigualdad, la pobreza extrema en las zonas rurales, la corrupción de las administraciones, el terror batistiano, etc.
Igualmente, aquella nación guardaba una vívida imagen de la lucha insurreccional, había coexistido con la alfabetización, Girón, la Crisis de Octubre, los constantes atentados y ataques terroristas estadounidenses, los movimientos de liberación nacional en el mundo, el enorme programa social de la Revolución. Frutos de ese nuevo país que intentaba erigirse, mis padres fueron partícipes del desarrollo de un proceso que parecía indetenible.
Cuando ellos eran jóvenes sobrevinieron los ochenta, la época dorada de la Cuba post 1959, la década en que la población, gracias en buena medida a la ayuda soviética, mejoró ostensiblemente su nivel de vida. Vivieron aquella época dorada pensando seguramente que los años de estoicismo irían siendo, de forma gradual, algo del pasado, un recuerdo vago.
Apenas puedo suponer lo que para ellos y millones de cubanas y cubanos representó aquel discurso de Fidel en Camagüey, durante un acto conmemorativo por el 26 de julio, en el que advertía sobre la posibilidad de la desintegración de la URSS y el campo socialista. Ninguno imaginaba que, tan solo dos años más tarde, Cuba recibiría la noticia de la desintegración del coloso de Europa del Este, y que los duros años iniciales serían nada frente a la austeridad que se impuso en los noventa.
El llamado Período Especial, representó no solo el colapso de la economía cubana y la quiebra de los felices ochenta; significó asimismo el fracaso de un modelo de socialismo identificado con la perfección, con una especie de entelequia. El referente ideológico había fracasado, desaparecido estrepitosamente, el socialismo cubano, de cierta forma, quedaba huérfano.
La difícil década supondría también un resquebrajamiento progresivo de varios de los indicadores de los cuales Cuba tanto se había vanagloriado en decenios anteriores; comenzaría a re-emerger la prostitución —nunca suprimida totalmente—, aumentaban el consumo de drogas, las actividades delictivas, la marginalidad, la pobreza; las brechas sociales, reducidas a diferencias insignificantes, se ensancharían abruptamente.
Todas estas y otras cuestiones asociadas al colapso del modelo, influirían lógicamente en la conciencia de millones de cubanas y cubanos y moldearían, en una Cuba muy distinta a la de sus predecesores, a las nuevas generaciones.
Los hijos del Período Especial, los que vinimos hacia el final relativo del mismo, así como los nacidos en el siglo XXI, somos gente desarraigada. Nuestros padres, aunque carguen con la contradicción de haber vivido dos Cubas diametralmente opuestas, poseen quizás mayor esperanza en la mejoría de la situación del país; nosotros, sin embargo, nacimos desanimados, nuestra memoria colectiva es huérfana de tiempos felices.
Nos queda solo el recuerdo transmitido por los viejos, las vivencias y experiencias que parecen lejanas y resultan, en no pocas ocasiones, meras idealizaciones. Nacimos y vivimos en un país carente de épica. Nacimos y vivimos en una nación con cada vez más amplias diferencias sociales, donde se erigen una vez más fastuosas casas frente a pírricas estructuras; en la Isla donde el salario languidece y amenaza con extinguirse sin rebasar la mitad del mes; en la Cuba de una escueta libreta de abastecimiento; de anaqueles desiertos la mayor parte del tiempo; de la descarnada oferta y demanda, de la corrupción y el egoísmo.
Nacimos y vivimos en la Cuba del Fidel en chándal, sin discursos vibrantes y largas y magnéticas disertaciones, en la época del discurso leído; somos hijos del triunfalismo, las consignas, la fraseología y los planes incumplidos; nacimos y vivimos en una Isla que ve partir a sus hijos, donde el sueño se reduce a surcar el mar, el aire, la selva o el río.
Para nosotros, los noventa eran historias de terror, la certeza de cuán peor podíamos estar. Pocos creímos que viviríamos de primera mano una especie de secuela de aquellos tiempos de apagones y escaseces extremas. Por estos días, en que la migración se ha disparado, en que las divisas campean y reducen a la insignificancia al peso cubano, en que los precios se desorbitan, en que el desabastecimiento agolpa la existencia y los cortes eléctricos minan la estabilidad emocional de cualquiera; los hijos del Período Especial, y de lo que vino después, estamos inmersos en una especie de crisis existencial colectiva.
La eterna espera y la desesperanza son el sino aparente de esta generación desarraigada, y ahí, precisamente, creo que está nuestro dinosaurio, en esa certeza y en la incertidumbre del futuro.
Uno más dentro de esta generación desarraigada.
51 comentarios
“Mis padres nacieron en el tercer año de las décadas del sesenta y setenta. La Cuba en que ambos vieron la luz tenía muy fresco en la memoria el recuerdo de la situación anterior al triunfo revolucionario: la amplia desigualdad, la pobreza extrema en las zonas rurales, la corrupción de las administraciones, el terror batistiano, etc” Si los padres nacieron en los 60,70 lo anterior, que copio del articulo, no es mas que las doctrinas que recibieron en la escuela, cosa que se hizo ya desde los tempranos años del proceso.Ellos no vivieron eso, no habian nacido, por tanto en la memoria solo pueden haber tenido la historia tergivesada de los libros adoctrinadores y la libreta de ropa, todo un “logro” en aquel tiempo, mas la sempiterna de “abastecimiento”Amplia desigualdad y pobreza extrema es la que produce este arcaico sistema, que paradojicamente vive o esta pretendiendo hacerlo, de las maravillas que se construyeron en esa etapa que tanto criticaron, incapaces totalmente de hacer algo nuevo que valga la pena. Como profesor de historia no deberia afirmar algo asi, mucho menos enseñarlo.
Iba a comentar sobre lo mismo, pero lei el comentario anterior (lisadelalisa) y casi no lo hago ya que es muy explicito y claro…….
