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Es difícil exagerar la profundidad de la crisis en que se encuentra el país. Además de cambios urgentes en materia política y social, es indispensable implementar políticas que reformen de forma integral y sistemática la economía cubana. Por esa razón, en las próximas dos semanas y bajo la coordinación del economista Omar Everleny Pérez, La Joven Cuba publicará Recomendaciones urgentes para la economía cubana, una serie de textos con propuestas concretas para sacar al país de la crisis.
Estos expertos, en su mayoría residen en Cuba y no son los únicos con tales criterios, pero representan una muestra del pensamiento crítico y los aportes que se hacen desde la comunidad académica para revertir la situación actual. La responsabilidad de analizar e implementar o no sus propuestas es siempre del Estado. Pero nadie podrá decir que no existen soluciones visibles y a la mano.
Las autoridades cubanas durante mucho tiempo han descartado o tomado con pinzas las recomendaciones de los economistas cubanos. Ya sean profesionales de sus instituciones o fuera de ellas, comulguen o no con el proyecto político de los últimos 66 años, la toma de decisiones a menudo se ha definido priorizando intereses (o prejuicios) políticos por encima del consejo de los expertos.
Para los decisores muchas de las propuestas que publicará La Joven Cuba quizás ya sean familiares. La presidencia, la Asamblea Nacional y algunos ministerios han convocado a economistas a sugerir soluciones una y otra vez. Lamentablemente, sus recomendaciones por lo general no se implementan. Pero si los decisores saben bien qué proponen los expertos, quién no siempre lo sabe es la ciudadanía.
Debido a ello los textos que compartirá La Joven Cuba como parte de este dossier van encaminados a brindar recomendaciones concretas a los decisores, ante el escrutinio de la opinión pública, como un ejercicio democrático necesario que permita la retroalimentación. Fomentar la participación popular en la toma de decisiones económicas y el acceso equitativo al conocimiento para el bienestar colectivo, es un principio socialista básico. En una democracia socialista, sus propuestas serían escuchadas.
Los contenidos del dossier son concretos y fáciles de entender. Incluye propuestas de descentralización y reforma estructural de la economía, cambios monetarios y fiscales, transformaciones agrícolas y productivas, reformas institucionales y jurídicas, cómo expandir oportunidades para el sector privado y la inversión extranjera, y cómo desarrollar una política industrial a largo plazo. Nadie podrá decir que las autoridades no saben qué debe ser cambiado, o que no se les mostró el camino para empezar a hacerlo.
En vísperas de una escalada de sanciones por parte de la segunda administración Trump y con una crisis que cada vez mella más el bienestar ciudadano, e incluso, las llamadas conquistas históricas de la Revolución, es urgente la reforma integral del modelo económico, tomar lecciones de otros países, otorgarle autonomía a la empresa estatal, diversificar las inversiones, quitar las restricciones al sector privado y reducir la dependencia externa.
Las autoridades han reconocido varias veces el estado crítico de la economía y han señalado la existencia de «distorsiones» pero sin mostrar un programa económico integral y profundo. Los textos de los próximos días, desde diversas aristas, son una hoja de ruta a desarrollar para sacar a Cuba de la crisis económica actual y con acciones inmediatas. Quedan todas en manos de la voluntad del gobierno cubano.


Ojalá esta vez el Gobierno escuche y aplique las propuestas que profesionales académicos en materia de economía ofrecen.
Realmente gente inteligente en Cuba sobra para que el pais floresca. Lastima que algunas piedras aun se sigan aferrando a las paredes y no entiendan que ya probaron demaciado sus recetas y nunca funcionaron.
Una iniciativa prometedora. Debe constituir un ejemplo prácticaño de democracia socialista, conforme al espíritu y letra de nuestra Constitución, muy constructiva y sumamente necesaria.
Después de estos artículos tan necesarios, si no hay al menos un comentario del Gobierno, se confirmara que el Emperador está desnudo y que esos malos sastres que lo asesoran lo están llevando, cada Vez, a otro nivel del abismo a que está sumida la economía cubana y el país.
