El mundo espera conocer el resultado de las elecciones presidenciales de los Estados Unidos y en Cuba, por supuesto, también se presta absoluta atención al tema. La Isla y quien ha sido durante poco más de seis décadas su enemigo más cercano y encarnizado, tienen lazos muy fuertes que exceden el hecho de encontrarse separados por unos pocos kilómetros de mar.
Muchos cubanos, que han visto preocupados como en estos cuatro años de gobierno del republicano Donald Trump fueron implementadas medidas que afectaron incluso sus relaciones familiares, esperan que un triunfo del demócrata Joe Biden enrumbe las relaciones entre ambos países en la misma dirección que lo hizo la administración Obama.
Al menos en el plano de las promesas electorales, el antiguo vicepresidente demócrata dejó claro en una entrevista ofrecida a CBS 4 News que «sí, la restablecería -refiriéndose a la política de deshielo de Obama-. En gran parte, volvería a ella. Insistiría en que ellos mantuvieran los compromisos que dijeron que crearían cuando nosotros, de hecho, establecimos la política».
Mientras, Donald Trump, en uno de sus últimos movimientos electorales para atraer el voto más a la derecha de la comunidad cubano-americana de Miami, canceló todas las actividades de la Western Union, una de las vías fundamentales para el envío de remesas a la Isla.
Ambas posturas hacia Cuba, aun cuando los dos casos tienen una importante cuota de hostilidad y deseo injerencista, difieren completamente.
Entonces, el resultado de las elecciones presidenciales estadounidenses incidirá directamente en la vida de los cubanos a ambos lados del Estrecho de la Florida. ¿Qué pasará si gana Trump? ¿Qué, si gana Biden?
14 comentarios
Los comentarios están cerrados.
Agregar comentario