“la amplia desigualdad, la pobreza extrema en las zonas rurales, la corrupción de las administraciones, el terror batistiano, etc”.
La vida en el campo siempre es diferente. Un campesino en ninguna epoca o pais, vestira como un simple empleado de un ministerio y eso no quiere decir que viva mal por eso, ahora bien, si se habla de desigualdad entre las zonas rurales y urbanas, en Cuba, es porque en las zonas urbanas la vida era buena en general a diferencia del campo.
Ahora en cuba la diferencia es la misma solo que la vida en el campo se ha hecho peor o simplemente ha desaparecido y en las ciudades se vive realmente mal, mucho mas mal que cuando llego esta fallida ideologia..
Siento que los nacidos en los 60 le fallamos a nuestros hijos, teniendo el conocimiento suficiente y la preparación necesaria les hemos entregado un país en ruinas, podemos buscar mil justificaciones, culpar a quien se nos ocurra pero era nuestra responsabilidad haberles dejado un mejor país, deuda imperdonable e imposible de reparar ahora que le pasamos a ellos una carga que fuimos incapaces de llevar.
La generación que nació en los ’60 y ’70 no podía hacer otra cosa. No teníamos “información”. Nos tragamos la historia oficial como nos la contaron. Fuimos la generación acrítica, psicologicamente avasallada por la predecesora.Ahora es muy fácil opinar.
Si, y no olviden a los chivatos, las cárceles, los fusilamientos y las cantidades de armas y pertrechos regaladas por la URSS.
Exacto. Si hay que poner un culpable, serían los nacidos en los 30, 40. Jóvenes ciegos entusiastas que apuntalaron el proceso con su fanatismo, en un grado tal que aún lo estamos sufriendo. Sus hijos nacidos en los 60 y 70 ya lo cogieron hecho. No conocieron otra cosa y no es hasta los finales de los 80 que empezaron a abrir los ojos.
Aquí o todos somos culpables o nadie es culpable. Otros tendrán que echarle la culpa a Cristóbal Colón. Por favor…
Yo no creo que esto se trate de buscar culpables, sino de buscar soluciones.
No creo que los causantes del problema tenga la solución , porque hasta las cuantas van a seguir experimentando.
Me llama la atención unas palabras del artículo, que casualmente también llamaron la atención de LISADELALISA:
“ La Cuba en que ambos vieron la luz tenía muy fresco en la memoria el recuerdo de la situación anterior al triunfo revolucionario: la amplia desigualdad, la pobreza extrema en las zonas rurales, la corrupción de las administraciones, el terror batistiano, etc.”
Porque me pregunté: y cuál es la diferencia, en el nombre del que reprime?, en que la pobreza y extrema pobreza también está extenduda en las ciudades?
Recuerdo perfectamente ese discurso del 26 de Julio, estudie en la URSS, y desde que llegue mil preguntas y muchas contradicciones.
Miles de sucesos que no entendía porque se nos habían ocultado. Eso lo supe muchos años después.
Me pregunto si esa premonición del desmoronamiento del llamado Campo Socialista no sería porque no disponíamos de información, solo las que decidían darnos a cucharadas y en determinados momentos, pero que los hechos se sabían.
Yo nací en 1954 y antes no pensaba así, pero también digo: bendita sea la dialéctica !!!
Y repito, ni se trata de buscar culpables, si conocer los errores para encontrar soluciones.
Gracias por el texto!!!
Pues que no suceda que los nacidos en el 2000 le fallen a sus hijos.
Ese canto a la felicidad que te cantaron a ti no lo vi yo por parte alguna.
Lo que había en los 70s y 80s era comida para 18 días del mes y el “hay pero no te toca” y el “no hay ni te toca”. Nuestro genio buscando guerras santas para enviarnos y la gente inocentemente llendo, pues creían que la guerra era otra cosa.
Mi interpretacion :para los cubanos,sigue estando el Dinosaurio presente.El Dinosauro : la revolucion socialista,esa que nadie quiso y se la impusieron,esa que aun viendo la debacle,hace decir disparates a un Profesor de Historia,hecho bajo el dominio del dinosaurio…muy dificil sacarse el dinosaurio para los cubanos,ese poder inmenso y retrogrado…..Los cubanos querian ,como todos los pueblos ,mejorar su situacion,no querian una “revolucion socialista” y como alguien dijo,esa revolucion no ha podido hacer algo parecido a la cuba republicana.La joven republica que partio de -0 en una epoca muy distinta en cuanto a avances tecnicos cientificos y dejo un legado que ha perdurado.El nuestro dinosaurio es duro de pelar,tan duro que impde a un pueblo azotado por las 7 plagas,despertar y comenzar un dia sin tener ese Dinosaurio dominando todo el espacio.Solo ver esas loas a “los dorados 80” da escalofrio…de verdad que ese era el Paradigma de alguien ??
“La eterna espera y la desesperanza son el sino aparente de esta generación desarraigada, y ahí, precisamente, creo que está nuestro dinosaurio, en esa certeza y en la incertidumbre del futuro.”
xxxx
El dinosaurio está en resignarse, en aguantar bajando la cabeza, en seguir viendo cómo un grupito de poder continúa hundiendo nuestro país sin que hagamos algo definitivo para salir de la dictadura comunista que nos ahoga.
El dinosaurio está en seguir posponiendo el momento de iniciar una carga para matar bribones.
De verdad ustedes creen que éramos felices en los años 80 ? Bueno todo depende del cristal con que se mire.
Puede que existan algunas discrepancias y hasta dudas, pero comparado con el actual régimen, cualquier tiempo pasado fue mejor. Se los dice alguien que no nació con la revolución, pese a todo lo malo que han escrito de esos gobiernos. Todo lo demás es harto conocido.
