Mucho que perder

por Consejo Editorial
perder

Todo fue un malentendido. Que Frank Padrón proyectara el miércoles pasado el film Nada que perder: un armatroste propagandístico sobre la vida del pastor brasileño ultraconservador Edyr Macedo, fue un malentendido.

Se pudo pensar que el director del espacio televisivo cinematográfico Nuestra América se había convertido al evangelismo. Pero en su perfil de Facebook se veían fotos de él con Ramón Silverio, el director del centro cultural El Mejunje, celebrando el 35 cumpleaños de la institución:un lugar donde lo menos importante es la orientación de género. Hubiese sido una conversión en cuestión de días, y Dios es grande, pero no tanto.

Más tarde el crítico de cine aclaró –en conversación con el autor de este artículo- que la idea era exponer lo ridículo de la propaganda del protestantismo fanático. Pero no fue esa la interpretación que le dieron algunos miembros de las iglesias opuestas al matrimonio igualitario: la televisión está con nosotros, decían; y ofendían: el gay –empleando otra palabra- se regeneró.

En la derecha.

Lo que no dicen en Cuba abiertamente las iglesias protestantes fanáticas, es que ellas están en la derecha. El término ideología de género fue un destacado argumento en la campaña que lideró Álvaro Uribe contra los diálogos de paz en Colombia. Según él, la ejecución de los acuerdos entre la guerrilla y el gobierno de Juan Manuel Santos, traería la implementación de la llamada “ideología de género”.

Esta terminología no pasa de ser un instrumento propagandístico que ninguno de sus “denunciantes” logra explicar. No usada jamás dentro de los movimientos pro derechos LGTBIQ ni en los colectivos feministas, para Putin la ideología…es una conspiración europea que se propone la castración de los hombres provocando la reducción del ejército ruso –es decir, los travestis-; para otros, significa escuelas donde los niños aprenden que no existe el sexo, y, para muchos, es una conspiración mundial que los gobiernos ocultan. Aunque no sepan decir de qué va esa conspiración.

Una alternativa débil.

Los pocos grupos de la sociedad civil que se articularon para lograr la aprobación del matrimonio entre dos personas no lograron impactar más allá de los convencidos. Cuatro factores impidieron que la ciudadanía escuchara a los defensores del artículo 68 con la misma fuerza que generaban las iglesias conservadoras:

  • El primero fue la división del movimiento LGTBIQ. Fraccionado en decenas de pequeñas formaciones, traía consigo diferencias que no supieron superar, movidos en ocasiones por ansias de protagonismo, acusándose unos a otros de este pecado e impidiendo un frente común.
  • El segundo aspecto consistió en que, si bien algunos colectivos intentaron estructurar una sola voz desde la pluralidad –dígase el Centro Memorial Martin Luther King, el taller de tatuaje La Marca, la tienda de diseño cubano Clandestina, las plataformas Abriendo Brechas de Colores, Alianza Afrocubana, Guardabosque o los administradores de la página en Facebook 68 Va!– la falta de experiencia unitaria, el desconocimiento del activismo y la no ejecución pronta de acciones, provocó que estas se realizaran de manera esporádica y sin impacto ciudadano.
  • A ello se le sumó –como tercer punto- que el Estado, temiendo enfrentamientos callejeros, prohibió de manera tácita, la celebración de algunas intervenciones divulgativas en las calles. Las iglesias amenazaban con responder de manera directa y en el lugar. El gobierno veía en los activistas pro artículo 68, aliados irresponsables que no pasaban de encender una pradera que ya ardía.
  • En cuarto lugar, las iglesias protestantes conservadoras, argumentaban que responderles a ellas, o el solo hecho de defender el derecho al matrimonio, era segregarlas y discriminarlas.  Y sobre todo ello caía un optimismo ingenuo y desmovilizador.

El Estado se enroca.

Intentemos representarnos el proceso de discusión en torno al artículo 68 como una función seno-coseno. El matrimonio igualitario se encontraba en 1, en tanto que sus opositores en -1. Ahora ambos sectores están en 0. ¿Cómo se logró este empate técnico?

La forma de procesar los resultados de los debates ciudadanos no contemplaba manifestarse a favor. Era modificar, agregar o suprimir. De tal manera solo se recogieron planteos negativos. La solución del gobierno -intentando complacer a todos- fue llevar a referendo el Código de Familia.

Pero buena parte del movimiento LGTBIQ, todo el protestantismo fanático y más recientemente, la Conferencia de Obispos Católicos, se oponen al referendo. Los primeros alegan que los derechos no se discuten, los segundos creen que los criterios reunidos debían haber logrado el regreso al matrimonio entre hombre y mujer. Los dos temen perder.

Y el Estado no solo teme perder votos, teme también perder la luna de miel que goza con las iglesias. No quiere regresar a pasados enfrentamientos directos. Menos aún ahora que la feligresía de todas las denominaciones crece.

Pero si alguien ha salido ganando en este proceso ha sido la sociedad civil.

El socialismo cubano llega a las reformas con una dosis de democratización que no tuvo Vietnam y, ni de lejos, China –Tiannamen es algo más que una plaza-. Que el Estado someta a referendo el matrimonio igualitario, habla de una maduración política nunca antes vista. Por primera vez aceptará, como aceptó durante el proceso de debate ciudadano, una abierta oposición organizada a una política de gobierno.

Solo resta hacer ver a la sociedad que, luchar por el derecho al matrimonio igualitario es luchar, no solo por otorgar derechos a un sector, sino por expandir los derechos de la ciudadanía. Después, se podrá ir por más.