Sr. Harold sabe usted un detalle muy valioso de ese blog que usted es fundador, que tiene ya historia escrita que se puede consultar, si como en mi caso llevo años leyéndolos me basto recordar títulos de “viejos escritos” que se repiten y nada cambia, con esa idea busque un artículo del 2022, “El punto de no retorno” por Mabel Torres, 29 agosto 2022 y la autora mencionaba,
“¿Qué pasó entonces con la llamada «reforma cubana»? Los optimistas dirán que permanece en pausa a la espera del «momento correcto», pero lo cierto es que once años después del sexto Congreso del Partido y de la aprobación de los Lineamientos, los problemas que nos afligen carecen de una solución inmediata. No podemos cambiar la matriz energética a corto plazo y ni siquiera con medidas acertadas es posible salir de la crisis económica tan rápido como quisiéramos.
Aunque no existen datos oficiales, basta una caminata por las calles para comprobar que han ascendido la cifra de deambulantes y mendigos, los índices de pobreza, los derrumbes, la insalubridad… Los jóvenes se marchan de Cuba porque saben que los cambios que la patria necesita tomarán años y tendrán un saldo doloroso a nivel social. Nadie puede culparlos de no responder ante el eterno sacrificio al que se nos convoca, por eso compran dólares como locos, como quien quiere comprar la libertad.
En medio de las circunstancias actuales, la postal de esta isla del Caribe ha rendido sus colores a una gama de grises que la nubla. La consigna de turno: «somos continuidad», junto a otras manidas y vacías expresiones como «resistir y vencer» y «vamos por más», son síntesis de una retórica política que llega desde arriba, pero que en cuestiones prácticas a nadie aporta luces sobre a dónde vamos como país.”
Que le hace pensar que en esta ocasión si van a escuchar a los especialistas, que las autoridades únicas y plenipotenciarias dejaran su arrogancia crónica e intentaran mínimo analizar y entender ideas que por años están renuentes de ni siquiera escuchar. La Cuba actual solo podrá cambiar cuando se acepte y entienda muy a regañadientes que hoy el cambio político ha de ser el primer paso, vendrá por el acumulado descredito de las autoridades elegidas o por implosión y hastío que ojalá no sea muy costoso en vidas si ese sin retorno de el hartazgo popular llega a las calles de mi país.
A la espera de que nos dirán los especialistas del tema económico de manera concreta “fáciles de entender. Incluye propuestas de descentralización y reforma estructural de la economía, cambios monetarios y fiscales, transformaciones agrícolas y productivas, reformas institucionales y jurídicas, cómo expandir oportunidades para el sector privado y la inversión extranjera, y cómo desarrollar una política industrial a largo plazo.”, pero le pondré parte de mi comentario en aquel escrito del 2022 que nadie puede hoy rebatir.
“Pues Cuba, su sociedad resultante, sus relaciones económicas derivadas del socialismo burocrático y sobre todo el resultado ofrecido por la opción de “somos continuidad” y del equipo económico elegido para el cambio generacional, se han ido quedando sin combustible a un rate que hace creo un buen rato pasaron ese punto de no retorno, ya no solo el país no puede regresar al punto de origen, aquella revolución triunfante de amplias esperanzas populares, se aproximan peligrosamente a un “mayday” que obligara a que el país antes de estrellarse estrepitosamente por incomprensión de las realidades resultantes de años de infelices políticas económicas, equivocadas valoraciones de la realidad lograda y sobre todo el excesivo uso de la eterna justificación del bloque/embargo americano para cubrir esa amalgama de extensa insatisfacciones y penurias derivadas de decisiones tomadas por la alta dirección de la revolución, y se derive en un conflicto interno altamente volátil”
Lo primero que hay que cambiar es a todo el gobierno,todos están fuera de la realidad,hay que hacer elecciones libres y democráticas para no caer en la trampa del capitalismo al estilo ruso.