Cuando me despierto cada trece de agosto y me meto a leer Cubafebate, exclamo:
¡Oh! , el dinosaurio todavía esta allí
Varela es un jodedor que a veces atina en la diana
Trump no se cuela en el negocio del casino para premiar a Atlantic City. tampoco levanta torre en Manhattan para hacer el islote mas habitable. no agarra el Miss Universo porque admira belleza.
¿Se creen que abre universidad para educar la cabeza de un guanajo?
Encuentro muchos jóvenes de su generación que se sienten como Usted, pero como soy de la generación de sus padres, también me encuentro a muchos así. Hay que encontrar la solución, pero no es mediante la guerra y la confrontación radical. Tiene que haber fuerzas internas dispuestas a cambiar todo lo que deba ser cambiado sin perder lo logrado en esa historia maravillosa que fue la transformación revolucionaria de la sociedad anterior a 1959. Hoy muchos no la recuerdan y quieren creer cuentos de hadas sobre el pasado. Para una mayoría de cubanas, cubanos y cubanes que vivieron en esos tiempos, la Cuba pre 1959 era un infierno. No podemos volver a eso.
Juzgo, por el apellido que utiliza para participar en este foro, que se pueda tratar de Carlos Alzugaray, quizás. De ser así, y de antemano; profesor, resulta un placer que haya leído el texto y exprese su opinión sobre el mismo.
Como dice, el texto que publica La Joven Cuba es una opinión personal, una forma de entender la realidad actual de estas generaciones nacidas en los últimos treinta años, compartida, diría yo, por otros dentro de estas tres últimas décadas.
Comparto con usted lo que expresa sobre la necesidad de rescatar a la propia Revolución cubana, y lo más avanzado del proyecto de nación que surgió de la misma. A la Cuba de mis abuelos, no quiero volver.
Sr Alzugaray
Me gustaría saber cual cuento de hadas se le puede hacer hoy a un hijo , a un nieto , a un jubilado , a un cubano del campo o la ciudad que no ha querido dejarse caer en la deshonra y la corrupción , en el silencio y en la defensa de tanta mentira y abuso ?
Si puede hacer ese cuento se lo agradezco de antemano
Porque lo que ha sido siempre una tortura para vivir sin sosobra , ahora es un crimen o un cuento de terror
Nunca pagaron salarios decentes, nunca se pudo viajar , nunca fue fácil comprar y menos elegir un juguete para nuestros hijos , o Ud cómo viajaba y era diplomático no se enteró
Hsy cubanos que ni siquiera han bajado de las montañas y todavía viven en casas con piso de tierra , din agua , sin electricidad y otros que viviendo un poco mejor jamás han podido ir de vacaciones ni a la playa más cercana de su habitad
Nací en el segundo año de la década de los 60 así que soy de la generación de sus padres y parte de esa historia de los que no hicimos la revolución, poco participamos tampoco en intentar modificarla por muy diversas razones, pero si hemos vivido todo el desencanto, así que nos tocó vivir desde los juguetes por llamada telefónica hasta aquella estafa colectiva del oro y la plata, o aquella muy extraña reaparición de familiares innombrables que un día habían partido hacia la otra orilla y que de pronto nos llevaron a comprar en tiendas muy bien surtidas con su dinero del enemigo allá por los 80, vivimos ese tránsito del capitalismo y almacenes llenos de una revolución “verde como las palmas” que en solo 10 años termino hundiéndose bajo la egida del bloque comunista y aquella gloriosa Unión Soviética a la que le salimos tan cara, de niños y sin conciencia alguna vimos imponiéndose un sistema de control total en manos de una sola persona que era la que tenía la razón y demandaba obediencia que muy pocos rebatimos por aquel entonces, nos ofrecieron un futuro cancelándonos el presente, el futuro nunca llego pero muchos seguimos creyéndonos la historia y fíjese que me incluyo. Los 80 más que abundancia fue reflejo de una alianza excesivamente ventajosa para esa isla del caribe que derrocho millones y nunca logro hacer bases económicas, el voluntarismo y los continuos errores estratégicos económicos dilapidaron el momento, siempre he dicho que la historia de la revolución cubana bien podría ser contada en base a la libreta de racionamiento, nunca desapareció aunque en los mediados de los 80 muy poco representaba, a decir verdad muy pocos vimos o vieron la posibilidad real que toda aquella espuma se desmerengara, no existía información tampoco, y ese colapso a todos los niveles que en solo unos pocos meses tuvimos que sobrevivir, fue inolvidable y a la vez aleccionador para los que ya habíamos tenido nuestros primeros encontronazos con la “dictadura del proletariado” ya desde aquellos momentos sin proletarios en el poder, entonces el giro de la sobrevivencia del régimen fue primero coquetear y después enfocar su estrategia en solidificar ese capitalismo monopolista de estado con ellos en el poder que perdura en el tiempo, mis hijos nacieron en esa generación desarraigada de los 90 del maestro emergente y esa crisis sistémica que aún perdura, pero los arrastre a la emigración hace casi 20 años.
A diferencia suya y quizás mirándolo desde la tranquilidad del que está fuera de esta nueva “secuela de aquellos tiempos de apagones y escaseces extremas” pienso que el sistema esta definitivamente agotado, la falta de liderazgo y resultados han ido condenando esta administración de “la continuidad” a ya ni ofrecer futuro creíble a la inmensa mayoría del pueblo que simplemente sobrevive les es posible, el mayor plebiscito de la historia es la tasa migratoria de este último año que va desangrando el país, mi mayor incertidumbre no esta en que el sistema ha de cambiar, esa lo veo cada día más claro, en cambio el cómo lograr que cambie sin que se salga de ciertos limites de civilidad y cordura para poder lograr encaminar una sociedad profundamente resquebrajada y polarizada en que se cumpla esa predica martiana de “Con todos y para el bien de todos” si me resulta preocupante.
Tengas todos un buen fin de semana.
