La victoria electoral de Javier Milei por un margen tan amplio como de 11 puntos significa un giro a la extrema derecha de la política argentina. Significa asimismo un fracaso del gobierno de Alberto Fernández y de la coalición peronista que se formó hace cuatro años alrededor de su figura y de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Aunque en esta ocasión la victoria fue amplia, no se puede asumir como un apoyo popular a las posiciones radicales pro liberalismo «puro y duro» del candidato de «La Libertad Avanza». En los últimos días de la campaña electoral recibió el apoyo de las fuerzas de otra derecha, menos radical, representada por el ex Presidente Mauricio Macri, derrotado por Fernández hace cuatro años.
La derrota de la coalición peronista-radical era fácilmente predecible en un país con más del 140% de inflación y crecientes cotas de pobreza y de inseguridad. Sin embargo, de alguna manera es sorprendente que Sergio Massa, el candidato de esa coalición, haya ganado en primera vuelta a pesar de ser el ministro de economía del gobierno que carga la culpa de toda esta situación y que, en segunda vuelta, haya obtenido el 44%.
Ello es muestra de la fortaleza tradicional del peronismo, además del temor que causa Milei, y permite prever la reconstrucción de una posible nueva coalición de ese signo en el medio plazo, como ha sucedido antes.
Milei no cuenta con suficiente apoyo en el Congreso para llevar a cabo su programa radical de reforma que, además, inevitablemente afectará a muchos de los que lo votaron.
Finalmente, la victoria de Milei tendrá repercusiones negativas en toda América Latina y el Caribe, donde se estaba creando y fortaleciendo una alianza de gobiernos de izquierda encabezado por los presidentes Lula y Petro. El nuevo presidente argentino se inscribe claramente en una especie de Internacional de las Derechas que se formó inicialmente alrededor de Donald Trump cuando fue presidente de Estados Unidos. De ahí la alegría con la que el futuro candidato a la Casa Blanca por el Partido Republicano norteamericano acogió la noticia.
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