Si el turismo y las remesas de las familias, constituyen las dos principales fuentes de ingreso del govierno. Que sentido podria tener el govierno en hacer los cambios necesario. La migracion de los cubano y su retorno con dolores para gastar en los hoteles de los militaries es negocio sumamente rentable. Este esquema ya esta aplicado en Santo Domingo y les ha ido muy bien.
Nada cambiará porque la “pérdida del control absoluto economico” cabalga junto a la “pérdida del poder absoluto político”….uno no puede sobrevivir sin el otro en un diabólico “modus vivendi” creado a “imagen y semejanza” del orate de Biran
Aunque estoy más que seguro que las recomendaciones que se publicarán próximamente será muy certeras y viables, hay un problema de trasfondo que debe ser priorizado, para que se puedan implementar las reformas económicas que tanto necesitamos.
En primer orden es necesario revolucionar la visión y compresión que tiene el gobierno sobre el “socialismo” en Cuba
(algo que en la circunstancias actuales aseguraría es imposible.)
En segundo lugar se hace necesario reeducar a la población en cuanto en materia de política, economía y normas cívicas se trata, para lograr un carácter de conciencia nacional colectiva, nunca antes lograda del todo, desde mi punto de vista.
Pues los cambios que requieren la economía cubana no serán logrados desde la pasividad de los intelectuales, que emiten juicios acertados, pero se someten a la posible lucidez del algún dirigente sesudo.
Pienso que, si algo está bien claro para todos, aunque no pocos se empeñen en no aceptarlo o en no expresarlo, es que las políticas aplicadas por el Estado cubano, a lo largo de los años para el desarrollo económico de la nación, bajo las condiciones del bloqueo impuestas por los sucesivos gobiernos de los Estados Unidos, endurecido en los últimos cinco años por la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo, han contribuido a conducirnos a la profunda crisis que enfrenta la nación.
Algunas de las acciones o medidas implementadas por el Estado como parte de su política económica que, en mi opinión, en lugar de contrarrestar las afectaciones del bloqueo sobre la población, han contribuido a reforzarlas, y que pudieran formar parte de los errores cometidos, a los que ha hecho alusión en más de una ocasión el General de Ejército Raúl Castro, han sido:
1. La eliminación (prohibición) de cualquier tipo de actividad privada individual o colectiva (de emprendimiento como se le denomina internacionalmente en la actualidad), en 1968, en el contexto de la denominada “Segunda Ofensiva Revolucionaria” a la que no escaparon siquiera los «puestos de fritas» ni los reparadores de calzado (“zapateros remendones”) de barrio. Miles de personas tuvieron que dejar de realizar la actividad en que se habían ocupado durante años. Los productos y servicios que brindaban a la población nunca llegaron a ser reemplazados o sustituidos por el estado en cantidad ni con la calidad y eficiencia con que se realizaban. Desapareció un importante sector con sus valores y formas de actuación cuya gestión, sumada al empeño de independencia y soberanía del país, en lugar de rechazada a cal y canto, e incluso satanizada, como lo fue durante años, habría podido contribuir a mitigar, en alguna medida, las penurias de la población en los años 90, derivadas de la escasez de productos de todo tipo que se enfrentó en esa década, resultado de la caída del campo socialista, del endurecimiento del bloqueo y de la ineficiencia del sector productivo tanto agrícola como industrial.
2. La transformación a cooperativas de producción agropecuarias (CPA), a partir de los últimos años de la década del 60, de gran parte de las cooperativas de créditos y servicios (CCS), constituidas en los primeros años posteriores al triunfo de la Revolución e integradas mayoritariamente por los campesinos que recibieron el título de propiedad de las tierras que trabajaban como arrendatarios, inhumanamente explotados y abusados por los terratenientes a las que pertenecían. Al incorporarse a las CPA, haciendo entrega de sus tierras voluntariamente o fuertemente presionados por las circunstancias, pasaron de pequeños propietarios, cuyo bienestar y el de sus familias dependían de su dedicación y resultados productivos, a obreros agrícolas cuya motivación por el trabajo y responsabilidad individual se diluye en la del colectivo. Las CPA se han caracterizado a lo largo de los años (en los buenos, en los malos y en los peores) por sus bajos niveles de eficiencia y productividad, con las consiguientes afectaciones que ello supone en cuanto al suministro de alimentos a la población. ¿Habrá que mantener a todas estas empresas hasta que dispongan de los recursos suficientes para cumplir sus planes de producción siendo aún ineficientes?.