Fidel en su larga vida se hizo notar por la mayoría de los humanos, conocen su nombre y reconocen su imagen, fue paladín y guía de juventudes en todo el mundo. Hace ya 6 años que murió, ocurrió el 25 de noviembre de 2016, tenía 90 años, Fidel ya no podrá cumplir 91; es válido para el que lo desee celebrar un aniversario más de su natalicio, pero no, la prensa insiste en celebrar su cumpleaños, los religiosos en consultas espirituales le piden consejo, muchos vieron su silueta en el humo del incendio en Matanzas. Espeluznante.
Fidel está muerto, mi madre también, soy producto de la crianza que mi madre me dio, el pueblo de Cuba es producto de la presencia de Fidel por largos años en la dirección del país. No tiene que haber ruptura, como tampoco tiene que haber continuidad, los tiempos han cambiado, el mundo es otro, los gobernantes y sus discursos tienen que ser otros, las expectativas de los cubanos es otra, no podemos seguir viviendo de promesas después que tantas se han incumplido.
Aunque despertemos y veamos que el dinosaurio sigue ahí, realmente no es el mismo, es otro. El dinosaurio podría creer que los humanos somos los mismos, no es cierto.
El artículo es interesante, da una muestra del sentir de aquel ciudadano cubano nacido en los últimos 30 años.
Pero me he partido de risa con lo del Sr Manuel Figueredo: este hombre ha recibido una bofetada en la cara, le han llamado responsable de lo que pasa hoy y se ha enfadado!!!. este señor que fue seguramente todo un revolucionario en sus tiempos estudiantiles, ahora culpa a los jóvenes por no haberse lanzado a la calle de nuevo para derrocar al Sr Canel. Y como no puede defenderse de la bofetada pues le echas la culpa a Cristóbal Colón. Ahorita Su Figueredo usted se convierte en un anticolonialista también, o ¿acaso cree que el colonialismo no ha tenido culpa alguna en lo que ha sucedido mundialmente en los últimos 500 años?
El artículo es interesante, da una muestra del sentir de aquel ciudadano cubano nacido en los últimos 30 años.
Pero me he partido de risa con lo del Sr Manuel Figueredo: este hombre ha recibido una bofetada en la cara, le han llamado responsable de lo que pasa hoy y se ha enfadado!!!. este señor que fue seguramente todo un revolucionario en sus tiempos estudiantiles, ahora culpa a los jóvenes por no haberse lanzado a la calle de nuevo para derrocar al Sr Canel. Y como no puede defenderse de la bofetada pues le echas la culpa a Cristóbal Colón. Ahorita Su Figueredo usted se convierte en un anticolonialista también, o ¿acaso cree que el colonialismo no ha tenido culpa alguna en lo que ha sucedido mundialmente en los últimos 500 años?.
Sr. Izquierdo todos sabemos cuál es la misión que le han encomendado aquí en LJC: dividir, amenazar y tratar de crear el caos.No se preocupe que nunca saldrá triunfante. Me extraña que usted siendo tan ” inteligente, perspicaz e historiador ” no se percate del mensaje de hoy. A dónde nos quiere llevar Don Ramón ?
No muerda el cebo de la ciberclaria, es lo que busca con su trolleo en este blog.
Estimado MANUEL FIGUEREDO
Decía Gloria Álvarez en una de sus encomiables conferencias que a Japón hace 50 años le cayeron no una si no 2 bombas nucleares y en lugar de estar chillando por esa situación , hoy son la tercera potencia mundial.Los politiqueros latinoamericanos justifican su incompetencia diciendo que por lo que le pasó hace 500 años seguimos cómo estamos hoy !!!
Entonces cuando le hablen de esclavos , esclavitud y subdesarrollo y no mencionen corruptos y sistemas fallidos tiene una corta moraleja para responder
Un abrazo fraternal
Una pregunta al articulista:
¿Y usted que Historia enseña?
Gracias.
En cuba la sociedad no ha cambiado nada. Que las armas no esten disparando en algun momento no significa que no puedan volver a hacerlo cuando necesiten reprimir a la gente o simplemente cuando se les disminuyan un poco las sanciones y vuelvan a sus periodos grises y negros…
Cuando necesiten expulsar estudiantes nuevamente mediante calumnias y falsos preceptos, lo haran de nuevo como cuando se revivieron los mitines de repudio cuando se pensaba que eso era cosa de un obscuro pasado.
De la misma forma en que no desapareceran de la faz de la Tierra las ideas del nazi-facismo mientras existan partidarios de Hitler o idiotas que se tatuen swasticas, no se podra llegar a la Libretad y la Igualdad en cuba mientras no escupamos todos la imagen de fidel castro y lo saquemos de nuestra existencia para ponerlo en el hoyo al que pertenece..
En Pastelillo la noche se puso fea.
Las avispas y la policía son fuerzas entrenadas para someter a individuos, aprenden en que parte del cuerpo asestar golpes para que duelan al máximo y no mate, conocen de defensa personal y con facilidad derriban al oponente, portan armas.
En Pastelillo parte de la población salió a manifestarse en protesta por los apagones, los que salen saben que se exponen a recibir golpes y años de cárcel, así y todo lo hacen. Van desarmados.
Las fuerzas del orden represora de los manifestantes, saben a lo que van, así y todo lo hacen
Cada vez que salga una nueva manifestación lo hará preparada para defenderse, primero serán piedras y palos, mas adelantes quemaran llantas y harán barricadas. La violencia genera violencia, es de esperar la pérdida de vidas. ¿ Es posible evitar llegar a esos extremos? .¿ Hay conciencia que en un futuro alguien tendrá que responder?.
Ramón, usted ni sabe interpretar lo que lee. Echarle la culpa a Cristóbal Colon (cosa que no hizo Manuel Figueredo) estaría muy en correspondencia con lo de echarle la culpa al bloqueo de todos los males.