12 comentarios

Big Point 8 febrero 2019 - 11:05 AM

Interesante analisis. Yo creo que el Estado/Pais no enroco’; Sino perdio’ una pieza de gran valor en el ajedrez civico. Si antes era +1 y -1… ahora seria -1…y +1.
Un saludo a todos. Mucho, mucho frio en Ontario

manuel 8 febrero 2019 - 12:45 PM

El estado cubano NO esta acostumbrado a ver manifestaciones ciudadanas en laa calles con agendas y convocatorias espontaneas.Hay es donde radica el problema del problema. Si fueramos un Pais normal …..todo el mundo se hubiera manifestado sin problemas. No existe organisacion ciudadanas autonomas ni experiencia de organisacion espontaneas en la Revolucion cubana. Los unicos que estan organisados y si salen a la calle defendiendo su agenda es……la contrarevolucion.
Cuando la sociedad cubana va aprender que “pajjarito con la boca abierta ha padado al pasado ” ?y cuando partido-estado aprendera que el monopolio mobilisativo de ayer es un freno al presente y al futuro del Pais ?

jovencuba 8 febrero 2019 - 1:00 PM

Algo hay que reconocerle a Raudelis, es conservador en lo político y lo social, muy consecuente. Yo prefiero ser lo contrario, lo más progresista posible.
Harold

Yandry Fernández 8 febrero 2019 - 1:58 PM

Creo que faltó abordar más en el artículo el pésimo papel de nuestra querida prensa estatal que, de abordar los debates de la constitución donde el único planteamiento parecía ser lo referido a al artículo 68, pasó a un silencio absoluto del tema. Claro este silencio fue una orientación desde el más allá.

Y es así, la prensa fue uno de los factores por los cuales la opinión pública no se vio reflejada en nuestros medios ni mucho menos las personas pudieron saber los argumentos de ambos sectores y promover un diálogo a favor de la igualdad y los derechos de todos.

Franciscano 8 febrero 2019 - 2:40 PM

Maravilloso post que ilustra hasta donde puede llegar el conformismo político después de seis décadas de adoctrinamiento a la obediencia de los designios del “Olimpo”.

Si las luchas por los derechos ciudadanos hubieran seguido esa línea de “razonamiento” y conformidad aún habría una total discriminación racial y de género, los negros esperando por la “bondad” de los amos blancos, las mujeres sin derecho al voto ni al trabajo y los obreros con jornadas de 12 o 14 horas diarias.

La historia de la humanidad enseña que los derechos siempre se han conquistado luchando, de forma pacífica o no, pero nunca con la conformidad de un: “Después, se podrá ir por más” cuando se “concede” por tácticas políticas el volver sobre el problema en un futuro no definido.

El Artículo 68 en mi criterio se incluyó en la propuesta de Reforma Constitucional para hacer un “guiño” y tratar de atraer a un sector que sólo ha recibido promesas que nunca se han concretado en derechos reconocidos legalmente, como ya existen en decenas de países, pero “el tiro salió por la culata” y cuando los que mandan vieron la oposición muy activa de religiosos y homófobos, que implicaba un NO a su propuesta, quitaron el Artículo 68 que no era el pollo del arroz con pollo de la Reforma, cuyo principales objetivos son el paso al capitalismo de estado con partido único y atornillar las prerrogativas de ordeno y mando que han venido forjando durante ya seis décadas.

Marla 8 febrero 2019 - 6:31 PM

Excelente comentario. Hay una total incoherencia entre ese principio de igualdad que prescribe el artículo 41 y el sometimiento a referendo de derechos, que si bien no tienen por qué estar reflejados en la Costitución, deberían estar más que garantizos por ser derechos humanos, con carácter general e indivisible y no dejarlo a la paciencia y a la voluntad del pueblo, que sin dudar de su cultura, una mayoría es lego en Derecho y las limitaciones no les afectan directamente.

milblogscubanos 8 febrero 2019 - 3:46 PM

Me parece que Chinito Pillo, ha enmudecido un poco… Se le está pasando la euforia…
Va a decepcionar a LordiSam, que ha aparecido tras unos meses sin decir nada, tras años de retiro espiritual…. Ah…. ¡La Corachan de Barcelona¡

Tony 8 febrero 2019 - 3:58 PM

@ Milblogscubanos (Josep Calvet, SoliCalvet, etc)… Por el contrario, estoy trabajando en la situación peliaguda de las relaciones Cubano-Canadienses, si escribo algo al respecto te aviso!!! 😉 Saludos 🙂 🙂 🙂

mauchi34 8 febrero 2019 - 6:17 PM

Creo que el autor no es claro en algunos puntos. CUando dice :”Y el Estado no solo teme perder votos…” de que votos habla que puede perder el estado? Pa mi es pura jodedera ! 🙂

Julio Carrillo 8 febrero 2019 - 7:18 PM

Sí Raudelys. Adán y Eva. Hombre y mujer multiplicándose. Cómo? Los hijos de Eva con ella.misma y las hijasd de Adán con él mismo. Y luego los hermanos con las hermanas. Y así, incestuosa y alegremente hasta que llegaron a crear la joya de inteligencia que eres tú.

informatico_en_cuba 8 febrero 2019 - 9:39 PM

No creo que ningun cientifico se tome en serio esos argumentos… las personas fanaticas no deberian tener poder politico…

Rogelio 9 febrero 2019 - 8:30 AM

Sigue siendo una barbaridad pretender someter derechos a referendo. La historia está llena de ejemplos de sociedades donde han prevalecido temporalmente corrientes racistas, antisemitas, xenofobas, patriarcales, en las que prevalecerán las posturas discriminatorias. Terminen de entender que democracia real es algo más que un simple voto de mayorias, también necesita respeto e igualdad de todos los sujetos en legalidad y derechos.

Los comentarios están cerrados.

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