3. La decisión, en el año 2000, de cerrar casi la mitad de los centrales azucareros de los 153 existentes, por el elevado costo de sus producciones, y posteriormente a la mayoría de ellos, hasta llegar a la cifra de menos de 25 con posibilidades de producir azúcar en el año 2024, resultando finalmente que los que llegaron a moler caña fueron incapaces de producir la cantidad de azúcar necesaria para satisfacer la demanda nacional, es una de las medidas adoptadas por el Estado con las consecuencias más funestas para la economía y la sociedad cubana, especialmente para los miles y miles de ciudadanos cuya vida se desarrollaba relacionada directa o indirectamente con la industria azucarera, incluyendo personal técnico altamente calificado y obreros especializados. Cuba pasó de país exportador de azúcar desde los tiempos que era colonia de España, a tener que recibir donaciones de este producto para su distribución normada. Recientemente se ha hablado, oficialmente, de la necesaria recuperación de la industria azucarera, sin embargo después de transcurridos 24 años, a través de los cuales el grado de deterioro que se ha producido en las instalaciones es tal que resulta muy difícil que el país pueda disponer de los cuantiosos recursos necesarios para hacer realidad la recuperación integral del sector azucarero (agrícola e industrial) sin la participación de empresas extranjeras dispuestas a invertir en esta actividad.
Por último, quiero referirme a la crisis en la generación de electricidad que enfrenta el país desde el 2023 como resultado de no disponer de las cantidades de combustible requeridas a lo que se sumaron las interrupciones en la generación por averías en las unidades generadoras, resultado del grado de deterioro alcanzado.
En marzo de 2023 la información oficial que se dio a la población fue que se había iniciado la reparación de unidades para llegar al verano de ese año en mejores condiciones de generación, sin embargo, al iniciarse el verano comenzaron los apagones debido a la salida de diferentes unidades de generación por averías, como resultado de la no ejecución de los mantenimientos capitales durante cinco años (2018-2023) en ninguna de las unidades en que debían realizarse en ese periodo, obviamente por no recibir la Unión Eléctrica (UNE) el presupuesto necesario para hacerlo al menos en alguna o algunas de las que lo requerían, para evitar que la crisis alcanzara los niveles que alcanzó, con las consiguientes afectaciones a la economía del país que supone la falta de energía eléctrica que se ha producido, de lo cual, por cierto, muy poco o nada se habló de los reportes presentados por el NTV en los primeros días de este mes de enero, sobre los principales resultados de las provincias durante el año 2024 .
La pregunta es: ¿Tenía conciencia la dirección del país de la magnitud de las afectaciones que se producirían por la no realización de las reparaciones capitales en ninguna de las termoeléctricas en las que correspondía hacerlo en el período indicado?. Si la tenía ¿por qué por los medios oficiales (estatales) de información se comunicó a la población, en marzo del 2023, que con las reparaciones que se estaban ejecutando el sistema nacional de generación estaría en mejores condiciones para dar respuesta a la demanda de electricidad en los meses de verano?
Creer que porque residan en Cuba serán mas escuchados, es otra muestra mas de la misma ceguera. El pundonor, el balance, que pone una de cal y otra de arena, solo ha servido hasta ahora para mantener las cosas en el mismo punto, que no es el centro o el equilibrio, sino el de una aceleración gravitatoria como corresponde a cualquier caida. Antes de la pizca de sal y la de arena ya habia una densidad, un peso, que empujaba hacia el abismo: el de hacer oidos sordos a cualquier critica, y si acaso permitirlas a los pudorosos que no desbalancean nada pues por cada gramo de sal, ponen un gramo de arena.