No puedo ni imaginarme lo denigrante, lo degradante y lo insultante que debe ser para una persona (un medico en este caso) que al llegar a un pais, a servir en no se que falsa mision, es verdad pero al menos en funcion de un gobierno, que este mande esbirros de poca monta y sucio talage a confiscar su pasaporte.
Mi pasaporte es algo mio y si se lo entrego al funcionario de aduana para que haga su trabajo no lo pierdo de vista hasta que me lo devuelve, pero al fin es mio y solo a mi me corresponde portarlo . Como va a venir un tipejo que ni se sento jamas en un aula a decirme que le tengo que dar mi pasaporte. Esa es otra razon para que odiemos a esa gente que hizo una costumbre el denigrar al cubano.
Suppongo que algo asi sentiria un judio en la alemania nazi cuando lidiaba con los funcionarios y con las autoridades.
Vaya………
Cuando haya oportunidad hay que salir a buscarlos y juzgarlos uno a uno a todos esos bastardos de poca monta.
A los que añoran los años 80 les recomiendo la lectura de “Informe Contra Mí Mismo”, escrita por Eliseo Alberto Diego, hijo del poeta y escritor Eliseo Diego, luego me cuentan del “esplendor y las bonanzas” de la década.
Hablar en primera persona tal vez no dé la medida exacta pero haber vivido esos años siendo un adolescente primero y luego un jóven pudiera ayudarme a avalar las mil y una anécdotas que tengo de esa década. Si algo se pudiera destacar, tal vez, sería la escasa desigualdad que existía, salvo bochornosas excepciones, sobre todo si se compara con las actuales y no, no me considero responsable de todo este desastre ni a mi generación tampoco, en eso concuerdo plenamente con los foristas.
Sin embargo, los cubanos en el extranjero progresan como nadie.
La situación actual en Cuba recuerda los finales de los sesenta en España. Había una generación de adolescentes desesperados porque cambiase todo cuando todo seguía igual, con un régimen aparentemente eterno.
Frente a eso solo puedo decir que un día antes nadie previó la caída del Muro de Berlín. Todo sucedió porque en una rueda de prensa un portavoz oficial se equivocó al leer una nota que le pasaron. Un hecho aparentemente insignificante condujo a una cadena de acontecimientos que se amplificaron fuera del control del poder.
Igual va a pasar en Cuba. Recordemos que el Mariel comenzó con un autobús empotrado en una embajada. Y el 11J con una directa de cuatro gatos en la calle.
Es imposible predecir el momento y la causa, pero habrá algo aparentemente poco importante que desencadenará de repente la caída del régimen. Podrá ser el asesinato grabado en directo de un opositor, un huevo en la cara de un dirigente o el encarcelamiento en el extranjero de algún hijo de dirigente por evasión fiscal.
Ya cansa la tenaz perseverancia en el… – Dariel Gutiérrez Murgado
Ya cansa la tenaz perseverancia en el error, el andar en círculos que de tan pequeños marean. Y uno se cansa, se marea, pero como Cuba le interesa y no quiere irse, también se preocupa, se entristece. Las nuevas medidas económicas adoptadas forman parte de ese largo experimento de probar qué se puede ir haciendo para no tener que hacer lo que hay que hacer.
Imagínese en un hospital, grave; lo analizan minuciosamente y los especialistas dictaminan que es necesario operar. Hay consenso médico. Sin embargo, se trata de un procedimiento quirúrgico prohibido porque contradice determinados preceptos ideológicos. No es el primero, algunos antes de usted murieron. En su caso las variantes empleadas le permiten sobrevivir, aunque arrastrando su dolencia y las crisis recurrentes. Y así, hasta un día.
La medicina es una ciencia; la economía también. Sería ingenuo desconocer que ciencia e ideología mantienen múltiples relaciones (sobre todo en las ciencias sociales, a las que la economía pertenece) pero no es posible sustituir la ciencia con ninguna ideología. La ciencia, por su propio método de observación directa y sistemática, es capaz de dar cuenta rigurosa y actualizada de la realidad, algo que a la ideología se le hace muy difícil porque su interpretación se basa en sistemas de ideas particulares y duraderos, con alto contenido emocional y un fuerte anclaje. De tal manera, relegar la ciencia para dar preferencia a la ideología en la comprensión de la realidad y la toma de decisiones se torna bastante inútil y peligroso.
Economistas cubanos insisten en que la descentralización del comercio exterior es un paso indispensable para superar el desabastecimiento actual, aliviar el nivel de responsabilidad del Estado en un área en la que se evidencia fuertemente limitado, y de paso proporcionarle los ingresos correspondientes por concepto tributario. Eso estaría bueno. Y no lo prohíbe el bloqueo. Pero no es socialista. Así que el nuevo plan, este sí compatible con las sagradas escrituras del socialismo, será el siguiente: inversión extranjera total o mixta en el comercio mayorista y minorista (con carácter no excepcional pero tampoco abierto) que incremente los niveles de producción y la oferta en las tiendas en MLC para progresivamente llegar a las tiendas en moneda nacional. Es decir, en mi tierra, se elige favorecer al capital extranjero sobre el nacional (privado) para invertirlo en un sector del mercado que comercializa en una moneda extranjera que no es posible adquirir legalmente en el país, para luego vendernos a ti y a mí, cuando se pueda y lo que se pueda, en nuestra moneda nacional. Aunque hablan de un corto plazo, parece un camino largo, complicado. Más o menos como ir del punto A al punto B.
El asunto es que mientras se ensayan estas flamantes medidas el agua en la vida cotidiana anda por el cuello. Basta decir, para que se entienda como está la cosa en el punto A, que una persona puede llegar a adquirir durante un mes todos los bienes de consumo (con excepción de la exigua canasta normada) en el mercado informal, no por elección sino por la total inexistencia de una opción legal. Y en esa jungla una caja de pollo de 15 kg cuesta poco más de dos salarios mínimos, los 5 kg de proteína animal que según Díaz-Canel debía consumir cada cubano en un mes –de comprarlos de cerdo que es la única carne con presencia estable en el mercado– serían dos salarios mínimos, un file de huevos o 1 kg de leche en polvo ronda cada uno casi la mitad de un salario mínimo. Y esto es solo una pequeña muestra de los gastos de la canasta básica que, como bien le gustaba explicar a Murillo, debe incluir hasta el ocio y el mantenimiento del hogar.
Este escenario ha lanzado a condiciones de pobreza a amplios sectores de la población, incluidos laboralmente activos; ha profundizado las desigualdades sociales, dotándolas de un cariz nunca antes visto: por primera vez en Cuba se comercializan productos en una moneda que no es posible adquirir legalmente. ¿De verdad nos hemos detenido a analizar lo que esto significa, incluso en el plano simbólico: espacios en tu propio país oficialmente exclusivos, mercados en los que sin importar todo el dinero que tengas no podrás comprar legalmente una botella de agua? A otros, en su mayoría jóvenes, los ha lanzado más allá de nuestras fronteras en una oleada migratoria con notables consecuencias en todos los niveles, desde el familiar hasta el demográfico. Todos estos son límites que nunca debimos cruzar, sin embargo, en mi país se prefieren antes que eliminar trabas al desarrollo como el monopolio estatal sobre el comercio exterior.
Pero no nos asombremos que un día echen a andar la maquinita resemantizadora del socialismo y nos digan que ahora sí, que no solo no hay contradicción, sino que es deseable que los distintos actores de la economía en fraterna comunión participen en el comercio exterior y aporten a la consecución de la nación socialista, próspera y sostenible. Ha sucedido antes. En 1968, durante la ofensiva revolucionaria Fidel se preguntaba si íbamos a construir el socialismo o hacer timbiriches. Cuarenta años después ya sabemos lo que pasó. Eso sí, no nos hagamos ilusiones, muy jodida tendría que estar la situación para entonces pues las medidas de apertura económica al sector privado en Cuba solo se toman en momentos de profunda crisis. Lo demás será lo de siempre, la prensa y los intelectuales orgánicos que ayer defendieron el monopolio harán loas a la medida por su pertinencia y jamás se cuestionarán por qué ahora sí y antes no, como mismo nunca se cuestionaron por qué la tasa de cambio de divisas en el mercado informal pasó un día de no tener fundamento económico a ser económicamente fundamentada.
En el año 2009 Raúl dijo ante la Asamblea Nacional “es preciso caminar hacia el futuro, con paso firme y seguro, porque sencillamente no tenemos derecho a equivocarnos”. Cabría preguntarse entonces con qué derecho se siguen equivocando.
Abajo la dictadura ladrona mentirosa corrupta y ceñí al que lleva 63 años expoliando al pueblo y al país
Patria Justicia Libertad Vida 🕊🙏❤️🇨🇺
Eva, buen trabajo.
Gracias estimado y valorado Manuel Figueredo
Un saludo fraternal y más buenos deseos de paz y amor a su buen alma cubana
Los foristas de LJC y algunos articulistas querían una tasa de cambio más “real”, la ha colocado el gobierno en 120 (número redondo) pero los foristas creen que es muy baja porque el mercado negro (que es el verdadero mercado) la tiene más alta. Si el gobierno del Sr Canel la pusiera en 140 entonces se quejarían que esta alta que debiera ser baja porque hay que hacerle frente al mercado negro. El Sr Canel se lanzó suicida a ejecutar la tarea ordenamiento en medio de la crisis del covid, medida que el liberalismo más ultra de la Isla venía reclamando, pero una vez ejecutada dicen que es incorrecta. No los entiendo señores.
Debieran saber que las dificultades de la Isla no provienen del modelo económico elegido, sino de su posición estructural en la ÚNICA división internacional del trabajo que hay: la capitalista (término que le apasiona a mi querido y amado Franklin) a lo que se suma el bloqueo norteamericano.
Lo que ocurre en Cuba esta ocurriendo en el 80% de la humanidad ubicada en esa amplia franja productora de poco valor, la savia del capitalismo.
No sean anticomunistas cerrados. Se les bloquea el pensamiento y se convierten en fanáticos tertulianos.
Y Sr Figueredo ha visto cierta división en las filas contrarrevolucionarias.
En cuanto a Eva es una señora mayor llena de odio con muchas consignas. Nada más. Griterío puro. Palabrejas a falta de palabras.
Saludos
le de mas vueltas a la noria que nos marea, el sistema simplemente no sirve (por no decirle una expresion mas fuerte y cercana a la realidad)
Eva coincido totalmente con usted.
Gracias estimado EDUARDOF
Le deseo una feliz semana colmado de paz y amor
MONGO M USTED NECESITA BEBERSE UN LITRO DE Rondenticida
Que le aproveche !
Dudo que nazcan cubanos que no tengan en su sangre y en sus pensamientos orgullo de ser martianos y liberales a toda prueba . Sucede que una sociedad corrompida por la avaricia de unos pocos llenos de odio y totalitarismo no tiene más remedio que rebelarse a como dé lugar y luchar contra quien le oprime el derecho más esencial de libertad y decoro
El hombre que clama vale más que el que suplica
Si la primera vez, en octubre de 1869 con 16 años de edad, no estaba involucrado a fondo en la lucha independentista, en esta ocasión su estatus resultaba completamente diferente: era un conspirador con todas las de la ley.
Desde el 31 de agosto del año anterior se encontraba en Cuba, tras nueve años de haber sido deportado, y ahora, como aquella vez, claramente comprometido con la libertad de la Patria. Sus acciones lo afirman.
A mediados de marzo de 1879 Martí asistió a una reunión de conspiradores que preparaban un nuevo levantamiento armado contra el mando español y en ella es designado vicepresidente del fundado entonces Club Central Revolucionario Cubano, con sede en La Habana.
Más tarde el Comité Revolucionario Cubano, radicado en Nueva York y dirigido por el Mayor General Calixto García, lo nombró subdelegado en la Isla.
En aquella época, él trabajó en el bufete de su amigo Nicolás Azcárate, donde conoció a Juan Gualberto Gómez, y luego en el de Miguel Viondi, quien al ver los constantes encuentros de los dos jóvenes comprendió sus andanzas conspirativas y decidió darles un pequeño local para sus entrevistas.
El 21 de abril siguiente fue invitado a que hablara en un homenaje al periodista Adolfo Márquez Sterling en un acto en los altos del café El Louvre. Ante un auditorio embelesado por su oratoria, Martí ratificó con claridad y certeza su posición política de ser partícipe de la independencia de la Patria, alejándose de las posiciones de liberales y de los que pretendían mantener el régimen.
“El hombre que clama vale más que el que suplica,…, los derechos se toman, no se piden; se arrancan, no se mendigan” fueron frases que con valentía expuso.
No había que ser muy ducho en política para saber que quien aquello dijera era un independentista entero y las autoridades coloniales ya le habían echado el ojo paras entonces.
La preparación de la nueva contienda iba de prisa. Como en otras regiones de Cuba, en la capital se recogieron fondos y se mandaron a Nueva York para la compra de armas y la organización y envío de expediciones.
José Martí apenas tenía tiempo para estar con su esposa camagüeyana Carmen Zayas Bazán y su pequeño hijo José Francisco. Estaba completamente sumergido en la acción revolucionaria y en el trabajo de maestro en el Colegio Plasencia y como pasante en el bufete de Viondi.
Las autoridades peninsulares sabían que algo se tramaba, pero a pesar de ello no pudieron impedir que a fines de agosto ocurrieran levantamientos independentistas en varios sitios del país. Comenzó entonces la que se llamó Guerra Chiquita, la segunda que buscó la libertad de la ínsula.
El 17 de septiembre de 1879 Martí había invitado a Juan Gualberto a almorzar en su modestísima vivienda en Amistad 52, entre Neptuno y Concordia, cuando alguien llamó a la puerta y Carmen fue a atender el reclamo.
En 1925 Juan Gualberto recordó este día:
“…la señora de Martí dijo a éste en voz alta: ‘El señor que vino hace rato a buscarte, y al que dije la hora que te podía ver, es el que ha vuelto. Dice que termines de almorzar, pues no tiene prisa y te esperará.”
Más adelante escribió:
“…Martí se levantó y, con la servilleta aún en la mano, pasó a la sala de recibo. Tras breves instantes, volvió a la mesa y con calma absoluta, dijo a su esposa: ‘Que me traigan enseguida el café, pues tengo que salir inmediatamente’, y siguió para su cuarto… Servido el café por la sirvienta en esos instantes, vino Martí a la mesa, y de pie sorbió de su tasa unos cuantos buches de café, y dirigiéndose a mí me dijo: ‘Tome su café con calma: usted se queda en su casa, y dispénseme, pero es urgente lo que tengo que hacer.”
A instancias de Carmen, Juan Gualberto siguió a Martí y su incógnito acompañante hasta verlos entrar en la estación de policía de Empedrado y Monserrate. No había dudas: Estaba de nuevo preso. Su amigo se apresuró en avisarle a Azcárate, quien logró que se levantara la incomunicación del detenido y a su vez hizo que Viondi eliminara periódicos y documentos comprometedores.
Se dice que el general Ramón Blanco, gobernador de Cuba, le ofreció a Martí sacarlo del proceso si declaraba públicamente su adhesión a España.
La respuesta fue como un latigazo:
-Díganle ustedes al general que Martí no es de raza vendible.
Unos pocos días después, el 25 de septiembre, abordó en calidad de preso el vapor Alfonso XII con destino a España.
Iba deportado otra vez. Regresaría clandestinamente a Cuba en la tempestuosa noche del 11 de abril de 1895 por el oriente de la isla. Lo haría como un soldado de la Patria que ya estaba de nuevo en armas contra el coloniaje, en lucha por la independencia.
Yo nací en1956, y defendí dos veces un doctorado en la Universidad de la Habana en 1996 y 1997, que explicaba el derrumbe del campo socialista, y al mismo tiempo explicaba Cuba y su modelo copiado hasta el suspiro: el de la antigua URSS. En ese doctorado estaban todas “las prohibiciones” y aberraciones que había que eliminar. Pero poco se puede enterar las generaciones anteriores, copartícipes y las siguientes si el sistema impide la comunicación y el conocimiento desde hace 63 años. Las Ciencias Sociales amordazadas y la desinformación de los medios masivos de comunicación, rasgos esenciales del sistema de dictadura totalitaria, son los responsables de que cada generación se despierte y vea que el dinosaurio sigue ahí. Desde esa fecha conozco todas las propuestas de los especialistas cubanos y de la sociedad civil para el diagnóstico y el cambio, sin embargo, nos tocó un dinosaurio sordo y arrogante que nos impide aprender, entonces ¿Qué hacer como ciudadanos?.
Contemplar cómo el gigante comunista creado por Fidel Castro es derrotado por el Goliat del mercado cambiario informal es una magnífica noticia, que confirma cuán despistados están el Banco Central o el ministerio de Gil para afrontar la competencia con el mercado informal en las actuales condiciones en que aun no se han desatado las campañas de represión y hostigamiento que se supone no tardarán en llegar. Si este escenario se extendiese al resto de mercados de la economía, el comunismo totalitario se habría acabado hace décadas.
cuba y la robolucion cubana seguirian luchando y resistiendo, por supuesto porque sino tendria que ir a juicio por todos los desmadres que le hizo a la nacion.
Brutalidad policial en cuba.
https://www.youtube.com/watch?v=FCx7lAOPF4c
Miren que bien se expresa esa sennora.
Para Rolando+Lopez
Usted se asombra de las desigualdades de hoy en Cuba, pero ustedes querían descentralización, querían propiedad privada porque la estatal era ineficiente, se quejaban que los emigrados cubanos y extranjeros no los dejaban invertir. Y ahora ve desigualdades.
Pudiera explicarse como lograr igualdad social con propiedad privada.
El extranjero que invierte en Cuba lo hace porque seguramente tiene que pagar menos salarios e impuestos que en otro país. No se da cuenta de ello.
Usted no sabe que en consumismo del 15% de la población del mundo que vive básicamente en Europa y EE.UU o lo que es lo mismo en los escalones más altos de la ÚNICA división internacional del trabajo que existe: la capitalista no son sostenibles en el resto del planeta, porque y esto es elemental los recursos del planeta no dan para ello.
Le invito a leer La economía de la Edad de Piedra y La sociedad del don. Si no puede descargarlos paso mi correo y lo envío. Hay otros mundos y sociedades felices distintas al capitalismo.
Decirle al inagotable cómo esta la situación en Ecuador: ya los jóvenes transformados por el capitalismo en SICARIOS llegan al extremo de grabar y difundir por whatsapp como cortan la cabeza a sus víctimas. Ya se que el hombre quiere hablar de chicas pero decirle que comente lo que hay allí. Y no solo es allí, es en México, Colombia, Brasil etc etc.
Es el capitalismo como sistema entrando en caos extremo
izquierdodelgado1925@gmail.com
Para Ramón Izquierdo,
No, señor mío, no me molestan para nada las desigualdades cuando se trata de personas con talentos especiales, con capacidad para el emprendimiento y la superación personal, cuando con gran esfuerzo propio logran mejorar sus vidas y las de sus familiares, ellos generan empleos, contribuyen con el pago de sus impuestos a mejorar la sociedad.
Mujica lo dice magistralmente, mucho mejor que yo, Silvio también, “Tener no es signo de malvado y no tener tampoco es muestra de que acompañe la virtud”.
Mi problema, con los que como dice Serrat, “Con esos tipos tengo algo personal” son con los que sin aportar nada, los que aprovechando su posición, sus cargos, ganados con intrigas, con doble moral, corruptos hasta la médula se pasean ellos y su familia en autos y yates lujosos, los que mandan a sus hijos a becas al extranjero, los que tienen mansiones que no han comprado ni han construido, los que criticaban a los “burgueses” y ahora tienen decenas de ” asistentes o empleados” para no llamarle criados, a los que no les falta la corriente porque viven en zonas privilegiadas y tienen plantas eléctricas. Es con ellos, algunos tuvieron méritos, no lo niego, pero se volvieron peores que lo que una vez combatieron y usted, Ramón, lo sabe muy bien. No me venga con historias para dormir a inocentes, porque no lo soy, ni tampoco fanático que se niega a ver la realidad, no soy ni odiador ni mercenario, ni burgués ni procapitalista, ni contrarrevolucionario como ya me ha dicho otras veces, creo que se lo he dejado bien claro ya.
Le agradezco mucho la invitación a su correo, le recuerdo que fue usted quien cerró el intercambio, últimamente lo he visto algo cambiado, reconociendo realidades que todos conocemos y un poco menos agresivo con los foristas aunque de vez en cuando ofende a algunos, claro, hay que comprenderlo, usted es fanático y los fanáticos al fin y al cabo piensan poco o no piensan.
Saludos.
Excelente respuesta ROLANDO +López para un tipo que dice no ser Cubano sin embargo en lugar de estar defendiendo las injusticias y mentiras de su gobierno contra los mexicanos en lugar de criticar las marañas de AMLO, viene al foro a intentar agredir con su discurso de odio y resentimiento a los cubanos decentes ese pobre ser tiene fobia a la libertad y a las virtudes esenciales y humanas . Debe haber pasado demasiado tiempo escondiendo su verdadero rostro , así son los inconformes de sí mismos …
Un saludo y feliz y provechosa semana para Ud.
Muchas gracias, mi estimada Eva. Su opinión, al igual que sus comentarios son muy importantes para mí, sobre todo cuando Martí nos ilumina a través de ellos. Su devoción por el Apóstol me conmueve siempre.
Saludos.
Gracias estimado ROLANDO+LÓPEZ
El Mundo debe erradicar ese tumor crecio en la URSS y cuyas metastasis cubanas arruinaron a Venezuela , a Nicaragua y a todos los paises donde metieron o apoyaron gobiernos o fomentaron sus guerrillas.
Los ucranianos vivian en su nuevo pais como todos con sus pro y sus contra, como mismo vivian los cubanos antes de que llegara esa basura que todavia llaman revolucion., Hasta que llegaron los rusos y sus ideas equivocadas. A los ucranianos los matan en sus edificios y sus comercios mientras que a los cubanos les cerraron los comercios y les destruyeron sus negocios mediante el Sirviennte en Jefe.
Dentro de unos annos, si no se hace lo que se debe,en Ucrania, veran la basura en las calles, los escombros y la gente comiendo de la basura como se hace en cuba. O haciendo cola para comprar en dollares o euros ya que la moneda en que compran hoy estara devaluada al maximo.
Emigraran, escapando a como de lugar de su pais en ruinas, en el que un dia pensaron que nacerian sus nietos, lo mismo que pensaron mis padres.
Por eso me alegra que exista la OTAN y que Canada este armandose fuertemente para cuando los rusos lo intenten, descojonarlos.
Por eso me gusta que los USA esten apoyando a Taiwan y a su pueblo que no quiere caer en el comunismo chino.
Por eso me alegro cuando se declara a la tirania de los castro y sus sicarios como pais terrorista y nadie quiere comerciar con ellos hasta que se vayan al diablo
Malditos
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